—¿Qué sucedió? Dilo de una vez.

—Tú papá está en el hospital, todo indica que Mouro es el culpable.

—¿Mouro? ¿Por qué haría algo así?

—No lo sé, pero quizás para hacerte ir y así atraparte.

—¿Crees que todo es una trampa?

—Por eso voy, necesito percatarme que todo esté bien.

—¿Crees que es seguro?

—No lo sé.

—Preferiría que no vayas.

—¿De qué hablas?

—Emmet debe estar con él, así que... no creo que sea necesario.

—¿Hablas enserio?

—Sí.

—Em, yo...

—Tranquilo ­—puso su dedo en sus labios—. Mi papá está bien, y yo necesito que tú lo estés, sobre todo para que no permitas que Barbara me dé una verdadera paliza.

Sonrió.

—Daría todo para poder llevarte a vivir a un lugar más bonito.

—Eso no debe preocuparte en este momento. Además, nunca hemos hablado sobre vivir juntos, estoy aquí porque ustedes han sido generosos y me han dado posada.

—¿Te gustaría vivir conmigo en algún momento?

—No creo que sea momento para que preguntes eso, primero necesito que me enseñes a defenderme.

—Te amo Em, te amo. Gracias por estar aquí.

Em, solamente lo besó y ya no dijo nada al respecto.

En el hospital las cosas se veían tranquilas, por suerte los golpes que tenía don Emilio no lo ponían en una situación riesgosa, pero era claro que Emmet era el primero en preocuparse por todo. Le había llamado a Eleazar para comentarle sobre lo sucedido, por lo que su seguridad aumentó.

—No pensé que vendrías —decía Emmet, al verlo llegar.

—Me quise cerciorar de que los hombres fueran prudentes ¿Sabes en dónde están los hombres de Mouro?

—No, no tengo ni idea.

—Bien, y Emily ¿Hablaste con ella?

—No, mi papá me dijo que no la llamara.

—Es lo mejor, igual no puede hacer nada si viene, no es un doctor.

—¿Qué crees que pasará ahora?

—No tengo ni la menor idea, pero es claro que esto que hizo, es para que Emily venga. ¿Ya sabe que está con los Burgo?

—Sí.

—¡Vaya! ¡Qué sorpresa! —decía Mouro acercándose.

—Mouro ¿Qué tal? —saludó Eleazar.

Era difícil que se intimidara. Emmet por su parte se puso nervioso.

—Pensé en muchas personas que posiblemente vendrían. Jamás estuviste en mi lista.

—Siendo sinceros, yo tampoco esperaba verte en un hospital.

—Hablemos claro Eleazar, ¿Qué estás haciendo aquí?

—Vine por algunos problemas de salud que tengo, y para mi sorpresa me encontré con un amigo, un viejo amigo. Te presento a Emmet Preston, su padre fue golpeado está mañana. Espero que estés aquí para tomar datos e investigar quién hizo esto, los conozco desde años y sé que son buenas personas.

Huracán ✔️Where stories live. Discover now