Fucking Love » Lee Taeyong

u n o

Negué con mi cabeza hasta que Jaehyun desapareció de mi campo visual. Mi respiración se había regularizado, solamente tenía la incómoda camisa del colegio pegada a mi espalda. Caminé lento a mi salón, viendo por la ventana los rostros aburridos de mis compañeros. Parece que la clase estaba muy emocionante.

Abrí la puerta del salón sin tocar y todas las miradas se dirigieron hacia mi persona, incluida la profesora Choi que tenía un rostro serio, sin emoción alguna. 

—¿Esto es en serio, Lee? —se cruzó de brazos dándome una mirada decepcionada. Asentí—. Ve a tomar asiento al final, no harás el control.

—Pero llegué temprano para hacerlo —expliqué algo inconforme, para eso mejor me hubiera saltado la clase.

—Puedo apostar a que no alcanzaras ni el uno como nota, nunca llegas temprano a esta clase y hoy no es la excepción —bufé girando mi cabeza hacia mis compañeros, encontrándome con cada uno de sus rostros, prestando atención a la escena. Al verme, de inmediato agacharon sus cabezas volviendo al control.

—Bien —respondí rodando mis ojos, yendo hacia el final del salón. Hacía frío, todavía sentía algo de sueño y no podía usar mi celular porque la profesora Choi no lo permitía y yo cumplía con las reglas dentro de la sala... algunas veces.

El sonido de alguien golpeando la puerta llamó mi atención y me concentré en la profesora caminando a abrirla. Al hacerlo, sonrió amable y asentía a lo que decía alguien, aunque no podía distinguir la voz.

De pronto, la mirada de la profesora Choi decayó en mí, haciendo una señal con su mano para que me acercara. Me paré de mi puesto con la frente arrugada, ¿quién era mi salvador a esta hora? 

Llegué a la puerta y ahí estaba Jaehyun junto a Doyoung. Ambos estaban con un semblante serio.

—Te necesitan en dirección según estos muchachos —habló la mayor, a lo que mis amigos asintieron. Reprimí una carcajada al morder mi labio y asentí saliendo de la sala. 

Al cerrar la puerta, los rostros de los tres cambió por una sonrisa y reímos silenciosamente.

—¿Cómo los dejaron salir? —pregunté ya lejos de mi salón, llegando a las afueras del baño de hombres. 

—Dije que venía al baño —dijo Doyoung y apuntó a Jaehyun—. Yoon Oh no entró a clases y me envío un mensaje.

—Son unos idiotas, pero agradezco que me hayan sacado de allí, no me dejaron hacer el control y estaba aburrido —conté sacando el celular de mi bolsillo a la par que nos sentábamos en una banca cercana.          

—Menos mal aquí no hace frío —escuché decir a Jaehyun, pero todo a mi alrededor desapareció para concentrarme en mi celular.

Entré a la conversación que tenía con Minji, la que tenía agendada como tía Kimi para que mis amigos no sospecharan nada. Leí nuestra última conversación: Minji me había contado sobre un reforzamiento de filosofía todos los jueves en la tarde, me parecía sumamente aburrido e innecesario dado a que detestaba esa clase, pero me convenció al decir que al termino de la clase, podríamos tener tiempo para hacer nuestras cosas. Solamente me inscribiría por eso.

—¿Mina? —alcé la mirada al escuchar a Doyoung. Una chica castaña nos observaba a los tres, estaba saliendo del baño de chicos y sus ojos parecían hinchados. 

—Chicos, ¿qué hacen aquí? —frunció los labios, acercándose a nosotros.

—La pregunta es qué haces aquí tú —Jaehyun la miró con una sonrisa traviesa y abrí mis ojos sorprendido. Nunca lo había visto sonreír así a una chica.