No hay requisito

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Al despertar y de vuelta al mundo real, me lleva a pensar cuantas veces no he deseado quedarme en mis sueños y no despertar jamas, volar en cada pensamiento de mi cabeza y dejar que todo sea como mi subconciente lo marque, aun asi hay que volver, porque la perfeccion que me ofrece mi mundo tiende a ser aburrida, la perfeccion es aburrida, apesar de que odio este mundo me parece divertido y amigable en cierto sentido, a pesar de mi repudio a la humanidad me resulta interesante ver como hay gente que quiere imponer una forma de ayudar sin recibir nada a cambio, pues para ser lo que son no necesitaron de un sacrificio, no tuvieron que tener un requisito para ser lo que son, ''soñadores'' gente que apesar de todo ''tiene fé''.

Todos los dias veo gente que viven de forma rutinaria y con unas caras de pocos amigos y expreciones de desprecio a quien se le acerque o personas que viven en un mundo de fantasias impuesto por drogas o alcohol que quieren volar a un mundo increiblemente bizarro, tanto que incluso el dr seuss encontraria raro.

Vivir como un soñador, o ''vivir'' como un adicto o ''vivir'' como un rutinario, son unos de los muchos caminos por los que la gente decice ir y casi todos estos tienen requisitos previos, como el rutinario que decide encadenarse el solo a la linea de un circulo y dejar que gire dia a dia, o como el adicto que dice tener una vida tan sufrida que decide vivir en un estado de sobre-exceso para no tener que pensar en eso que les molesta. Pero a diferencia de un adicto se desinive de la realidad o como un rutinario se encadena por si solo, un soñador no necesita nada, el mundo, los mundos no son lo suficiente grandes para ellos, el universo es pequeño, pues ellos viven en un sueño eterno a pesar de estar despiertos.

Y un soñador puede ser quien sea, un rutinario, un adicto, un mentiroso, etc. Pues un sueño es un sueño, algo que todos tenemos y que queremos traer a la realidad, mostrarlo y compartirlo, que el sueño deje de ser sueño y sea parte de la vida real.

Un salto diari y una taza de téWhere stories live. Discover now