One-Shot

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En la Academia Gintama, los chicos eran revoltosos y muchos eran mal educados a excepción de unos pocos que podían ser contados con los dedos de la mano, tan solo cinco chicos llegaban a tiempo al salón de clases, solo ellos cinco hacían las tareas y sacaban buenas notas en los exámenes de la academia, los demás eran un caso perdido, uno de los chicos revoltosos era conocido como "Él Mayora" por que a el le gustaba demasiado la mayonesa por así decirlo, la persona de la que estoy hablando es Hijikata Toshiro, el cual estaba secretamente enamorado de la Profesora Ginko; una albina con un cuerpo candente que traía locos a todos en la academia, ya fueran profesores o alumnos.

A Hijikata ese cuerpo eran tal y como le gustaban, como no si Ginko-sensei sabía que traía locos a todos los hombres por lo cual usaba blusas ajustadas y faldas cortas, mostrando sus piernas; sin mencionar unos lentes que la hacían ver más sexy, el fetiche de todo hombre una mujer mayo con un buen cuerpo, una cara inocente y unos hermosos lentes ¿Qué más podían pedir? Nada, por que ella lo tenia todo y a la vez más que la descripción que podían hacer.

Un dia como cualquier otro en la academia Gintama hubo un suceso inesperado, era el horario de clases de historia; la clase que daba Ginko-sensei he Hijikata se encontraba en el salón de clases y no había llegado tarde como sus demás compañeros los cinco que siempre estaban puntualmente en clases y llegaban a la hora se sorprendieron completamente ¿Qué había sucedido para que el segundo al mando de la pandilla de matones de la academia Gintama llegara a la hora? Nadie lo sabía y no querían preguntar tampoco.

La clase transcurrió de manera normal, ya que el resto de alumnos llegaron tarde como era de costumbre, al terminar la clase; Gintoki-sensei le pidió a Hijikata que se quedara después de clases que quería hablar con él, a esto Hijikata no se pudo negar por lo cual espero en la sala de clases a que Ginko-sensei lo llamara a una aula de asesoría estudiantil, pero no lo llamo ni nada ella llego al aula donde se encontraba el pelinegro exaltada como si estuviera huyendo de alguien, en lo cual no había duda ya que después entro un profesor él cual se sabía que andaba detrás de la Sensei el cual le puso el brazo encima de la cabeza aprovechando que Ginko-sensei era de estatura baja.

La clase transcurrió de manera normal, ya que el resto de alumnos llegaron tarde como era de costumbre, al terminar la clase; Gintoki-sensei le pidió a Hijikata que se quedara después de clases que quería hablar con él, a esto Hijikata no se pudo ...

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- ¿Qué haces Ginko? No te escapes de mí, recuerda que aun no me das la respuesta mi propuesta de matrimonio y estoy ansioso de escucharla. -hablo Zuko-sensei.

Él enseña matemáticas es la clase que siempre me saltaba por que lo odiaba y ahora lo odio más quiere arrebatarme a Ginko-sensei, sin siquiera haber hecho un movimiento con ella.

Al parecer ellos no se habían dado cuenta de mi presencia ya que Zuko-sensei iba a besar a Ginko-sensei, si yo no me hubiera movido ese maldito bastardo teñido hubiera robado un beso de los labios de la hermosa Ginko y eso no estaba dispuesto a permitirlo.

- Oh Hijikata ¿Estabas aquí? Perdona que tuvieras que ver este tipo de escena, es que el maestro Zuko no entiende que no me voy a casar con el y no deja de hostigarme, sinceramente me tiene harta. -Dijo Ginko-sensei enojada y mirando de mala manera al rubio que no la dejaba en paz.

Enamorado De Ginko-SenseiWhere stories live. Discover now