Ahí estás.

Capítulo 42

Nos sentamos en el sillón de su departamento, Bárbara me nota preocupada y me ofrece un vaso de agua. Lo tomo mientras ella acaricia mi pierna sin quitarme la mirada.

B: estás mejor?

M: -deja el vaso sobre una mesa- sí.  

B: contame amor, por qué creés que te siguió alguien?

M: -suspira- cuando venía en viaje, note que atrás venía otro auto casi pegado a mi uber. No me pareció raro hasta que salimos de autopista y el también. El conductor incluso me pregunto si venia con alguien más, cuando le digo que no, me dice que se va a desviar. 

B: pero entonces, lo perdieron o no?

M: si, hasta que faltaban unas cinco cuadras para llegar acá y volvió a aparecer. Cuando me baje, casi corriendo para entrar, estaba estacionado Bar.

B: pudiste ver quien estaba adentro? -pregunta preocupada mientras acariciaba su mano-

M: no, los vidrios estaban polarizados. 

B: bueno,tranquila. Voy a bajar a fijarme si sigue ahí

M: estás loca? No amor. 

B: pero capaz puedo fijarme la patente o algo así. 

M: no Bar, dale. Tengo miedo posta, anda a saber que loco o loca  o lo que sea es. Ya está -dice tomando su mano evitando que termine de levantarse- 

B: -vuelve a acomodarse en el sofá tapando su rostro con las manos- yo sabía

M: qué? -la mira frunciendo su ceño-

B: que no tenía que exponerte amor, si yo no te exponía esto no pasaba. -dice en un tono preocupante-

M: para, no tiene nada que ver, por qué va a tener algo que ver con vos? 

B: y si Mica, mira si era alguien que te siguio para ver si venias a mi casa o a donde ibas. Soy una figura pública y te expuse a esa mierda

M: -se sienta quedando frente a ella y acaricia su rostro- podes parar? -Barbara quita su mirada dirigiendola al suelo- mirame eu -toma suavemente sus mejillas- no te tires la culpa a vos por algo que ni siquiera sabemos.

B: pero -Micaela la interrumpe-

M: te lo conté porque sos mi novia y creí que tenias que saberlo, no para que te culpes. Ya vamos a averiguar o tal vez no vuelva a pasar y solo haya sido un momento horrible y ya.

B: eso espero -dice a lo bajo- 

M: vení. -responde en un susurro acercándose hacia ella- ya está, si? Yo estoy bien. -deja un beso en sus labios-

B: -suspira y luego asiente-  tal vez lo mejor sea que no salgas tanto durante un tiempo en los videos,redes o lo que sea.

M: Bar, no paranoiques, nosotras sabíamos lo que se iba a generar. Sabíamos que estábamos cansadas de escondernos, de estar pendientes de todos los detalles que pudieran mostrarme. 

B: si amor, lo sé. Pero tengo miedo que esto se vaya de las manos, y por mi culpa.

M: si eso pasa no va a ser tu culpa, por que yo también accedí a esto.  Amo acompañarte en lo que haces y ayudarte en lo que puedo, si? -se acerca a su boca para besarla suavemente- 

Barbara se apoyo en mi pecho y nos recostamos en el sofá. Seguimos hablando un rato más del tema en cuestión hasta que nos pudimos distraer poniendo una serie que solemos mirar juntas.

M: Bar, me traes una frazada?

B: -la mira levantando una ceja- perdón?

M: porfis -dice sonriendo de manera compradora-

B: que viva -rie dandole piquitos  y luego levantandose- querés un té?

M: si,dale -responde con otra sonrisa-

Narra Bárbara

Fui hasta la cocina, nos prepare algo caliente para tomar. Y luego busqué la frazada que me habia pedido. Es una noche que amerita lo amerita todo, quiero que se sienta protegida y contenida despues de la situacion rarisima que tanto nos preocupo a ambas, sé que con total de no demostrarme miedo o para no preocuparme, puede fingir que ya lo dejo pasar, pero la conozco demasiado y sé que sigue con cierto temor. 

Me dirijo a la sala donde ella está, la veo con el celular en su mano y con su cara perpleja y pálida mirando la pantalla.