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Lysandro POV 

Han pasado tres años desde que salí del instituto Sweet Amoris, ya cumplí mis 21 años y tenía mi trabajo como escritor de libros. Algo que me apasiono desde mis 18 años. Estos días han sido muy felices para mi, nació mi hija Ariadna, mis lagrimas caían  de mis mejillas por solo verla. 

—E-Es preciosa...— tomando a mi pequeña recién nacida mientras seco mis lagrimas.

— S-Si...— 

Sucrette casi no respiraba, estaba muy exhausta. Mientras sostenía a mi pequeña, de manera dulce, acariciaba su mejilla mientras dormía.  

— Princesa... Mírala.. Ella es tu madre— 

Entre mucha felicidad, deje a mi pequeña en su incubadora mientras la observaba respirar. Dejando a Sucrette y Ariadna, salí de la habitación muy despacio, Rosa y Leigh venían corriendo hacia mi mientras me abrazaban con dulzura.

—¡Felicidades Lysandro, ya eres padre!— Rosa me apretaba. 

—Trajimos a Alan para que vea a su prima— Leigh sonreía —Voy a ser tío... 

—Espero estén felices, siempre quise a una niñita— mis ojos están llenándose otra vez.  

Leigh y Rosa tuvieron a Alan, salio a los ojos de su madre y cabello de su padre, es primo de Ariadna y solo tiene tres años.

—¿Podemos entrar a verla?— Dijeron ambos al unisono muy emocionados.

*Ding Dong* 

—Justo comenzó el horario de visitas, claro que pueden entrar, pero les ruego en silencio, mi hija y Sucrette están dormidas, vengan conmigo— Les señalo la habitación que esta un paso de nosotros. 

La puerta estaba un poco oxidada por lo que al abrirla hacía un ruido horrible dejando mis vellos de punta, provocando que Ariadna comenzara a llorar por el molesto ruido, mi instinto reacciono de inmediato cargándola en mis brazos cantándole una parte de la canción que le escribí hace un tiempo a Sucrette, ya estaba completamente dormida provocandome un gran suspiro, la deje delicadamente en su pequeña incubadora. 

—Si que amas a tu hija, nuestros padres realmente nos educaron muy bien— Dice Leigh sonriente. 

—H-hola chicos...— Sucrette despertó, sonriendo y con sus ojos entreabiertos —Gracias por venir— 

—¡Sucrette!— Rosalya corre a abrazar a su mejor amiga —es una bebé muy hermosa, salio igualita a ti....— la observo de reojo —Literalmente a ti...—       

—M-Muchas gracias...— me observa con semblante feliz —es hermosa... Me alegra haberla tenido junto a ti...—

—Cielo... No te esfuerces mucho, deberías descansar— Le beso la frente.

—Estoy mucho mejor, al dormir ese rato pequeño... Recobre un poco mis fuerzas, si que me canso todo eso...— ríe.

En ese momento, un doctor de apariencia joven entro a la habitación saludando y felicitándonos a ambos ademas de hacer el chequeo medico, por lo que pidió que solo se quede la familia.               

—Les ruego que nos esperen unos minutos, les mantendremos informados, nos vemos enseguida— sonrió.

Rosalya POV 

Leigh y yo salimos de la habitación con Alan en nuestros brazos dándole pequeños besos en la mejilla. 

—¿Tengo una primita?— Dijo Alan con curiosidad —no pude verla en ningún instante—

—Tenemos que esperar, hay que ser pacientes, están cuidando a tu tía ya que fue muy duro el proceso de tenerla—

—¡¡Esta bien, se que sera la mejor prima del mundo!!— estaba besando la mejilla de Leigh y la mía. 

Lysandro salio de la sala con un semblante feliz 

Lysandro POV 

Eran unas noticias fantásticas, ya quería volver a casa rápidamente, tenerla en nuestro hogar sera un paraíso lleno de juegos.

—¡Pueden volver a la sala!— Dije tomando a Alan en mis brazos.

—¡Perfecto!— Leigh sonreía.                        

  —Bueno, el doctor dijo que era una niña muy saludable y podríamos irnos en un par de días, estará en casa con nosotros y tendrá el mejor cuidado del mundo— Sonreía mientras paseaba a Alan hacia la incubadora —¿Puedes ver Alan?—

—Si tío... ¿Ella es mi primita?— 

—Claro que lo es, prométanme amarse siempre, se que serán buenos niños—        

*Ding Dong* 

—Oh vaya... termino el horario de visitas— dije triste, regresando a Alan a Leigh

—Vendremos en otra oportunidad, nos veremos luego hermano, cuida a Ariadna y Sucrette, esta muy agotada— 

—Claro que si, lo se, yo tengo que quedarme aquí, es mi deber cuidar de ellas— Abrazo a mi hermano y beso a Rosalya en su mejilla —Nos vemos— 

Leigh y Rosa toman sus manos dirijiendose a la salida, mientras les miro, me doy una vuelta concentrando mi mirada en Sucrette, estaba mirando la incubadora. 

—¿Quieres tomarla?— saque a Ariadna de su incubadora —Al parecer quiere sentir a su madre— 

—Claro que quiero— Sucrette abrió sus brazos abrazando a Ariadna. 

Me senté en la orilla de la camilla, feliz abrazo a ambas mientras Sucrette la mimaba, estuvimos bastante tiempo abrazados. 

—Me has hecho el hombre más feliz del mundo— la bese.

—Seremos unos buenos padres...— Sucrette sonreía, estaba a punto de llorar.

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Hola chicos, esta historia pertenece a mi AU de CDM, Espero les agrade ya que va con todo mi amor <3, nos vemos a la próxima, sabes que si te gusta comenta en las partes que más te agraden, (te hagan reír, llorar, etc etc). 

Comenta y dame una estrellita, <3                                           

Las princesas de PapáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora