Capitulo 13

42 4 0
                                    

-¿Donde es el baño? -Preguntó.

-Sales, giras hacía la derecha y ahí esta.

Spencer salió de la habitación con ropa en la mano y yo me senté en un pequeño mueble que tenía la ventana en la parte de abajo. Observaba la gotas que caían en la ventana y se unían unas con otras. Debo admitir que extrañaba sentarme aquí, pero me hace falta Lexy. Cuando éramos pequeñas ella no salía de mi casa. Mi madre la quiere como si fuera su hija.

-¿Que haces? -Dice mientras pasaba sus dedos por su cabello.

-Pensando. -Dije mientras me volteaba.

-¿En que? -Arqueó una ceja.

-Recuerdos que tuve aquí.

-¿Naciste aquí en Washington?

-Bingo. -Dije mientras miraba por la ventana.

-¿Estudiaste aquí? -Dijo mientras se acercaba a mi.

-Si. -Dije. -De hecho no queda muy lejos de aquí.

-¿Eso significa que aquí también conociste a Diego?

-Conocí a Diego cuando estaba en grado 10. Todavía recuerdo como fue todo. -Spencer carraspea. -No te contaré entonces.

-Cuéntame cuéntame. -Le miré seria. -Soy todo oídos, en serio.

-Bueno pues lo conocí en los pasillos. Luego me di de cuenta que el cogía la mayoría de las clases conmigo. El se sentaba atrás de mi en la clase de teatro y un día nos toco hacer una obra. En esa obra nos toco ser pareja y ahí empezó todo.

-¿Y luego? -En realidad estaba todo oídos.

-Luego empezaron los chismes. Diego y yo éramos bastante populares ya que el era de el equipo de baloncesto y yo era la líder de las porristas. Todos hablaban de el, como bueno y como malo. Los chismes llegaban a mis oídos y yo nunca le pregunté sobre ellos, pero todo resultó ser cierto. Si había estado con una chica mientras estaba conmigo, si coqueteaba con todas, entre otras cosas. Todo cambió. El no era el Diego amable y romántico que yo había conocido antes. Ahora era un Diego arrogante, puto, agresivo y pendejo también. -Spencer sonrió.

-¿A que se debe la sonrisa? -Arqueo una ceja.

-¡No no nada nada!

-Y bueno así lo conocí. -Dije mientras colocaba mi cabello detrás de mis orejas. -¿Y tu? ¿Como conociste a tu Samantha? -Dije un poco celosa.

-Primero que nada no es MI Samantha. -Dijo rodando sus ojos. -Ella era hija de unos empresarios amigos de mi padre. Mi padre quería que estuviera con ella para luego unir las compañías y yo pues acepté al igual que ella. Yo me volví loco por ella y ella me hizo creer que estaba loca por mi, pero no fue así. Luego de mucho tiempo de novios mi padre me da la empresa, pero todo cambia. Me enteré de que ella me estaba siendo infiel, solo quería el dinero y en realidad nunca me amó. -Dice mientras se sienta en la cama.

-¿Así es que por eso es que no la soportas?

-Exactamente, pero algunas veces hay que tropezar para llegar a algo o a alguien mejor.

-¿Y quien es ese alguien mejor?

-Tú. -Me besó y me sentó en su muslo. -Nunca pensé que estuviera volviéndome loco por mi secretaria.

-¿Ah no? -Dije pasando mis dedos por su cabello.

-No hermosa. -Dijo besando tiernamente mi frente. -Desde la primera vez que te vi no pude quitarte el ojo. Y cuando entraba el tal Carlos ese debo admitir que sentía celos.

-¿¡Carlos Quintanilla!?

-Ese mismo.

-Cariño... el es gay y me dijo que tu lo estabas mirando mucho.

-No puede ser. -Dijo mientras nos reíamos. -Ya me cae Carlos entonces.

Después de tanto hablar Spencer se acostó a dormir y yo me metí a la bañera.

*tiiin*

-Iré a visitar a mis suegros.

Salgo del baño y me asomo por la ventana y no veo nada. Me acosté al otro lado de la cama y Spencer se levanta.

-¿Que tienes? -Le doy mi teléfono.

-Ya no puedo más, necesito avisarle a la policía ya. -Dije botando una lagrima.

-No llores. Mañana en la mañana iremos a reportar esto. -Secó mi lagrima.

Spencer me abraza y me besa la cabeza

-Vamos a dormir.

-Un momento. -Escuché algo raro afuera.

-¿¡A donde vas!?

-Iré a ver. -Spencer me jala del brazo.

-Yo iré contigo y al frente.

Spencer pone su mano atrás cubriéndome mientras el baja cuidadosamente sin hacer ruido. El se asoma por la ventana que esta al lado de la puerta y ve un carro negro justo al frente de la casa.

-Quiero que subas.

-No te dejaré aquí.

-¡Sube!

Subí las escaleras y desde arriba veo que Spencer sale afuera. Corro hacia la habitación y me siento en la cama. Ya han pasado 5 minutos y todavía Spencer no llega. Salgo y bajo las escaleras y la veo la puerta abierta. Cuando llego a la puerta veo que el carro no está y tampoco encuentro a Spencer. Pensé lo peor. De repente alguien me jala por el brazo y me tapa la boca.

-Me extrañaste.

-Idiota pensé que te habían raptado. Me asustaste. -Dije colocando mi mano en mi pecho.

-Solo era una persona perdida.

-No me vuelvas a asustar así.

-¿Te asusté?

Lo ignoré y subí las escaleras molesta. Entre a la habitación y me acosté en la cama mirando al lado contrario para no verle la cara.

Spencer POV

-Así que no me miraras. -Arqueo una ceja y la miro desde la puerta.

-No.

-¿Y ahora? -Le decía mientras ponía mi mano en su muslo.

-Sigo diciendo que no.

-¿Ah no? -Coloque mi mano en su nuca y la besé suavemente. -Ahora si.

-Emmm no.

-Que difícil eres señorita. -Dije.

-¿Te gustan fáciles?

-Me encanta lo difícil por que disfruto cuando lo consigo.

-Ay ya.

-Siempre obtengo lo que quiero. -Dije besando suavemente sus labios.

-Eso veremos. -Dijo con una sonrisa pícara.

¿Casualidad o Destino? {Editando} حيث تعيش القصص. اكتشف الآن