Capítulo 28.

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Joey

-Madison- dijo su madre acercándose a ella, ella alzó la mirada -Joey vino a verte- dijo señalándome, ella me miró y sonrió ampliamente, su expresión era hermosa.

-Joey!- Grito un poco.

Vestía con un gran suéter color gris, su cabello estaba suelto y seguía teniendo ese hermoso brillo, me acerqué a ella y la abracé con todas mis fuerzas.

-Dios, me moría por verte- Dije apunto de llorar.

-Y yo a ti....- dijo rodeándome por el cuello.

-Uhm, Maddie, tu quimioterapia- dijo una enfermera entrando a la habitación.

-Oh si, uhm Joey ella es Maggie, mi enfermera- nos presento.

-¿Nos disculparías unos momentos en lo que hago esto?- Pregunto Maggie con una sonrisa. Asentí y me aleje de la camilla.

-J-Joey...uhm, quiero decirte algo- dijo la madre de Madison. Me acerqué a ella y salimos de la habitación, afuera de esta se encontraba su padre, Taylor y una pequeña niña rubia la cual creo era Alisson, semi dormida sentada en las piernas de el.

-Iré con Alisson a la cafetería- dijo Taylor levantándose con la niña agarrada de la mano y dirigiéndose al ascensor.

La madre de Madison me tomó de la mano guiándome hacia una pequeña esquina alejada de la habitación de ella. Por alguna razón esto me ponía nervioso.

-¿Que sucede señora Brooks?- Pregunté. Ya que ella solo miraba el suelo.

-Joey, tienes 16 años, ¿cierto?- asentí -Dime, mi hija... ¿fue tu primer amor?- Su pregunta me desconcertó bastante, ya que no esperaba que preguntara eso.

-Si, claro, jamás había sentido por alguien lo que siento por su hija señora, yo amo a su hija, es lo mejor que me ha pasado en esta corta edad...- admití.

-Joey...- pausó, poniendo sus manos en mis hombros- No quiero que estés cerca de ella, no quiero que los dos sufran...- dijo, pude ver como pequeñas lágrimas se acumulaban en sus ojos.

-¿De que carajos está hablando?¿Usted quiere que yo abandone a Madison?¿cuando ella está en una situación así?- asintió, reí irónico -Usted está loca si cree que me alejaré así como así- Dije cruzándome de brazos, estaba enojado, demasiado.

-Joey, tu no entiendes NADA!- aclaró.

-Claro que entiendo todo! Usted!- la señale -Es la que no entiende NADA aquí! Yo jamás dejaría a Madison en estas condiciones- aclare nuevamente, gritando.

-JOEY! Lo hago por tu también! No quiero que sufras por mi hija!-

-¿QUE CARAJOS LE PASA?- la aleje de mi.

-EL CÁNCER DE MI HIJA SE EXPANDE!- dijo por último.

-¿Q-Que?- Pregunté confundido, realmente no entendía lo que quería decirme.

-Que mi hija está siendo jodidamente invadida por el cáncer! Todo su cuerpo se está llenando de cáncer y no hay vuelta atrás!- dijo llorando desconsoladamente -Solo nos queda esperar un jodido milagro para que no muera!- lloró aún más.

-No no no no no- Dije retrocediendo procesando las palabras que había dicho, no podía ser cierto, tenia que estar soñando, esto tenía que ser una pesadilla de la cual pronto despertaría, tiene que serlo por favor.

Sentí como mis lágrimas comenzaban a bajar rápidamente por mis mejillas, sentía mi vista nublada por las lágrimas y mi cabeza comenzó a doler.

-No puede ser posible- Dije golpeando la pared detrás de mi, sentí como la madre de Madison me abrazaba por la espalda. -¿Ella lo sabe?-

-Si. Solo nos queda hacerla feliz el tiempo que le quede, así sean días, o años- dijo me voltee y la abrace.

-Lo se- me aparte de ella, mire hacia el techo y volví mi vista hacia ella -Y es por eso que jamás me alejaré de ella- dije firme.

-Esta bien Joey, solo.... hazla feliz-

-Lo haré-

Después de eso me dirigí hacia el baño, limpié mi rostro y volví hacia la habitación de Madison, ya un poco más fresco y sin la hinchazón en los ojos.

Madison

-¿Con que él es Joey?- dijo Maggie levantando sus cejas pícaramente.

-Si- dije sonrojándome.

-Es TAN lindo- dijo imitando la voz de una chica adolescente, como yo.

-Calla!- grite en broma.

-Se ve que ese chico te quiere- admitió.

-Y lo hace- dije sonriendo de lado.

Joey a sido lo mejor que me a pasado desde que llegue a esta ciudad, algo que me parte el alma es saber que probablemente jamás formemos una familia, que jamás tengamos nuestra propia casa y que jamás vaya a volver a verlo...

Una lágrima bajo por mi mejilla y un sollozo se escapó de mi boca haciendo que Maggie me mirara.

-¿Que sucede linda?- dijo acariciando mi rostro.

-No me quiero ir Maggie- lloriquee -No quiero dejar a Joey- Dije para después abrazarla.

-Oh Cariño!- acarició mi cabello- Escucha, tu no te irás de aquí,tu serás fuerte, y saldrás de esta, solo confía en que todo saldrá bien, tendrás una familia, y vivirás eternamente feliz pequeña- dijo mientras lágrimas se resbalaban lentamente por sus mejillas.

-Tengo miedo, mucho miedo...- pause -Soy claustrofobica Maggie, y la idea de estar dentro de un ataúd, encerrada, me aterra- Dije agarrándola fuertemente de los brazos.

-No digas esas cosas, tu saldrás de esta cariño, tu vas a derrotar el cáncer, el cáncer no te derrotará a ti, tenlo por seguro- dijo acunando mis mejillas.

Después de un rato, mis lágrimas ya se habían secado y  Joey entró a la habitación después de hablar con mi madre, me partía verlo feliz, creyendo que saldría de esta, aunque yo sabía perfectamente que no.

Joey

-¿Como estás?- Pregunté tomándola de la mano, ella se encontraba en la camilla sentada y yo Justo a lado de ella parado. Estábamos solos.

-Bien, creo- sonrió de lado, mierda, no se que haría sin ver esa sonrisa.

-¿Cuando saldrás de aquí?-

-Mañana me iré a casa-

-De acuerdo, hasta luego princesa, tengo cosas que hacer- Dije dándole un beso en la frente para después retirarme.

Tenía algo planeado, pasaría cada día, cada segundo, cada minuto, cada hora y momento con ella, cada momento.

Sin importar que.

***

-AlishaMadison⛈🌈

Forever by your side || JMBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora