Capítulo 1

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Jeon Jungkook, era el nombre del chico que caminaba por la acera con total tranquilidad...se dirigía a su casa, pues su jornada escolar había terminado. Mientras avanzaba, miles de pensamientos lo tenían distraido, la consecuencia fue resbalarse dolorosamente en el frío pavimento. Cayó de senton, un quejido de dolor salió de su boca, maldecía mentalmente al objeto, que junto con su descuido, provocaron esa vergonzosa situación; allí, frente a él, se hallaba una hermosa llave verde, que brillaba con los rayos del sol. La parte superior tenía forma de espiral y piedrecillas transparentes, como si fueran diamantes, le adornaban.

—Supongo que no te puedo culpar, eres muy bonita. — musitó el joven mientras se sobaba la parte afectada, y después tomó dicho objeto entre sus manos.

Inmediatamente, una extraña sensación invadió todo su cuerpo, haciendo que soltara la llave... Ésta, al dar contra el piso, emitió un quejido, lo que dejó a Jungkook helado.

—¿Por qué hiciste eso, humano? ¡¿Crees que no duele?! —aun en el suelo, Jungkook retrocedió. Lo que escuchó no podía ser verdad... —Pfff! ¡Sólo sacame de aquí! — aún atónito, se levantó lento del piso, su cuerpo no respondía como debía. En cuanto estuvo de pie corrió despavorido y no se detuvo hasta entrar en casa.

—¡¿Qué diablos fue eso?! — gritó hecho bolita en una esquina de su habitación.

—Humanos.— musitó aquella voz.

—¡¿Qué?! —Se alarmó... Con la mirada recorría toda su habitación tratando de encontrar la llave.

—Estoy aquí, torpe. — exclamó con tono burlesco la llave, que se encontraba colgando de una fina cadena en el cuello del castaño.

—¡¿Cómo?! — se exaltó más, tratando de arrancarla de su cuello, pero era imposible.

—Eres muy ruidoso.— Se quejó. — Te diré algo, es inútil, no importa lo que hagas, el único que puede separarnos es el mago. Pero irónicamente, es la persona menos indicada. — suspiró.

—...— Jungkook dejó de jalar la llave, y decidió rendirse. Aún seguía asustado, pero no conseguiría nada actuando así.— ¿Quién eres? — preguntó con un tono de voz ya más calmado. — ¿Por qué puedes hablar? — el contrario volvió a suspirar.

—Sé que sonará raro, pero antes de explicarte todo necesito que me hagas un favor.— Jungkook asintió no muy convencido.— Bueno, que sean dos favores.

—Esta bien..— accedió el castaño.

—Chico obediente eh, mucho mejor. — aclaró su voz.— Primero, no te vayas a asustar, y segundo, sigue mis instrucciones. — hizo una pausa para que su opuesto pudiera asimilar lo que acababa de decir. — Bien, tomame entre tus manos... Ahora repite las siguientes palabras...

—Espíritu del viento, yo, tu portador, te consedo la libertad de salir de esa llave para que tomes tu forma humana. — repitió tal como se le había indicado.

La llave reaccionó a sus palabras, iluminándose. Y una pequeño remolino salió de ella; este crecía rápidamente hasta tomar forma humana.

Él dijo que no se asustara, y admitamoslo, al principio lo hizo ¿quién no lo haría? Sin embargo, cuando vio su forma humana quedó embobado; delante de él había un ser completamente hermoso, su piel tan perfecta y clara, sus cabellos parecían sedosos y estaban ligeramente despeinados, sus labios, su nariz, todo perfectamente simétrico, todo en perfecto estado, sin ninguna imperfección de por medio.

Él dijo que no se asustara, y admitamoslo, al principio lo hizo ¿quién no lo haría? Sin embargo, cuando vio su forma humana quedó embobado; delante de él había un ser completamente hermoso, su piel tan perfecta y clara, sus cabellos parecían sedos...

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—Nos vemos la cara al fin, precioso. —sonrió ladino.— Mi nombre es Taehyung y soy uno de los 4 elementos.

Pov Jungkook

Después de que Taehyung me explicara como llegó hasta el pavimento, más dudas llegaron a mí.

—Entonces, ¿por qué dices que ahora estamos atados y que sólo ese mago nos puede liberar? — Taehyung sonrió levemente.

—Verás... Él se aseguró de hacer un hechizo para que las llaves sólo pudieran ser usadas por gente con un gran poder espiritual, creyendo que era el único que tenía tal poder. Esas llaves están diseñadas para adherirse automáticamente a dichas personas, así nos podría manipular más fácilmente. — Oía sus palabras, pero no podía dejar de mirar sus labios mientras hablaba. — Y, como él las creó, es el único que puede deshacer ese hechizo que me mantiene pegado a ti, ¿entiendes? —asenti muy despacio, todo era complicado pero lograba saber a que se refería.

—¿Y las otras llaves? — pregunté curioso.

—No lo sé, todas nos separamos. — respondió con simpleza.

—¿Entonces tú eres de viento? — Tae rió levemente, negando con la cabeza.

—Yo soy el viento.— Corrigió.

—Ah, ¿y qué me dices de...? — me vi interrumpido por su cercanía a mi rostro.

—Eres muy curioso, ¿no te parece? — su voz se escuchaba más grave que las veces anteriores. — ¿Sabes lo que les pasa a los curiosos? — susurró contra mis labios sin dejar de mirarme a los ojos.

Mi cuerpo se estremeció y mi rostro enrojeció. Él lo notó, riéndose por mi reacción se alejó de mí.

—Al parecer esto no será tan aburrido como creí. — dijo subiendo a mi cama.

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Hasta aquí el capítulo 1, espero que le den mucho amor uwu
Los adoro, mi gente hermosa <3

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