CAPÍTULO 2

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- ¡carolina! donde estas-
Digo gritando - ¡maldita sea donde estas Carolina! - grito tratando de sentarme-

-Marco tranquilo ya estoy aquí- digo camino hasta llegar a su cama y ayudándolo a sentarse

- ¿dónde está Carolina? Roza- digo frunciendo el ceño -porque cuando la llamo no aparece maldita sea- digo exasperado

-está durmiendo, llegó a la madrugada de una fiesta y llego un poco pasada de tragos- digo dándole un vaso con agua para darle sus pastillas

-Quiero que la levantes de una vez y le digas que la quiero en media hora en mi despacho que más le vale ir si no quiere que comience a restringirle sus beneficios- digo tomando las pastillas para luego beber agua -dile a Erik que venga para que me ayude a bañarme y a vestirme- me acomodo un poco en la cama

-enseguida le digo a Erik que venga, y el desayuno estará listo en la mesa en media hora- digo saliendo de la habitación y me encaminó hasta llegar a la habitación de Carolina -Carolina- digo moviéndola un poco -Caro tu hermano te quiere ver en su estudio en media hora digo acercándome un poco

-Nana déjame dormir estoy cansada dile a Marco que luego hablamos o voy a haberlo- tomo la almohada para ponérmela en la cara

-Carolina tu hermano te necesita y si no vas el comenzara a restringirte todo- quito la almohada de su rostro -vamos párate te alistare las cosas para que te des un buen baño- digo abriendo las cortinas de su habitación

- ¡maldita sea Nana la hora en que a mi papá se le ocurrió dejar esa maldita cláusula y dejar a mi hermano a cargo de todo! Marco cree que puede mandarme u ordenarme, todo esto es mío también- digo exasperada mientras me levantó de la cama

-sabes muy bien que hasta que no cumplas los 27 años y sepas manejar bien tu herencia Marco estará a cargo de absolutamente todo, fue el último deseo de tu padre- digo alistando todo

-Lo se Nana y no sabes cómo odio que mi padre siempre lo escogiera a él y que aun después de muerto lo siga haciendo- digo para después meterme al baño

-todo es por tu bien Carolina- susurro mientras salgo de su habitación -Erik el patrón te llama- digo observándolo

-enseguida voy roza- digo
-patrón ¿me necesitaba? - pregunto observándolo

-sí, ayúdame en lo de siempre Erik- Digo

-sí señor enseguida le ayudó- digo acercándome...

-llévame al despacho Erik debo hablarle a Diego a ver si ya consiguió a alguna enfermera- digo

-claro patrón en seguida lo llevo- empujó la silla de ruedas hasta llegar a su despacho -con su permiso patrón- digo retirándome

tomo el celular para llamar a Diego -hola, Diego ¿ya conseguiste una enfermera? O solo fuiste a perder tiempo, me urge una enfermera Carolina no me sirve si no solo para malgastar el dinero y ya no puedo seguir así- digo

-tranquilo Marco ya conseguí a alguien, pero no está sola- digo

-como que no estás sola, ve al grano Diego un poco exasperado

-Marco ella se graduó con honores, pero ella tiene a cargo a su hermano y pues le dije que podía venir con el que algo lo pondremos hacer- digo -tú tienes la última palabra, pero te digo que no he conseguido más enfermeras ella es la única opción lo único que vendría con su hermano-

-maldita sea Diego tu nada lo puedes hacer bien ya que me urge una enfermera así que para mañana la quiero en mí casa y que sea la última vez que sucede no soy una maldita casa de acogidos- cuelgo el celular - ¡roza donde esta Carolina que no ha venido! - empuñó mi mano ante la impotencia

-enseguida viene Marco se está vistiendo- digo asomándome

-Dile que se apure que no tengo todo el maldito día- digo soltando mi mano

-sí señor enseguida voy- digo retirándome...

-Qué demonios quieres ahora Marco estoy cansada deja se molestar- digo fastidiada mientras me siento

-Que deje de molestar- suelto una carcajada sarcástica
- ¡maldita sea Carolina! Cres que es por gusto que lo hago acaso no ves que estoy en una maldita silla de por vida- grito un poco exaltado -Por lo menos ayúdame en lo que consigo alguien que sea eficiente no te estoy pidiendo más, si no quieres que comience a restringir tus malditas trabajos por lo menos se responsable un poco y ayúdame- vierto un poco de whisky en mi vaso

-Te recuerdo Marco que todo esto también es mío así que no me estés humillando o chantajeando por que todo es mío- digo parándome de la silla

-Por lo que veo no recuerdas la cláusula que dejo papá y hasta dónde yo sé no has cumplido 27 años y mucho menos eres responsable así que si no quieres que comience a tomar medidas drásticas contigo comienza a hacer un poco más responsable y ya mejor vete que no tengo ganas de verte más- bebo un poco del whisky

-Vete al diablo Marco tú y mi papá se puede ir juntos- digo antes de irme

-maldita sea- azotó el vaso contra la pared -y maldita seas donde quiera que estés -digo pasando mis manos por mi cabello...

Mensaje

Diego ya estoy en la cafetería de ayer
Escribo el mensaje y lo envió

Mensaje

Enseguida estoy allá Elena
Envió el mensaje mientras llego a la cafetería

-buenas tardes Elena- digo saludándola - ¿Como estas? -
Preguntó mientras me siento

-hola Diego- digo -estoy bien gracias, ¿y tú como estas? -
Pregunto de vuelta

-bien gracias- digo -tengo el contrató, tu solo lo lees y si estás de acuerdo firmamos y hoy en la noche viajaras con tu hermano a NEW YORK- digo sacando el contrato para dárselo

Recibo el contrato y me dispongo a leerlo -esta todo en orden para mi Diego-

-vale, quiero que tengas claro que tendrás solo un día de descanso que tu podrás escoger cual será el día, estas dispuesta a todo lo que el te diga siempre y cuando sea de tu oficio y tendrás que darle sus terapias y estar pendiente de él, adjunto al contrato esta todo sobre su historia clínica para que te guíes bien- digo pasándole los papeles

-no tengo problema u objeción con eso, dime donde firmo- digo observándolo

-donde ves el espacio aquí- digo indicándole el lugar -hay puedes firmar -digo dándole un lapicero

-claro enseguida firmó- digo tomando el lapicero y firmando donde él me había indicado

ALGO SUCEDE EN MI CORAZÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora