Modelo 89'

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Vivimos en un tiempo donde todo se ha convertido en algo desechable, los celulares, las televisiones, los platos, los amigos, la familia, el amor...

Ya nada se repara, simplemente lo tiras y adquieres algo nuevo, así de simple...así de fácil.

Es por ello que antes todo era más valioso, es por eso que las antigüedades valen una fortuna, porque las personas eran más cuidadosas y reparaban lo que se rompía.

Y en las relaciones no era distinto, un disgusto entre dos amigos se platicaba y se resolvía, las rencillas entre la familia se discutían en la mesa durante la comida, y en el amor, las asperezas se limaban haciendo el amor.

Hoy todo es desechable, las familias se separan, los amigos se traicionan, los novios se engañan y se hacen trizas, se rompen mutuamente. La vida ya no se soluciona...se cambia por otra.

Tal vez por ello, y sea otra razón más, que no me siento bien aquí, en esta época tan jodida y podrida. Y es que siempre he querido vivir en un tiempo atrás, todo era más sano, más bonito.

Quizás yo sea también un obsoleto aparato electrónico, quizás un televisor más para los que me rodean, modelo 89, uno ya viejo, el cual no vale la pena reparar, al final me terminarán tirando a la basura y me cambiarán por uno nuevo, más bonito, más reciente con colores más vivos, aunque se rompa a la primera caída o a la primera descarga eléctrica...quien sabe, a las personas de ahora les gusta lo pasajero, lo fugaz y lo desechable.

Debería actuar como ellos? Tirar todo a la basura y simplemente seguir con algo nuevo? Por qué le tomó tanto valor a lo forjado por el tiempo? Por qué me importa tanto tratar de recuperar algo que se ha ido, qué maldita necedad de repararlo y aumentar su valor? Es fácil...sencillamente lo de antes duraba más, por eso siempre se conservaba.

No es fácil vivir en estos días tan plásticos y desechables, no me adapto a dejar a las personas que realmente me importan, jamás estaré de acuerdo en lo reemplazable. Si existe una segunda vida después de la muerte me gustaría que renaciera en una época anterior, tal vez allá por principios del siglo pasado, el agua clara y el aire limpio, sin el ajetreo citadinos y sin malditos horarios laborales, una pequeña choza acogedora, una esposa leal y una familia unida...

Mientras tanto me tocó ser usado y desechado, herido y destrozado, cual bola de papel me arrojaron al cesto de basura sin siquiera caer dentro, una vez más, como siempre, salgo botado, una maldita vez más...han sido varías, solo que esta fue la peor de todas.

Red TotolaWhere stories live. Discover now