Mi querido rival (Sehun y tú)

Capitulo 1. Primer encuentro

5:30 am, desperté casi de inmediato al oír la alarma. Me levanté y mire al espejo.

-Hoy es el gran inicio- dije para mi. Mientras miraba a mi madre aún dormida en la litera de abajo.

Decidí comenzar a prepararme sin molestarla hasta que sola se despertó. Me miro con una expresión casi indescifrable por la cantidad de sentimientos que reflejaba en ella.

-Ya casi estas lista mi niña, que bueno, apresurare a desayunar no quiero que te andes desmayando en tu primer día en la universidad.

Así es, ese sería mi primer día en la prestigiosa universidad de la ciudad de Seúl y nada más que estudiando medicina. Lo que yo no sabía era que también sería el primer día de mi tormento, de mi purgatorio, castigo divino o como lo quieran llamar.

Salimos del pequeño edificio a buena hora, perfecta como para tomar el autobús que me llevaría hasta la facultad. Mi madre solo iba a acompañarme ese día ya que nosotros no éramos de Seúl, o bueno, yo ahora lo era.

Por muy infantil que parezca mi madre me acompaño hasta la entrada de la facultad y se lo agradecí enormemente ya que no la vería quizás hasta Navidad. Vi un destello bajar por su mejilla cuando se despedía de mí a la distancia, tal y como había sucedido hacia 15 años en mi primer en el jardín de niños... Sólo que ahora, sabía perfectamente que mi madre no estaría ahí cuando yo saliera. Me inundó una ola de tristeza y dolor, y podría jurar que también sentí algo húmedo resbalar por mi mejilla.

Era así, pero mi día tenía que continuar...

La ceremonia de bienvenida comenzó y un profesor me llamó ya que por mi excelente resultado en los exámenes de admisión tendría el derecho de decir algunas palabras junto con otros compañeros sobresalientes, tenía los nervios de punta aunque no era del todo mala hablando en público.

Cuando llegó el momento yo junto con otros 5 compañeros subimos a la plataforma para expresar todos nuestros buenos deseos a la nueva generación. Entre esos chicos pude ver a un chico guapo en verdad, capto por completo mi atención tanto que me olvide de la audiencia. Era alto, 1.82 mts quizás, delgado pero con una figura perfecta, su piel era extremadamente blanca y brillante, su cabello castaño acentuaba aún más sus finos rasgos. Desvíe la mirada cuando sentí que el iba a voltear, quizás por la intensidad de mi mirada y decidí concentrarme en la ceremonia.

Cuando por fin nos dirigimos a las aulas busque al desconocido por todas partes pero fue en vano. Me rendí y con desgana entre a mi aula para ocupar uno de los primeros lugares.

La clase estaba a punto de comenzar cuando -oh oh- vi a Don perfecto entrar y sentí como el aula se silenció y podría jurar que escuche a las chicas cuchichear algunas cosas nada agradables.

Lo vi sentarse dos asientos detrás del mío ya que no había más.

- Muy bien muchachos, les doy la bienvenida a lo que será su nuevo casi hogar, yo soy el Dr. Do Joon y seré su asesor en lo que lo respecta este año, además de impartirles algunas materias. Comencemos con las presentaciones- dijo el profesor, el cual era muy guapo por cierto, le calculaba unos 30 y pocos.

Yo escuchaba las presentaciones sin poner mucha atención hasta que llegó el turno de Don perfecto.

-Hola yo soy Oh Sehun, tengo 19 años y será para mi un placer compartir la carrera de medicina con ustedes- dijo Mi perfecto desconocido el cual ya no lo era más.

Pude notar su clase gracias a la presunción de sus palabras, sonaba muy propio y educado pero algo soberbio. -Lástima- dije para mí.

Estaba tan concentrada en mis pensamientos que no me di cuenta que enseguida sería mi turno, di un saltito por la sorpresa y reí nerviosamente al escuchar otras risas (no quería parecer estúpida así que prefería reírme de mis propios errores).

-Bien- dije juntando mis manos- yo soy Park _______, tengo 18 años y es un placer conocerlos- dije sin más.

-Patético- escuche de los asientos de atrás. No podía creerlo Oh Sehun me había llamado patética? Cada vez me caía peor.