17- Moon Over Bourbon Street

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Se había dicho a sí mismo que todo lo que sentía por Hayley era un simple cariño que le tenía luego de haber pasado tanto tiempo protegiéndola, y además por ser la madre de su sobrina, pero en el fondo sabía que no era así. En ese mes que pasó se había concentrado en intentar ser feliz con Samantha, la mujer que sabía lo traía en las nubes, pero una parte de él aún no superaba a Hayley y eso lo tenía en un estado constante de frustración. No quería herir a nadie, pero al parecer no podría evitarlo. 

Un mes de distancia no había ayudado a su confusión, seguía en el mismo punto. Pero eso no significaba que no disfrutara su tiempo con Sam, al contrario. Amaba cada minuto que pasaba junto a ella, y aunque no habían pasado de caricias se sentía como una adolescente invadido por las hormonas.

A oídos de todos en la ciudad había llegado el rumor de que la manada creciente había sido liberada de su hechizo. Tal parecía que Celeste había dicho la verdad sobre la extraña mezcla que le había dado a la licántropo embarazada, quien ahora residía en el pantano. Samantha había ido un par de veces a ver que todo esté en orden y a verificar el estado de Hayley y del bebé que con cada día que pasaba estaba más cerca de venir al mundo, pero ni las charlas cortas y triviales lograron que la embarazada mostrara señal de querer hacer las pases con el oráculo. Ciertamente estaba resentida por razones muy obvias, sin embargo Sam había notado cierta química entre ella y un licántropo de nombre Jackson, quien sin dudas se le veía lo interesado que estaba en Hayley. 

Jackson, a diferencia de Hayley, era sin dudas más amable con Samantha y se animaba a charlar con ella sobre los licántropos o alguna otra cosa que al oráculo le interesaba saber, o inclusive sobre temas triviales. Se agradaban mutuamente y eso le encantaba a Sam, el hacer amigos se le dificultaba en su anterior dimensión y en esta se evidenciaba un gran cambio. No solo con sus amigos, sino también con su magia, había pasado tiempo en el submundo buscando formas de control y aumento de sus poderes, y como respuesta solo había tenido un pequeño pero muy evidente cambio. Su poder de purificación había aumentado un poco al igual que su capacidad de ver el futuro e intentaba con todas sus fuerzas aumentar más sus capacidades, pero con la mayoría de su tiempo siendo ocupado por sus vinculados y los habitantes de Nueva Orleans casi no contaba con ese tiempo. 

Justo en ese momento Samantha se encontraba sentada sobre la alfombra felpuda de su habitación, sus manos sobre sus rodillas y sus ojos cerrados mientras que un círculo de velas la rodeaba, a la vez que desde el umbral de la puerta era observada por un par de ojos cafés que la miraban con cierta fascinación. La llama de las velas se hizo un poco más tenue, pero la posición del oráculo no cambió, sin embargo él sabía que tenía su atención.

- ¿Estás entrenando?- preguntó con una media sonrisa al ver que ella estaba en pijama.

- Solo reviso que todo esté en orden del otro lado, ya sabes, es mi responsabilidad- dijo ella encogiéndose ligeramente de hombros a la vez que comenzaba a estirarse para destensar los músculos de su espalda- Además, Genevieve hace mucho ruido cada que viene- el tono de ligera irritación le hizo reír  un poco. Elijah había pasado el día verificando que la ciudad estuviera en orden y luego de pensarlo mucho se había decidido a hablar con su hermano por décima vez en el mes para que se animara a hacer algo por la que alguna vez había sido su ciudad, pero al ver a Samantha, todo lo que quería era pasar el resto de la noche junto a ella. Pero el deber iba primero.

- ¿Enserio? por que acabo de llegar y solo se escuchan voces conversando.

- ¿Hay ropa por toda la casa?

- Bueno, solo un par de zapatos- agregó con algo de incomodidad, ciertamente a ambos no les caía bien que una bruja rondara por la casa- ¿Qué te parece si... ya sabes...- insinuó acercándose a ella- ...Te ayudo con tu dolor de espalda?- iba a acercar su mano para tocar la suave piel de Sam, pero la barrera se lo impidió y en cambio ganó un par de quemaduras. La castaña soltó una risita llena de diversión.

1| Predictions (Elijah Mikaelson)حيث تعيش القصص. اكتشف الآن