you want a revolution? I want a revelation

Comincia dall'inizio
                                    

"Es lógica", le respondió, tratando de desviar el tema.

"Es interesante", contestó Jazmín. "Para mí". Se miraron a los ojos por un segundo más de lo que hubiera sido necesario, y después Jazmín volvió a mirar sus hojas. "En cada una de estas citas tenés que elegir a uno de los chicos para así tener dos citas individuales. Eso se filma mañana".

"Hmm".

"No te pongas nerviosa, Flor. Paso a paso, ¿si?"

Flor asintió, pero Jazmín se dio cuenta enseguida de que su mente ya estaba volando. Se levantó del sillón para sentarse a su lado en la mesa. Dudó un segundo en que hacer, pero finalmente posó su mano en el hombro de Flor. "De verdad", le dijo, "vas a estar bien. Te lo prometo".

Flor le sonrió pequeño, pero parecía estar otra vez allí con ella. "¿De qué son las citas hoy?"

"Bueno, con el primer grupo vas a una degustación de vinos".

"Para ver si alguno se va de copas y pasa algo interesante", agregó Flor, pero Jazmín no confirmó ni negó.

"Y con el segundo a una casa de té".

"Que seguro sean los más brutos, ¿no?"

"Señorita Estrella", comenzó Jazmín, cambiando la voz, "¿está usted demasiado interesada en el proceso de producción?"

Flor se rio. Se reía lindo, pensó Jazmín. "¿Y mañana? ¿Cómo son las citas individuales?"

"Bueno, mañana son dos citas que vas a elegir vos, diseñadas especialmente para pasar un buen momento con tus chicos".

"¿Si?"

Jazmín se rió. "Claro que no. Ya están elegidas". Flor también se rió y, por un momento, Jazmín se sintió como si no estuviera trabajando, pero pasando un momento divertido con una amiga. No podía permitirse esos lujos. Pero era demasiado fácil, con Flor. La conversación, la manera de comunicarse. Negando con la cabeza, se paró de la mesa. "Bueno, ahora en diez te traen el desayuno y en media hora te empiezan a preparar. Nos vemos en la casa", le dijo a modo de despedida. Y se fue.

*****

Jazmín no podía creer que tres de los cinco chicos ya estuvieran borrachos. Eran tipos grandes. En una degustación. En televisión. ¿Acaso no les daba vergüenza? Flor la miraba cada tanto, haciendo caras y gestos, buscando esa mirada cómplice. Pobre Flor, se merecía más que a esos papanatas. Por lo menos habían logrado filmar lo suficiente para editar algo que no dejara mal parado a los chicos. O por lo menos, no del todo. Algo del estado "alegre" de los chicos iba a quedar definitivamente dentro del producto terminado. Pero nada demasiado dañino.

Flor iba a elegir a Daniel para la cita a solas.

No habían tenido tiempo de hablarlo todavía, pero Jazmín estaba segura que así sería. Dentro de todo, era de los pocos que se había comportado más o menos decente. Claro que Flor no merecía conformarse con lo mínimo que un ser humano podía ser, pero también parecía que habían pegado onda. A Jazmín seguía sin gustarle. Pero no era necesario que a ella le gustara, claro.

Se acercó a Leo para ver que plano estaba tomando. Desde el control le indicaron que casi estaba y Jazmín levantó un pulgar en dirección a Flor, a modo de aliento. La chica le sonrió y revoleó los ojos en dirección a Franco, que seguía hablándole sin parar, aparentemente sin darse cuenta que Flor no estaba particularmente interesada. Jazmín pensaba que a veces Flor no se daba cuenta que absolutamente todo estaba grabado. Lo que significaba que cada cosa que hiciera frente a cámara podía terminar formando parte del programa. Debería recordárselo en algún momento.

the story they will write somedayDove le storie prendono vita. Scoprilo ora