Tiempo, sabio y único Dios en el que creo;
Que tras tu paso curas de lo creado por Morfeo;
Mas pese a curar las desventuras y las heridas;
Dejas cicatrices que ni la mente ni el alma olvidan;
Como cuando me llevo a comprender que la belleza esta en lo imperfecto;
Y por ello cometí el error de enamorarme de los defectos de quien pretendía no tenerlos;
Así que Morfeo prepárate bien cuando vuelvas a intentar lastimarme;
Ya que sé que el tiempo acaba eliminando tus puñaladas sangrantes.