Recordar

Capítulo 5 (bonus)

Estuve dos meses en cama, pasaron muchas cosas, yo estaba resentido porque me había perdido una temporada completa, a causa de eso, yo no encontraba una manera de descargar mi enojo, solo con palabras, y, las personas tienen razón cuando dicen "las palabras tienen poder" —Marie, mi vida es una mierda— ¿una mierda dices? Saber que tu vida es una mierda aunque yo esté en ella duele, sé que ha sido difícil perderte una temporada completa por una lesión, perder a tu papá, pero, no intentes descargar tu enojo conmigo, piensa bien lo que dices, porque yo no soy culpable de nada— tienes razón lo siento— no Adrián, ya basta, siempre es lo mismo contigo, ya me cansé de sentirme culpable de lo que te pasa, siempre intento darte lo mejor de mi aunque yo esté peor que tú, siempre es lo mismo contigo, has cambiado demasiado, y yo ya me cansé, terminamos, recupérate— oh, Marie, mi primer novia, entonces, así fue como terminamos, mi recuperación había terminado—saldré a caminar un rato— no tardes—

5:35pm, salgo de mi casa, día medio soleado, Green park, es el lugar en el que Marie y yo dimos nuestro primer beso, el lugar donde le pedí que fuera mi novia, tantas risas, tantas bromas, supongo que puedo estar ahí un rato, el día es frío, hay mucha tierra en el aire, veo pasar una pareja tomados de la mano, y, oh Dios, tantos recuerdos vienen a mi mente, recuerdos de los momentos felices que Marie y yo pasamos juntos, paso por los lugares que ella y yo solíamos recorrer, intento parecer normal, pero, estoy realmente jodido, ella era mi alegría, las lágrimas solo salen, no consigo contenerlas ¿Por qué nadie me dijo que esto sería tan difícil? Ella era demasiado buena para mí, y yo lo sabía, lo supe todo el tiempo, lo supe, desde que todo comenzó, nosotros empezamos a hablar gracias a que Jesus nos presentó un día que él y yo fuimos a comer pizza saliendo del entrenamiento—Jesus, sí, el era el linebacker que ocasionó mi fractura— desde que la vi por primera vez en los pasillos, algo pasó en mí, siempre quise hablarle pero mis nervios me lo impedían, ella siempre estaba rodeada de personas y eso me dificultaba acercarme a ella, siempre cruzábamos miradas en el salón de clases, para mí, ella era algo inalcanzable, hasta que Jesus nos presentó, recuerdo que yo estaba lleno de nervios, claro, hablar con la chica que te gusta no es fácil, recuerdo que días después de que Jesus nos presentara, yo le pedí que saliéramos, justamente vinimos a este parque, comenzamos a hablar por mensajes de texto, la primera conversación que tuvimos fue sobre nuestras metas, objetivos en la vida y esas cosas, pasaron los días y ella comenzaba a ir a mis entrenamientos, y, terminando, siempre veníamos a este parque, fue así como poco a poco empecé a enamorarme de ella, yo no le caía muy bien a sus amigas, de hecho, no estaban de acuerdo con nuestra relación, ellas siempre decían que ella era mucho para mí, pero a Marie eso no le importaba, ella me quería tal como soy, nosotros teníamos algunas cosas en común, fuera de gustos, ambos teníamos anemia, cosa que no nos importaba y no seguíamos las indicaciones de los médicos, compartíamos el gusto por el mismo deporte, ella escuchaba música de cierto modo rara, pero, para tener de que hablar con ella, yo escuchaba esa música, el día que le pedí que fuera mi novia, lo hice saliendo de entrenar, en este mismo parque, no usé un cartel ni nada parecido, puesto que a ella no le gustaban esas cosas, a ella le gustaba la simplicidad, y, sí, me quería tal como era, ella tenía muchos problemas familiares, quizá no los compartía todos conmigo, pero, yo siempre estuve para ella, realmente me enamoré de ella, me enamoré de su sonrisa, de su voz, de sus ojos, de sus labios, de su forma de ser, de la calidez de sus abrazos, de las pláticas divertidas que solíamos tener, debí cuidarla más, ella era demasiado buena para mí, era perfecta para mí, con Marie, yo era realmente feliz, ella significaba todo para mí, y ahora que la he perdido, no me queda nada, solo un gran vacío en mi interior quiero desahogarme, llorar no me está funcionando...

Mis nudillos están destrozados, es hora de volver a casa, no puedo parar de llorar, no quiero que mi mamá me vea así, sería difícil para ella apoyarme, después de todo, ella está enferma, y eso le ocasiona mucho estrés, espero en el camino poder parar estas lágrimas...

¿Qué hace una ambulancia fuera de mi casa? ¡¿es mi mamá la que llevan en esa camilla?!— ¿A dónde la llevan?— al hospital hijo, ¿eres algún familiar?— e-es mi mamá— sube, rápido, no le queda mucho si no es atendida rápidamente— hospital Brookwood, ¿Por qué todo lo malo sucede aquí? Primero la muerte de mi padre, después el fin de mi relación con Marie, ¡¿y ahora esto?! Dios mío, esto es mucho para mí— sé que solo estoy recordando, pero, no puedo evitar querer llorar— familiares de la señora Luz— y-yo, soy su hijo— sé que esto puede ser difícil, pero, ella no pudo resistir más, lo lamento— no puede ser, todo pasó demasiado rápido— si ella tiene familia además de ti, te recomiendo que les hables, no es bueno que estés solo en este momento tan difícil— ¿h-hay algún teléfono aquí?— en el segundo piso— gracias—

— ¿T-tía Rosa, puede venir al hospital Brookwood por favor?— ¿Adrian, estás bien? ¿Pasó algo?— solo venga por favor— voy en seguida— han pasado ya treinta minutos y mi tía aun no llega... —Adrian, perdón por tardar, ¿qué pasó? ¿Estás bien?— m-mi mamá, ella, murió— Dios mío, lo lamento mucho, pero, llorar ya no sirve de nada, no te preocupes, no estarás solo—

Siento un gran vacío, este día realmente fue el peor de toda mi vida— solo estoy recordando, ¿Por qué esto es tan doloroso? ¿Por qué lo siento tan real? Primero recordando la muerte de mi padre, después mi ruptura con Marie y, ahora esto, es extremadamente difícil ¿acaso solo recordaré momentos difíciles?... Jesus ¿quién era él? Quiero saberlo.

Nota:

Decidí publicar el cuarto y quinto capítulo de manera pronta, porque habrá cierto ausentismo por mi parte, debido a escuela y otras cosas... Gracias por leer :D