YOU, my best friend [LGBT]

Capítulo II

Estaba realmente enfadado...

Haciendo un leve movimiento hacia atrás para salir de enfrente de la habitación de su mejor amigo, pisó muy fuerte el viejo piso que estaba debajo suyo, y éste produjo un rechinido. Él aún seguía muy molesto, pero prefería que su amigo no se entere de lo que había visto.

Kiam, oyó un ruido fuera de la puerta de su habitación, se detuvo y fue a mirar si alguien estaba ahí.

— ¿Quién está ahí? — se pronunció fuerte el mayor ante la idea de que hayan entrado a su casa, pues sabía que su madre no volvía hasta la noche.

Jack no tuvo de otra que correr escalera abajo, para no ser visto por su amigo.

Rápidamente fue a su casa abrió la puerta y luego entró, la cerró y corrió a su habitación, tendría que procesar lo que sus ojos habían visto, sentía ira, mucha ira, se hizo la idea de que no, pero éso que había visto hace unos momentos sólo terminó por confirmar sus sospechas, lo que había sentido esa maňana eran CELOS.

Al entrar a su habitación cerró la puerta con fuerza, y se sentó en la punta de su cama con las manos en la cabeza, además de sentirse enfadado, estaba confundido... ¿Porque diablos sentía celos por su mejor amigo?...¿Porque lo enfada tanto verlo con su novia?.

Tomó una almohada con fuerza y la lanzó al otro lado de la habitación, sentía mucha rabia, y tenía la mente muy confusa, lo desconcertaba la idea de sentir algo por su amigo, a él nunca le gustaron los chicos, siempre a tenido novias y siempre amó a las mujeres.

Se levantó con más rabia de su cama, y tiró la mesita que tenía al lado de ésta, haciendo caer también una lámpara de lava que yacía sobre ella y un par de baratijas sin importancia.

Pensó un rato estando de pié, y luego decidió tomar un baňo de agua fría, necesitaba dejar de pensar en su amigo, en los celos, en todo.

Salió de la ducha luego de estar casi media hora debajo, se puso una toalla alrededor de su cintura y salió del baňo, durante la ducha no dejó de pensar, al parecer la ducha fría no había funcionando, pero pensó en compartir sus nuevos sentimientos con alguien de confianza, decidió contárselo a su mejor amiga, tal vez contárselo a alguien lo haría sentirse mejor, además necesitaba urgentemente los consejos de ésta.

Tomó su celular y le mandó un mensaje.

Hola hermosa, sé que hace rato no quería salir, pero necesito verte, quiero contarte algo muy importante.

Realmente odiaba haber dejado a su amiga plantada, pero ella siempre lo entendía, era una de sus mayores virtudes, la comprensión.

Un tono de mensaje lo quitó de su Laguna mental.

Hola precioso, claro que si, ven a Casa estoy sola y pedí pizza hace un momento.

Sin pensar en más, se vistió con una camiseta holgada color azul, vaqueros caqui y sus botas CAT, antes de salir tomo también una campera de cuero y se dirigió a la casa de su amiga, iría caminando, pues no estaba tan lejos de su casa.

Al llegar tocó el timbre a lo que su amiga casi inmediatamente abrió la puerta y lo abrazó, estaba preocupada.

— Hola Jacky... ¿Está todo bien? — preguntó soltando el abrazo y mirando a los ojos a su amigo.

Jack suspiró, — Estoy muy preocupado, necesito que me escuches — fue lo único que dijo para luego pasar a la casa y dirijirse a la sala.

Una vez que ambos se acomodaron en el sofá, tenían pizza frente a ellos en una mesa y un par de Coca Cola's en lata.