La hermana de Yamada (Aizawa x tu)

Capitulo 03

La claridad que traspasa las cortinas me despierta, con pereza me estiro en la pequeña cama y me siento en esta. Me froto los ojos y logro ponerme en pie. El silencio reina en la casa, muy extraño para estar en la casa de Mic. Me dirijo al salón en busca de vida humana, ¿estará durmiendo? Miro al reloj que cuelga de la pared, las 9.30, suelto un sonoro bostezo y voy a la cocina para servirme un vaso de agua pero una nota encima de la península me llama la atención, pone para _____, así que me dispongo a abrirla:

"_____ si estás leyendo esto es que estas despierta, obviamente, he tenido que irme a arreglar unos temas de la UA. Saldré a las 17:00, siento no poder estar contigo, pero si te sirve de consuelo luego podríamos ir a cenar a un restaurante, donde hacen unos platos deliciosos (como los tuyos ^^), te dejo dinero en el sobre de al lado, para que puedas ir a comprarte ropa (por cierto tienes algo de ropa en mi cuarto), por cierto, Aizawa suele estar borde por las mañanas, intentar no estrangularlo. Nos vemos después pequeña.

PD: ¿podrías darle de comer la gata? (Aizawa debe de estar cansado) Estás en tu casa

KISSES!! MIC "

Con nostalgia mira la nota para luego dejarla donde la había cogido. Preparo una cafetera y mientras esta se hace, salgo a la terraza para poder ponerle la comida al gato, como me había pedido Mic. En cuanto toca la comida el plato velozmente aparece el gato. Se frota en mi pierna y con una sonrisa le acaricio.

-Buenos días pequeña- como si me hubiera entendido me mira, maúlla para luego ponerse a comer- que aproveche

Vuelvo a entrar y me dirijo al cuarto de Mic, para poder vestirme antes de tomarme el café.

Encima de un escritorio lleno de papeleo veo unas cuantas prendas y otra nota.

"Sírvete tu misma, busque ropa de cuando era joven al ver cómo de grande te quedaba el pijama de ayer. MIC "

Rebusco en esas ropas hasta encontrar algo que ponerme. Me decido por unos pantalones marrones que remango y una camisa blanca lisa de manga corta que me queda bastante bien y me vuelvo a poner las zapatillas negras de ayer, me miro en el espejo de la habitación, aceptable.

Voy a la cocina para apagar la cafetera y antes de poder servirme mi taza, escucho algunos ruidos en la terraza, me acerco y al abrir la cristalera veo a alguien apoyado en la pared de la casa, lo reconozco al girarse y poder ver su cara, Aizawa.

Me mira, se levanta y como saludo le doy una sonrisa, se acerca y por un momento se me para el corazón al sentirlo tan cerca al entrar a la casa.

-Buenos días, Mic no está, fue a arreglar algo de la UA- digo sirviéndome por fin mi taza de humeante café, el me mira desde el sofá, desvía la vista rápidamente al sentir a la gata montada en su regazo. Aizawa hace una mueca de dolor que llama mi atención- ¿Estás bien?-pregunto acercándome un poco preocupada.

-Si, tuve un pequeño... problema antes- dice apartando con sumo cuidado a la gata, posa su mano en su costado y suelta un gruñido. La gata y yo le miramos preocupadas- No es nada.

-Muéstramelo – digo sentándome al lado de él - déjame examinarlo, se algo de primeros auxilios, podría ayudarte...- me mira por unos segundos, suelta un bufido y se pone de pie. Se recoge el pelo y se sube la camisa lo suficiente como para poder ver la herida que escondía bajo su uniforme.