Adiós Amor

I

PROBABLEMENTE

Son las 2:42 a.m. y sigo llorando como idiota por una persona que quizás está durmiendo plácidamente sin ningún remordimiento. Es estúpido, lo sé. Pero no sé cómo decirles a mis sentimientos, a mi estúpido corazón que todo ha acabado, que deje de llorar y que deje de herirse a sí mismo evocando recuerdos que solamente nos destroza aún más.

Quizás soy masoquista.

El recordar una y otra vez parece ser una forma tan cínica y cruel de mi cerebro, no sé cómo puede hacer eso cuando lo único que deseo es olvidar todo. Deseo de corazón arrancarme todos esos momentos felices, aplastar todas esas sonrisas, destruir todos esos "te amo" que taladran mis oídos y despedazar el recuerdo de su mirada...

Esos ojos que eran tan sinceros y puros.

Aquel ser que creía hecho a mi medida, ese ser que consideraba mi "para siempre" sólo resulto ser una estafa, una estúpida broma que terminó aniquilándome, destruyéndome y haciendo de mí sólo restos polvo.

No lo entiendo.

¿Cómo es posible que un simple humano provoque tal dolor?

Es algo mucho más allá que un tortuoso dolor físico —y lo digo por experiencia, no por simples palabras salidas de un humano con el corazón roto—, es un dolor que parece rasgarte, destrozarte y machacar tu alma si ningún aviso o advertencia.

Es algo que no te esperas.

Y desgraciadamente es algo que estará en mi memoria por mucho tiempo. Lo recordaré paso a paso, minuto a minuto y segundo a segundo, recordaré esa mirada tan falsa y culpable... una mirada que sabía muy bien lo que quería, unos ojos que brillaban por una libertad que sentían perdida.

¿Cómo el amar se podría convertir en un castigo?

Parecía ser que el amor que le profesaba sólo lograba sofocarla, le hacía sentir encerrada y asfixiada. Sólo quería amarla, sólo quería verla feliz dando todo lo que estaba a mi alcance, quería darle todo de mí para que fuera feliz.

Pero no era suficiente.

Es justo como decía mi maestro de literatura; el ser humano suele ansiar más, es codicioso por naturaleza, siempre busca tener más sin importar nada. Vaya lección que me ha dado la vida por no creer en sus palabas, y es algo curioso, porque al ser una buena persona piensas que esas situaciones jamás te sucederán a ti.

Porque... ¿cómo Dios podía hacerle una cosa mala a uno de sus hijos que es bueno?

Estúpido ilusos, Dios no tiene nada que ver aquí, él les dio el libre albedrío a sus hijos... no es su culpa que uno de sus hijos haya sucumbido ante sus más débiles y carnales instintos.

Él no tiene la culpa que te hayan destrozado el corazón.

3:07 a.m.

Cogí la cerveza y le di otro fuerte trago mientras mis lamentos aún seguían frescos. Solté un suspiro y miré nuevamente el cielo estrellado.

La palabra siempre no tiene futuro.

Me sentía estúpida por no haberme dado cuenta antes, realmente cría tener los pies anclados al suelo, totalmente alerta por si algo así ocurría. Pero nunca estas preparado para oír:

—Te amo, pero lo nuestro no puede funcionar.

Esas palabras se pueden traducir como:

"Ya no te amo, pero no quiero herirte."

Me pregunto porqué las personas se tiene que inventar una mega excusa, algo tan estúpido, pero con la intención de terminar algo que una vez fue hermoso. La cruda verdad duele, pero es mejor que inventar excusas absurdas que dañan aún más.