Secretos Enterrados [Aguslina]

capítulo 13

Carolina caminó cojeando hasta la cama  y se recostó en ella, pues no podía dormir ya que aún no podía creer que hubiera besado a Agustín y lo peor de todo haber sentido algo por ese beso

Ya había besado antes de retirarse en algunas misiones pero en ninguno había sentido nada ya que se había hecho la promesa de nunca más volverse a enamorar de ninguna persona desde la muerte de Gabriel

Y claramente había fallado

Le había fallado a Gabriel, se había fallado a sí misma

[...]

Ya han pasado dos semanas en la que Agustín y Carolina no se hablaban más que para rastrear los paraderos de Lionel y escuchar algunas que otras estupideces de quien follaba a más putas en el menor tiempo posible.

Cuando hablaban de estos temas Agustín lo único que hacía era decir que él había follado más en menos tiempo, lo que provocaba que la castaña rodara los ojos

Carolina al día siguiente de lo sucedido con Agustín decidió empacar sus maletas para irse devuelva a su departamento , pero fue obvio que el castaño se había opuesto colocándole la escusa de que estaban tan cerca de resolver el caso y que no podía irse

En este momento Carolina y Agustín se encontraban cada uno en sus habitaciones haciendo el trabajo por su lado

Carolina estaba con su laptop y unos audífonos escuchando la conversación de Lionel que era ya bastante aburrida porque siempre hablaban de lo mismo ( follar, bar , putas,  putas y más putas).  Carolina y Agustín siempre se turnaban para escuchar las tediosas conversaciones de Lío

— Jefe, ya tenemos todo casi listo para su viaje— Carolina a escuchar estás simples palabras se endereza rápidamente poniendo más atención a la conversacion que desgraciadamente no tenía las imágenes

— muy bien Ferro, cuando mi avión aterrice en Buenos Aires lo primero que haremos es llevar el cargamento a la bodega — Carolina se quita un momento los audífonos

— AGUSTÍN !!!!— le grita al castaño quien inmediatamente aparece en la puerta

— ¿Encontraste algo ?— dice sentándose a un lado de Carolina

— calla y escucha — coloca el sonido para ambos

—¿Cuando regresa jefe? — se escucha la voz de Lionel

— pronto estaré allá , no te puedo dar una fecha exacta, eso nos perjudicaría no sabemos quién está de nuestro lado

— ¿Qué haremos con Pasquarelli?— Agustín al escuchar este nombre de la boca de Lionel se tensa

— Solo actúa como si nada. Pero cuando esté allá, yo mismo mataré a ese maldito topo — Agustín al escuchar estás palabras se le coloca la piel de gallina — Eso le enseñará a Diego a no tratar de verme la cara de idiota

— Como usted ordene señor — dicho ésto Lionel cuelga la llamada

—Carolina, no podemos permitir que mate a Ruggero — se coloca de pie y se pasa las manos en el cabello de esta manera desordenandolo

— Bien, pero ¿Quien es ese ? — pregunta Carolina colocándose de pie

— El es un agente infriltrado que ha enviado Diego a hacernos compañía hace dos semanas — le explica nervioso

— no puedo creer que Diego haya hecho eso — dice Carolina dirigiéndose a la sala — Lo primero que le dije era que no necesitaríamos ayuda y manda a  un idiota —se sienta  en el sofá— En parte ese idiota se lo merece, así aprenderá a no aceptar las misiones de Carolina Kopelioff— dice con egocentrismo