Ya es lunes por la mañana y estoy preparándome para ir a la universidad pero estoy tan cansada, mentiría si dijera que ayer dormí
Me pase haciendo tareas y pensando en Shawn, por algún motivo es tan difícil sacarlo de mi cabeza pero hago todo un esfuerzo por dejar de pensar en el.
Tomo mi desayuno tranquila mientras escucho música en mi iphone, después tomo mis cosas y me dispongo a salir.
El día esta muy agradable, tiene una brisa otoñal perfecta y aunque camino con paso apresurado procuro de disfrutar de las calles.
Llego y es un típico lunes en Columbia, chicos con cara de resaca y de mala cara pasan frente a mi; en otro caso me reiría pero a mi me paso lo mismo el sábado así que no puedo decir nada.
Voy hasta mis casilleros y me dispongo a sacar mis libros, de repente algo llama mas mi atención un murmuro se hace en todo el pasillo, miro con cautela lo que sucede
Ohh por supuesto debí imaginármelo; todo ese barullo se debía a que Shawn ya había llegado ¿siempre llama tanto la atención?
Y como no, si traía unos vaqueros gris que le quedaban fenomenal y una camisa negra ceñida a su cuerpo
Se le veía relajado, fresco como una lechuga tan perfecto y despreocupado
Se aproximaba hacia donde me encontraba halze la mano en forma de saludo y cuando iba a decir algo EL PASO DE LARGO ni un hola, ni un saludo corto con la mano, ni si quiera me miro.
Baje rápidamente la mano y agradecí que nadie me vio por que estaba tan avergonzada y molesta, cerré con fuerza mi casillero y camine hacia mi primera clase; aunque estaba enojada y la sangre hervía por mis venas también sentía un gran nudo en mi garganta que me apretaba el cuello y me amenaza con que iba a llorar .
Trague saliva y metí todo lo que sentía dentro mío no quería demostrar que estaba mal y mas por un chico al cual ni si quiera le importo; entre a la clase y desgraciadamente el también se encontraba ahí en primera fila; hice caso omiso a su presencia y me senté un poco mas atrás.
La clase empezó y aunque trataba de prestar atención mis pensamientos y todo mi cuerpo solo pensaba en una cosa ‘Shawn’
¿Por que me he picado tanto con este chico? Si a el ni siquiera le importo, si me salvo el otro día fue solo por amabilidad; y eso es lo que mas me molestaba.
Por suerte, el día paso rápido en el almuerzo no hable mucho con Sofi si le contaba lo que me paso se que lloraría y aun traía ese nudo en mi garganta que me iba apretando mas y mas casi hasta asfixiarme, por suerte mi amiga no insistió mucho en que le contara y comprendió mi situación aunque no sabia la razón
Ya por fin era la salida y algo de alivio se centro en mis entrañas, me despedí con la mano de Sofía y me dispuse a salir.
En medio del pasillo Cameron se puso enfrente de mi pero antes de que hablara yo lo esquive; no estaba de humor como para escucharlo.
Me persiguió unos minutos y lo único que escuchaba era ‘perdón’ ‘perdón fui un idiota’ ‘perdón no se que me paso’ pero cuando vio que ni le hice ni el mas mínimo caso dejo de molestarme y se fue.
Seguí caminando sin darme ni si quiera cuenta hacia donde iba, una cuadra mas adelante iba a cruzar la calle.
Cuando escucho una bocina aproximándose a mi; miro y hay un auto frente a mi apunto de chocarme cuando alguien toma de mi brazo y me estira bruscamente gritando levemente la palabra “cuidado”.
Todo paso tan rápido y sin darme cuenta, estaba apoyada en los brazos del chico que me había salvado con la cabeza metida en su pecho, mi corazón latía muy fuerte y mi respiración era agitada mientras inhalaba con fuerza el exquisito perfume de este chico ; mire hacia arriba con un destejo de ansiedad y…
-No puedo estar salvándote siempre -susurro dulcemente-
Oh demonios era Shawn otra vez estaba salvándome, tenia ganas de patearle y darle una cachetada pero estaba tan cerca de mi, mirándome y cubriéndome todo mi cuerpo con sus lagos brazos que por un momento decidí olvidarlo y mirarlo fijamente.
Sus ojos me penetraban y su proximidad era peligrosa quería besarlo ya desde hace un buen tiempo pero ahora mas que nunca.
Bésame… Bésame por favor -suplicaba para mi misma
Nuestras miradas parecían electricidad y yo trataba de descifrar lo que me decía su expresión.
Me aproxime dejando bien en claro mi intención el no decía ni hacia nada así que presumo que también estaba de acuerdo con mi acción.
Cerré los ojos y lo tenia tan cerca que hasta podía sentir su respiración y sus labios rozándome vagamente.
El también cerro los ojos, muy fuerte dejando escapar un suspiro que parecía de desesperación y molestia.
Muy rápido me soltó, abrí los ojos perpleja y el me miraba con el ceño levemente fruncido y con una mirada dura y muy difícil de descifrar.
-No soy un hombre para ti -hizo una pausa- …No soy lo que piensas -añadió-
Me aleje aun mas de el absorbiendo sus palabras, como pude ser tan estúpida EL NO ESTA INTERESADO EN MI.
Lo mire, mis ojos estaban empañándose ‘seguramente le doy asco’ seguía pensando y torturándome.
Le eche una ultima mirada como ‘pidiendo perdón’ y me aleje sin decir mas nada lo mas rápido que pude.
Miraba hacia abajo tratando de que no me viera nadie y en menos de lo que creía las lagrimas empezaban a caer de mis rosadas mejillas.
Llegue hasta mi casa, dando un portazo sin darme cuenta, por suerte mi mama no se encontraba en casa, subí rápidamente a mi habitación.
Me encerré y llore un buen rato con una frase que resonaba en mi cabeza “El jamás podría mirarte de la forma en que tu lo miras”
Y así me deje absorber por mis sentimientos y quede dormida encima de mi cama
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