Parte 3

8.2K 1.1K 362
                                    

—Bueno, cap—Tony cerró la puerta de su habitación y giró sobre sus talones para quedar frente a Steve—. Estamos solos. ¿Qué crees que diría mi padre ante esto?

—No creo que diría algo, me habría disparado entre ceja y ceja.

Tony rió.

—No lo creo, ya te lo dije, él estaría contento—Steve sacudió la cabeza para nada convencido de la seguridad de Tony—Te enseñaré algo.

Sentó a Steve en su cama y sacó de debajo de esta la caja de madera de su padre, la puso sobre el colchón, entre él y Steve.

—Dudé un poco en mostrártelas... pero creo que lo mereces, después de todo son tuyas.

Steve frunció el ceño al no comprender de qué le hablaba, pero lo entendió cuando reconoció su letra en algunas cartas y la de Howard en otras.

—Oh, vaya...

—Léelas cuando quieras, cap. Te las doy.

—Gracias, Tony.

—Las leí. Lo siento.

—Está bien.

—Hay partes vergonzosas, ya que habla de mis estupideces de infante.

—Debe ser adorable.

—Oh, cállate, capsicle. Y contéstame.

—¿Qué?

—Hipotéticamente hablando, ¿te molestaría tener una relación con el hijo de tu amigo? Suena bastante fuerte...

—¿Por ello es hipotético?—Tony asintió sonriendo—Tal vez en otro contexto me causaría conflicto.

—¿Qué significa eso?

—Que de no haberme convertido en una paleta de hielo—Tony rió suavemente—, y haberte conocido desde pequeño, me parece que sería algo impensable.

—¿Te sentirías mal?

—Como un completo pervertido.

—Ja, ja, ja pues no me importaría ser pervertido por ti.

—Tony...

Pero el castaño ya no atendió, hizo a un lado la caja de recuerdos de su padre y se colgó del cuello del capitán.

—No es el caso, Steve, al contrario, me he reformado un tanto desde que te conozco. ¿Qué? ¿Harás lo que dijiste o lo dejaras en palabras?

Steve no podía evitar la mirada de Tony, no en la distancia tan corta en la que estaban. Tampoco era como si quisiera hacerlo, la tentación era mucha como para no caer en ella. Así que ladeó el rostro y lo besó suave pero consistentemente. Un beso dulce que se fue transformando poco a poco en uno apasionado. Steve dejó caer las cartas para abrazar a Tony; y juntos desplomarse en el colchón entrelazados.

—Tony—murmuró el capitán aún renuente a abandonar los labios de éste, además, no podía, su cuello estaba bien sujeto por el ingeniero.

—¿Uumh?

—Hipotéticamente hablando—Tony rió—¿Qué harías si te dijera que quiero quitarte la ropa?

—Te diría que lo hagas, porque quiero lo mismo.

***

—¡Tony! ¡¿Dónde diablos te metiste?!

A Pepper poco le faltó para sacudirlo de los hombros.

—Es mi culpa, Pepper—dijo Steve—, lo lamento.

—Oh, Steve, ¿tuvieron una emergencia de tipo Ironman-Capitán América?

—Algo así—dijo Tony sonriendo pícaramente—. Oye, Steve, eso me gustaría para la próxima vez que...

Steve le tapó la boca con una mano y Tony rió contra su palma.

—¿Están bien?—Pepper los miró un poco extrañada, había cierta atmósfera entre ellos que no podía explicar.

—Casi—dijo Tony quitando la mano de Steve de su boca para contestar—, estoy caminando un poco raro, pero por todo lo demás, estupendamente.

—¡Tony!

—¿Qué, Steve? Se darán cuenta de todas maneras.

Steve rodó lo ojos, Pepper frunció el ceño, nada de lo que decían le hacía sentido.

—Bueno, no importa. Tony, tienes que hacer la declaración para la prensa, vamos.

Tiró de él hasta el estrado, donde habían dispuesto los micrófonos.

—Toma, esto es lo debes decir, ¿ok? Adelante.

Tony leyó la tarjeta que le había dado Pepper, pero una vez frente a las cámaras y micrófonos decidió cambiar el discurso. No era la primera vez que lo hacía.

—Gracias a todos por haber venido. La obra de mi padre y la mía esta condensada en estas cuatro salas, y definitivamente no abarcan todo lo que deberían. Aun así, espero que la hayan disfrutado y lo mismo va para los visitantes que vengan a ver esta exposición. Para cerrar esta velada, me gustaría hacer dos declaraciones. La primera: Mi padre no fue el mejor padre del mundo, pero sé que me entregó todo su cariño, muy a su manera, y mi manera de entregarle el mío es conservando su patrimonio y seguir haciendo historia. Y la segunda: me mudaré de la torre de los Avengers, no porque vaya a dejar de ser parte del equipo, sino porque ahora tengo una nueva pareja, y según mi primer experimento, necesitaremos privacidad o paredes insonorizadas en todo caso.

Los periodistas e invitados rieron, en tanto que Pepper y Steve cerraban los ojos como si esperaran un golpe.

—En fin, es todo. De nuevo, gracias por venir— estaba por irse pero se arrepintió y añadió—: Por cierto, no te pregunte, pero ¿está bien que nos mudemos, Steve?

Por supuesto que, al día siguiente, la primera plana de los periódicos no habló de la exposición en el MET por el aniversario de Industrias Stark.

FIN

-+-+-+-+-+-

Originalmente esto era un one shot, pero era tan largo, que preferí dividirlo. 

De pronto, me a ha dado por buscar cosas Stoward (Steve x Howard) y cómo preguntó una chica en  tumblr, "¿tendré algún daño por shippear a Steve con el padre y el hijo?"  Creo que sí, necesito ayuda. Sin embargo, creo que siempre ganara el Stony en mi corazón. 

Fue así como nació este intento de fic. Espero que les haya gustado. 

¡Nos estamos leyendo!


HipotéticamenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora