Crush; Justin Bieber

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—Lo he grabado para que tú misma escuches y no creas que son exageraciones mías— Alissa sonrió con diversión mientras tomaba el control de aquella TV y colocaba la grabación que había hecho del programa — Escucha con atención.

—Lo haré.

El programa salían dos chicas algo alegres, saludaban al público para después observar una foto dónde se veía a Sasha y Justin hablando muy cerca en aquella baranda de aquel club.

—¡Woah! ¿Quién pensaría que Justin Bieber conseguiría un conquiste tan rápido? ¿Tú lo hiciste? — señaló a su compañera mientras ella negaba con una sonrisa traviesa.

—Es algo que nos tiene mucho inquietos por el momento — la chica sonrió y volvió a observar otra foto que apareció en aquella pantalla, Sasha y Justin ahora riendo — De verdad que se ve que tienen una química espectacular y no dudemos que aquella chica es algo caliente.

—Por eso es la envidia de muchas — Alissa susurró.

—Además no dudemos que ambos se han visto muy activos en el Instagram de cada uno, Justin le regala likes a cada foto de aquella chica como viceversa — la rubia sonrió —¿Recuerdas como es el nombre de esta misteriosa chica?

—Por supuesto, Claire — la peli-negra sonrió — Sasha Greco se llama la misteriosa chica, tiene veinte años de descendencia Italiana, tiene una hermana dos años mayor que ella y su padre es el soltero y codiciado Joan Greco — la peli-negra suspiró — Un gran exitoso y caliente empresario, aunque bueno luego hablaremos de él, Sasha hace unas tres semanas llegó aquí a Los Ángeles para pasar tiempo con sus mejores amigas Alissa Violet y Chantel Jeffries.

—Woah, tienes demasiada información de esa chica— la rubia sonrió algo divertida.

— Es necesario, es la nueva chica de Justin Bieber.

—¡Ni siquiera salgo con Justin Bieber! —Sasha exclamó señalando la pantalla del TV haciendo que Alissa soltara una gran carcajada —¿Qué?

—Cuéntale esos chistes a un bebé de cinco años pero a mí no, ni a la prensa Sashy —Alissa suspiró — ¿Llamarás a Bieber?

—No tengo necesidad de hacerlo — Sasha murmuró observando la pantalla de su teléfono — Alguien lo ha hecho de primera... ¡Hey!

—¿Has observado las noticias nacionales? — Justin preguntó suspirando.

—También son internacionales, Bieber — Sasha suspiró y alejo el plato aún con cereales en él— Mi padre me matará.

—Esas afirmaciones que están suponiendo la prensa no es cien por ciento realidad, Sash — Justin dejó salir un suspiro agotador — No hemos afirmado que estamos saliendo, la prensa dice lo que quiere vender, tú no eres mi chica.

Eso se sintió extraño.

— Entiendo, Bieber — Sasha rodó sus ojos con algo de frustración — Pero le dije a mi padre que había venido a Los Ángeles para disfrutar tiempo con las chicas no para salir ahora en todos los portales de noticias de celebridades y por lo visto voy a estar en todos.

—¿Te preocupa? — Justin preguntó con cierta frialdad.

—Mierda, no lo sé —Sasha murmuró.

—Deberías de saberlo.

—En realidad no me preocupa porque claramente como tú dijiste no soy tú chica ni tú eres mi chica, no se que clase de relación tengamos...

—Sólo follamos. —Justin la cortó haciendo que Sasha soltara una maldición por lo bajo — Nada de que preocuparse.

—A ti te da igual porque todos los días te sacan fotos con mujeres — Sasha llevo una mano a su frente masajeandola.

—¿Todos los días? ¿Estás segura de lo que acabas de decir Sasha Greco? Inventas mierda — Justin contestó con cierto enojo en sus palabras— Ese tipo de inventos de mierda me perjudica Sasha, perjudica...

— ¿Perjudican tu carrera? — Sasha preguntó con cierto fastidio.

— En cierto modo, sí.

—Bien, adiós.

Sasha colgó aquella llamada y lanzó su teléfono hacía el sofá que estaba en frente suyo, dejó salir un grito haciendo que Alissa saliera de su habitación con el ceño fruncido.

—¿Que acaba de pasar entre tú y Justin? — preguntó.

—Tuvimos una discusión — Sasha llevó sus manos hacia su nuca entrelazandolas ahí — Le dije que para el era fácil que lo involucraran de ese modo porque todos los días salía con chicas, se enojó y me dijo que ese tipo de informaciones como la que acaba de salir perjudica su carrera.

—¿En serio te dijo eso? — Alissa murmuró algo confundida — Woah, no pensaba que diría eso.

—Pues ya está, ya lo dijo — Sasha sonrió con amargura. —¿Salimos a almorzar? Muero de hambre y los domingos no me gusta cocinar.

—Menos yo, así que me apunto.