Franchesca en un lugar con las golosinas

JESÚS EDUARDO MONTES BUSTAMANTE

Franchesca

EN UN LUGAR DE LAS GOLOSINAS

ÍNDICE

                                                                                    Carta del Autor 

En el claro y oscuro cielo 

I. Descubriendo las escaleras de colores 

II. Y las recetas ¿se comen? 

III. Conseguido al fin el atolondrado festín ¡Y ni una hoya más! 

IV. Parte del asunto, debería irse al caño 

V. Convenciendo al ratón dientes de leche 

VI. Carraspeando en los alrededores arcos de colores 

VII. La más contraria y funesta invitación al castillo de los Waffles

Enzarzados 

VIII. El espléndido castillo de ricas delicias 

IX. Comienza a resplandecer la graciosa primavera 

X. El excelentísimo cambio de Franchesca y su nuevo ambiente 

CARTA DEL AUTOR

Para Gabriela:

En muchas ocasiones he querido decirte que siempre que te veo pasar corriendo, siento que eres una niña muy risueña y bien portada. Deseo darte este regalo para ti de mí: porque siempre he querido tener una hija y escribirle cuentos y poesía. Por extraño que parezca pequeña lectora, en principio ni me gustaba escribir, pero algo me decía que escribiera y en ese sentido, he escrito algo así de 7 libros (unos algo largos de dramaturgia y uno o dos cortos) y nunca he publicado uno impreso, ¡y menos un cuento! A pesar de que he leído cientos de libros, y me han fascinado en especial libros ingleses y extranjeros como los de Shakespeare, considero haber escrito de la forma más simple y llana estas aventuras. La foto a la derecha es del Autor de Alicia en el País de las Maravillas en quien me he inspirado exponencialmente: Lewis Carroll, y quien fue Diacono anglicano de la iglesia católica en Inglaterra ¡Honor a quien honor merece! Y la foto de la siguiente página es de una novia que tuve, la cual, sin su más mínima presencia, jamás se hubiera realizado este anhelo por escribir un cuento inspirado en Alicia.

Espero que este regalo ilumine vuestras noches, soñando tal vez en la graciosa y ocurrente Franchesca, en el amor que destelló en aquel lugar de fantásticos dulces, caramelos y nueces, y encuentres luz en tus más profundos sueños. Que este libro que os doy impregne los sentimientos de mi alma en tu alma con dorada e inagotable fantasía.

En el claro y oscuro cielo

En el claro y oscuro cielo, se ofrecen las galerías de golosinas y bocadillos

En el ayer donde se convidaba unánimemente, Franchesca nos nutrió con su bondad y su amor.

Venid y Pasad por tan frescas fuentes o las dulces arboledas se agriarán irremediablemente,

Dotada de un inmenso corazón, así pues, el lugar le ha compartido la sazón y el sabor.