Break my heart| Fanfic fillie| Book#1|

♡Nineteen♡

-Duele, Duele, OH RAYOS, ¡DUELE MUCHO!.- las exigencias de Millie no ayudaban a la pobre chica del salón de belleza.

Eran las 12:30 de un sábado 7 de julio, caluroso con algunas alertas de tormenta, el salón de belleza estaba un poco vacío, algunas señoras ya mayores retocando sus habituales colores en sus ya viejos cabellos, Algunas chicas de la práctica de maquillaje haciendo su magia, Millie se encontraba hay justo para aplicarse unas extensiones que hacían que su cabello cayera por debajo de sus hombros y terminara un poco más abajo.

Fue idea de mamá.

El peinado sería dos moños al estilo de Pucca, un maquillaje sencillo, todo a juego con el exuberante vestido de precio millonario (Oh noten la exageración).

Aún era muy temprano para comenzar con los preparativos, el baile comenzaba a las 6:30, Millie llamó a Finn desde temprano ya que debía de recordarle pasar por su traje a las 2:30 pero éste jamás contesto, su última conexión en WhattsApp no era visible por lo cuál Millie no sabía si la ignoraba o Finn estaba flotando en el océano Atlántico.

Llamó a Noah quién contesto adormilado preguntándose por qué lo llamaba tan temprano, Millie contesto que eran las 12:30, un "Carajo es tarde" salió de la boca del chico.

Sadie y Sophia le hicieron saber a Millie que estaban en sus mismas circunstancias ya que en la llamada podía escuchar a Shopia gritar que no tocarán su cabello, por su parte Sadie trataba de calmar a la furiosa Shopia que tampoco dejaba aplicarse la base para maquillaje.

Al son de una canción que era desconocida para la ahora castaña de cabellos semi largos, movía sus pies de manera nerviosa, Jaeden llamó sólo para preguntar que si a que horas pasaba por ella, Millie sólo contesto que a las 6:00, A lo que Jaeden dijo que entonces a las 6:30 para llegar un poco tarde.

La del salón de belleza termino de aplicar las extensiones y hizo el peinado, aún no era tiempo del maquillaje, la chica le dio un receso de una hora a Millie para que fuese a comer algo ya que ya eran las 3:30, Millie aceptó y le pidió ir a su madre al restaurante de Sushi que se encontraba en el centro de la ciudad.

Al llegar al restaurante, Millie y la señora Brown se tomaron su tiempo, ya saben la típica charla que las madres o en el peor caso el conjunto de los padres te dan sobre salir con chicos si es que eres chica, sobre lo que está bien, lo que está mal Y lo que está delicioso (Así lo dijo la madre de Millie no juzguen), la pobre casi se atragantó con el rollo de cielo y tierra cuando su madre insinuó que por fin daría su primer beso, nota: Jamás de los jamases le fíes el secreto de que no has besado a nadie a mamá.

De la incomodidad a las risas, Millie comió nada más y nada menos que la cantidad de 10 rollos, su madre repetía "Millie te dolerá el estómago, no te cerrará el vestido", Millie hacia oídos sordos.

De regreso al salón de belleza los nervios de Millie comenzaban a causar estragos, eran las 5:00, la chica dijo que terminaría a las 6:00 y aún tenía que llegar a ponerse el vestido, esperar a Jaeden, ¡Estrés adolecente!.

Al llegar primero limpiaron el rostro de Millie y aplicaron hidratante, después primer, le hicieron las cejas, aplicaron una delicada sombra rosa y púrpura, un poco de brillantina en sus párpados, aplicaron una base ligera pero cubriente, rizaron sus pestañas, al final sólo aplicaron un labial rosa y listo.

Realmente lucía muy bien, su madre sonrió mostrando sus dientes casi perfectos, contenta con el resultado, pagó los servicios y fueron a casa para que Millie fuera a ponerse el vestido.

En el  transcurso a casa aún insistente Millie llamaba al celular de Finn, quien ahora si contesto.

- Oh Millie estaba dormido...- Se quejó.- Mi madre fue por el traje, no te preocupes, estaré en el baile a las 7:00.- su voz sonaba más ronca de lo normal.

- Oh están bien señor Wolfhard.- Contestó riendo para colgar.

Llegando a casa, la chica Brown corrió a su habitación para ponerse el vestido, junto con unos Converse blancos, tomo su celular y eran las 6:20, Jaeden casi estaría en casa, faltaban sólo 10 minutos, texteo rápido antes de bajar a esperar en la sala de estar.

》Ya casi es hora《
          6:23pm 
》Oh genial mills, ten cuidado《
          6:23pm

Esperó en la sala de estar por unos minutos pero la presencia de Jaeden no se hacia llegar, Millie comenzaba a tener hambre de nuevo, pero sabía que no debía comer nada hasta el baile, el ruido de un auto hizo que sus instintos se activaran, se puso rápidamente de pie y camino unos pasos hasta la puerta para abrirla enseguida.

Jaeden bajo de una camioneta que parecía que había salido justo de la agencia hacia unos minutos, era de un color negro brillante, las luces led iluminaban a su paso la calle frente a ellas, lo que más sorprendió a Millie era que Jaeden era el conductor.

-Señorita Millie Bobby Brown hoy seré su conductor designado.- Éste sonrió y Millie lo miro nerviosa.

-Oh, está bien Sólo que mamá quiere tomarnos unas fotos, ¿Podrías entrar?.- Jaeden asintió y entró después de Millie.

Mil fotos después Millie y Jaeden pudieron seguir su destino que era el baile.

Al llegar todo estaba muy bien decorado y eso que aún no entraban, chicos por aquí, chicos por allá, todos mostraban lindas prendas acordé a la ocasión.

Jaeden aparco el auto y bajo para ayudar a Millie, la cuál a la hora de que el diera la vuelta ya había bajado.

Los dos caminaron un poco hasta la entrada, el celular de Millie vibró, era una llamada de Finn.

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🥑Sólo falta uno, ¡UNO!🥑

Les tengo una sorpresa...