every breath you take; dunior

8

Año Nuevo.

Uno no sabe cuando llegaran cosas buenas a su vida, ni tampoco cuando todas esas cosas buenas se arruinarán.

Lars había organizado una fiesta en su casa con todo lo de siempre: alcohol, drogas y más alcohol.

Me encontraba sentado en la sala, mirando a una pareja compartiendo besos y esas cosas. A mí lado estaba Gary Holt y Paul Baloff, hablando sobre cosas que apenas entendían ya que estaban muy ebrios y drogados quizá. La mayoría de los asistentes se agrupaban en la cocina, alentando a un par de tipos que bebían latas de cerveza apresuradamente, como si su mayor premio fuese una resaca al día siguiente.

Me distraje pensando en las notas en mi cajón, y como de vez en cuando, comencé a imaginarte.

— ¡Dave! —escuché a James apenas, entrando desde el jardín trasero. Venía acompañado de un apar de chicos algo menores, que miraban todo muy fascinados. El rubio me saludó y sonrió, acercando a uno de los adolescentes y tomándole de la mano—. Quiero presentarte a Kirk —mencionó, sonriendo. Me levanté por cortesía y para hacer el momento más cómodo. Había escuchado de él y por eso, sabía que James estaba muy feliz con su relación—. Dave, él es mi novio Kirk—lo presentó—, Kirk, él es Dave, mi mejor amigo.

— Dave Mustaine —dije, ofreciéndole mi mano—. Un gusto.

— Kirk Hammett —sonrió, asiendo mi mano con fuerza.

— Él es nuestro guitarrista también, amor —James sonrió.

— ¿En verdad?

Asentí.

— Debo decirte que tocas de puta madre —mencionó el de bellos rizos—. James me ha dejado escuchar algunas de las cintas que han grabado y creo que tu técnica es excelente.

Me sonroje un poco al escucharle ya que, si soy honesto contigo, nunca pensé que mi trabajo fuese tan bueno.

— James ha hablado mucho de ti también respecto a tu técnica —sonreí—, me gustaría escucharte alguna vez.

— Seguro que sí —asintió y una sonrisa surco su rostro, marcando dos hoyuelos al lado de sus comisuras labiales.

— Para el próximo fin de semana podríamos juntarnos, en mi casa o quizá puedas ir al ensayo —miré a James.

— Oh, claro, yo lo llevo —el rubio dejó escapar una risa.

— Oh, y... —pausó el moreno, mirando al otro chico que permaneció detrás de ellos—, casi lo olvido —dejó escapar una risa—; él es mi mejor amigo, Dave —los tres le miramos.

Involuntariamente mi atención recayó sobre él unos segundos, sin impirtarme si le incomodaba; era un tipo bien parecido de cabellos castaños, un poco más bajo que yo y de bellos ojos aceitunados.

Luego de unos segundos, reaccioné, sintiéndome apenado.

— Dave Mustaine —mi voz escapó áspera, mientras le ofrecía mi mano como había hecho con Kirk.

— D-David Ellefson —estiró su mano para estrechar la mía y al momento de establecer el contacto, esbozó una bella sonrisa.

Una sensación cálida me invadió, y aún tratando de evitarlo, algo en él me atrapo, ¿qué era? Nunca lo supe, pero ahí estaba.

Y lo lamento, pero mi percepción sobre ti cambió por completo en ese momento; al conocerlo.

Miércoles 31 de Diciembre, 1980.