¿Cómo te atreves a volver?

Comenzar desde el principio
                                    

El de conseguir que esa leyenda fuera cierta. Con quien realmente estaba enfadada. Y ¿Con quién? ¿Por qué? por esto:

Flashback:

Cuando me entere salí corriendo abandonando mis entrenamientos y dejando atónicos a mi sensei y a Sabo que se encontraba conmigo en ese momento. No lo dude y decidí preguntárselo a él en persona dándome absolutamente igual si tenía cosas que hacer o no, esto era una emergencia.

Abrí la enorme puerta sin pedir permiso, me daba igual que pensara de mí el individuos que estaba enfrente, esto era de máxima emergencia, me daba igual si estaba reunidos con personas importante, lo vuelvo a repetir, esto era de máxima emergencia y por una vez ,después de varios meses, me permitir perder los estribos un poco.

Dragón me observo transmitiendo seriedad. Suspiro con una cara que significaba que había descubierto la noticia. Apreté el periódico que tenía agarrado desde que vino corriendo Koala interrumpiendo mi entrenamiento con Jimbei en una cascada para perfeccionar mis poderes en el agua, es por eso que también me encontraba completamente mojada y apunto de coger un constipado. Pero me daba absolutamente igual.

Por suerte Dragón se encontraba completamente solo sentado en su enorme sillón, pero esta vez después de tanto tiempo, no tenía montañas de papeles a su alrededor. Estos días había estado la base secreta muy alborotada, de arriba y abajo, y más en estas semanas. La Marina había estado más activa que nunca y más relacionado con la captura de los piratas. Cada vez entendía menos. Pero ahora comprendo algunas cosas de esos ataques sospechosos en bases secretas de la Marine.

-Nico Robin que- empezó a decir Dragón de buenas pero yo le interrumpí.

- No vengas con esa, Dragón- tire de mala maneras el periódico a su mesa que por suerte no se había mojado ni roto ni nada parecido. Él lo cogió sin ganas.- ¿Por qué pone este periódico que estoy muerta?- no podía contener mi enfado. Esto lo peor que podía hacerme y menos me lo imaginaba de que algo tan ruin, como decir que estoy muerta, hubiera venido de los Revolucionarios.

-Nico Robin no deberías estar entr-suspiro. Parecía que estaba luchando contra sigo mismo pero en ese momento no pude percibir. –Siéntate- me indico con un gesto que me sentara pero no le obedecí. Estaba ardiendo de ira al ver que mi hipótesis había dado en la diana.

Yo no hice caso sino lo contrario, coloque con fuerza mis manos en su mesa golpeándola, he de reconocer que me asuste un poco al ver lo fuerte que había golpeado la mesa, pero qué más da.

-¡NO VENGAS CON ESA CORTESIA! ¡QUIERO QUE ME DIGAS LA VERDAD DE UNA MALDITA VEZ!-una voz en mi mente decía que me tranquilizase pero solo de pensar de cómo se sentiría mis nakamas en especial Zoro al ver la noticia. Mande a la borda estos meses de entrenamientos mentales y sentimentales con Jimbei, pero estaba harta de que todos supieran todo y yo nada. Era frustrante. –¡SE QUE HABEIS SIDO VOSOTROS! ¡ASI QUE EMPIEZA A SOLTAR!

Él se reclino y coló su mentó entre sus manos.- De acuerdo. He sido yo el responsable de esa noticia, pero era por tu bien.

-¿QUE ERA POR MI BIEN?- aunque no os lo creáis empezaba a tranquilizarme lentamente, me costaba. Creo que las gotas de aguas que tenían perlando mi cuerpo se habían vaporizado a causa que casi echaba humo por las orejas. –¡DONDE VES EL BIEN DE FINGUIER MI MUERTE! ¡NO HAS PENSADO EN QUE TU HIJO AHORA MISMO LO TIENE QUE ESTAR PASANDO FATAL! ¡SEGURO QUE ESTA DESTROZADO Y MÁS CON LO RECIENTE DE ACE! ¡NO LO HAS PENSADO

-¡CLARO QUE HE PENSADO EN MI HIJO Y EN TUS NAKAMAS, PERO NO NOS HABÍAN DEJADO OTRA OPCIÓN!- me interrumpió con el mismo tono de voz que el mío. Pude que me había pasado un poco sabiendo que le afectaba, aunque no lo demostrara, la muerte de Ace y todo lo relacionado en su hijo y no poder estar allí en esos momentos al igual que yo cuando me entere de la noticia.

¿Quien eres tu?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora