Capitulo 5 El despertar

9 0 0
                                    


Las olas rompen contra las rocas de la costa, están lejos, solo se las oye como un murmullo.

Miro el horizonte con el océano infinito extendiéndose a mi mis pies, todo se ve por lo bajo, miro mi vestido, se encuentra lleno de volados, color pastel con tiras blancas.

Sin embargo no dejo de caminar, tengo los pies descansos, y una de mis manos esta ocupada rodeada por la de alguien mas, se siente tibio y envolvente. Alzo la vista, y es mi madre, su pelo juega con el viento mientras observa la costa, sus ojos se anclan en la cúpula de la catedral mas cercana. Mientras, la campanas suenan anunciando la misa.

- Princesa – escucho llamarme por la espalda. Es la voz de mi padre, acompañada por el chapoteo de la orilla bañada en sal mientras Tiamat hace su trabajo.
Mi madre se detiene junto a mi, y ambas nos volteamos a sonreírle, Ahí esta mi padre, con su porte impoluto y su cabello castaño perfectamente arreglado, debo de tener no mas de seis años, ya que lo veo inmenso frente a mi.

Se agacha y me da mis zapatitos, los cuales entran en la palma de su mano. Los tomo con los dos dedos y luego se vuelve a poner de pie, toma a mi madre de la cintura continua la caminata con nosotras en camino a la iglesia.

A la siguiente campanada todo se desvaneció y desperté de golpe, me encontraba en el auto de Santos, recién estacionado frente a Suquía.

- Llegamos – anuncio mientras me tomaba suavemente del hombro para despertarme.
- oh, perdón – digo presionándome la cienes rogando no haber roncado minutos antes.

- Esta bien, es tarde- contesta con una sonrrisa divertido y la mirada cargada de ternura.- lo que si tengo suma curiosidad por lo que soñabas.

- Por que?

- Balbuceas dormida sabias?

Me sonrroje a mas no poder, mientras le contemplaba asustada

- y, que dije? -

- No tengo idea, eso sonaba completamente ilegible. Que soñaste?

- Solo... recordaba cuando mis padres me llevaban a misa.

- Que pesadilla

- No, no, era un sueño agradable, sucedía antes de llagar a la catedral. Había un playa... - divague observando la guantera con la mirada perdida.

- Eres católica?

- No precisamente, soy mas bien agnóstica , sin embargo la fe es lo ultimo que se pierde.

- Ya veo...

- y tu?

- Yo ni siquiera estoy bautizado.

- Pero bajo ninguna religión?

- No, mis padres querían que lo decidiera de adulto.

- Y lo decidiste?

- No necesito decidir, estoy vivo, metido sin motivo alguno en este planeta, eso es todo lo que cuenta.

- Y nunca sentiste curiosidad?


- Por la muerte? No, ya me enteraré lo que hay ahí cuando pase al otro lado.

- Ya veo...

- Si e tenido curiosidad por algunas religiones por sus costumbres y rituales. En su mayoría siempre tuve mas interés en la Budista , Musulmana , y e india. Pero nunca me han convencido del todo.
- Y la católica?

- Una vez de pequeño les pedí a mis padres ir a misa.

- Y que te respondieron?

- Mi madre me pregunto por que, y les dije que quería saber que pasaba allí, y que todos iban menos yo . A lo cual... ella sin mediar palabra nos vistió con ropa formal y me acompaño hasta la puerta de la iglesia. Una vez llegamos allí se quedo parada y dijo que entrara solo, que luego ella pasaría a recogerme en cuanto el sermón terminase.

La leyenda de Noel (Novela)Where stories live. Discover now