Estrella polar

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—no te creo— le digo al doctor Santamaría

—¿insinúas que estoy diciendo mentiras?— respondió él desde el otro lado del vidrio toqueteando algo en su computadora

—no, supongo que al fin y al cabo hay parte de verdad, aunque el que los rebeldes hayan montado una especie de base es excesivo, la alcaldía jamás habría permitido algo así y menos bajo sus propias narices— le digo pasando la mano por uno de los guantes puestos en la mesa, mirando aún hacia Santamaría.

Refunfuña algo que no logro entender muy bien pero no se preocupa mucho en mí, porque es un ferviente amante de su propio trabajo y no tiene mucho ojo para otra cosa, importa más este traje que bajo cualquier observación sin detalle parece un enterizo de color celeste pálido sin más. Es una de las fichas clave para el desarrollo tecnológico y para detener la locura de Hiperión, y yo soy el que cargo esa responsabilidad. Cuando la alcaldía se dio cuenta de que evidentemente él estaba del lado de los anarquistas sublevados no pensó en otra solución que contrarrestar fuego con fuego: un traje metafísico capaz de hacerle frente

Nunca me ha gustado el nombre "estrella polar" del traje, suena muy raro a mi parecer para una herramienta de batalla aunque los expertos digan que llamarlo tan poéticamente da buena suerte o algo así, también influyó ese brillo leve que desprende la malla fortificada al activar la fuerza ciclón y también el hecho de que se supone que es capaz de guiarnos a la victoria de una guerra silenciosa, así como la estrella polar guiaba antiguamente a los navegantes a su destino

—lo creas o no, esa gente, para crear un traje tan eficiente como el de Hiperión tuvieron que haber tenido algún tipo de instalación tecnológica avanzada, no es como si simplemente fuera coser a aguja e hilo un vestido- dijo volviendo hacia mí —además la fuerza pública jamás ha tenido un rastro de ellos, ni aquí, ni en Fontibón, ni en Usme, son tan hábiles como ratas escondiéndose—

—y lo hacen bien— agregué

—Sólo tú eres capaz de encontrarlos y entre más rápido mejor

—Mi deber es acabar con Hiperión

—No, error jovencito, Hiperión es tan solo un alfil más en el juego: un simple hombre con un traje poderoso que está del bando equivocado, tienes que pensar que acabar con ese criminal es un plus. El objetivo es encontrar a todos aquellos enemigos del estado que no nos dejan progresar, y creo que estaba explícitamente escrito en tu contrato ¿no?— exclama irritado

Diría que sí, que no puedo negarme. Pero yo solo pienso en él, que parece ser la representación de todo lo malo que hay en nuestras localidades, roba, mata y no le importa hacerlo, y representa todo ese caos provocado por la rebeldía. Nos joderíamos de verdad si esa rebeldía estuviera organizada afuera, agazapada, de verdad con un refugio y esperando para atacarnos.

Si están, tengo que encontrarlos antes de que sea peor.

Hiperión y la estrella polarWhere stories live. Discover now