Sweet Creature | l.s

III.

El sonido del teléfono despertó a Harry de su sueño, que soltó un quejido al moverse ya que había dormido en una postura horrible. Lo primero que hizo fue buscar a Louis con la mirada, pero no dio con el ¿Habría escapado?

No le importó que el teléfono sonara una y otra vez, comenzó a buscar al pequeño hibrido por toda la casa y frustrado al no encontrarle, finalmente descolgó el teléfono.

"Quién" Dijo alzando un poco la voz casi en un gruñido, a lo que la persona al otro lado de la línea soltó una carcajada.

"Madre mía amigo, parece que alguien se levantó de mal humor"

"Niall no tengo tiempo para esto, ¿Qué quieres?"

Pues devolverte el coche, pero si tanto te molesta... Está bien me lo quedare un día más si insistes, un beso adiós" Y antes de que el rizado protestara, colgó el teléfono.

Harry resopló y negó con la cabeza, antes de levantarse y estirarse un poco. Todo el dolor de su espalda desapareció cuando vio al hibridó con una sonrisa amplia sonrisa que no había visto el día anterior tarareando una canción que no conseguía reconocer.

"Buenos días Louis"

"Buenos días señor Harry" Dijo dedicándole una sonrisa caminando hacia el alfa hasta quedar enfrente de él.

Harry pudo observar sus preciosas orejitas con pelaje castaño a juego con una cola larga y algo pomposa que el hibrido movía de un lado a otro. Parecía feliz, y eso a Harry le hizo sonreír.

"Veras señor Harry, ayer fui un poco malo y no quiero que me devuelva yo... yo soy bueno y educado, y quería disculparme por cómo me porté ayer, tenía miedo" Confesó agachando un poco sus orejitas "Pero eres bueno y me cuidaste y diste comida, y quería agradecértelo asique cogí esta mañana algo para ti.

Harry observó unas flores que traía consigo el pequeño ojiazul, y no sabía si morir de ternura por el hecho de que le había regalado flores, o de risa porque sabía que a su vecina le daría un infarto cuando viera su planta favorita sin flores.

"Gatito, son preciosas, muchas gracias" Dijo con una amplia sonrisa cogiéndolas entre sus dedos "¿Qué te parece si las ponemos en agua para que no se marchiten?"

"¡Si!" Dijo emocionado mostrando una amplia sonrisa y abrazando por un segundo al rizado, el cual no pudo evitar reír por lo bajo e ir a la cocina a por un jarrón para las flores.

Y mientras llenaba el jarrón con agua, comenzó a sentir mucha culpa. Quería saber con detalle que pasaba con los híbridos y porque Louis estaba tan asustado la noche anterior, y que ocurriría si se enterara de que él era el quien lideraba esa empresa. ¿Le odiaría? ¿Volvería a tener miedo de él? Solo pensarlo le dolía.

"¿Estas bien señor Harry?" El omega le miraba algo preocupado y Harry simplemente suspiró con el semblante serio por todos los pensamientos que nublaban su mente.

"Tenemos que hablar, Louis" Dijo cogiéndole de la muñeca para guiarle al salón y poder sentarse a su lado. Quería contárselo, no quería ocultarle nada, quería prometerle que cambiaría todo lo malo que estaba ocurriendo, pero entonces Louis paró en seco y se soltó del agarre mirándole con terror.

Los ojos ya se le habían llenado de lágrimas "No, no por favor no hice nada malo, por favor"

"¿Qué pasa Louis? ¿Qué ocurre pequeño? No te haré nad-" Pero al primer paso que dio para acercarse vio a Louis soltar un pequeño sollozo.

Harry no se atrevió a tocarle.

"No me toque señor, no me haga daño, yo seré bueno, traeré otras flores si no le gustan, yo seré bueno" Sollozó haciéndose bolita en el sitio sentándose en el suelo y cubriéndose con la cola.

Harry se sentó en el suelo, a una distancia prudente sin entender su miedo tan repentino "¿Qué te han hecho pequeño? ¿Por qué tienes miedo?" Dijo en un murmuro, y Louis alzó su cabecita mirándole con sus ojos llorosos.

"M-me ibas a pegar, ellos también me llevaban a sitios para pegarme... No quiero, no me hagas daño, seré bueno, lo prometo..." Murmuró y el ojiverde se acercó un poco haciendo a Louis encogerse.

"Jamás te haré daño, y no me acercaré a ti si tu no quieres gatito" Dijo notando como sus ojos se ponían vidriosos. No quería llorar, pero ver a aquel pequeño tan roto se le hacía difícil aquello.

Louis volvió a alzar su cabecita y al ver al alfa aguantando las ganas de llorar, movió su cola poniéndola sobre sus piernas, invitando al ojiverde a acercarse.

Y Harry le abrazó con fuerza, manteniendo al pequeño tembloroso contra su pecho.

"Prometo cuidarte y protegerte, nada te va a pasar mientras estés a mi lado, no quiero volver a verte derramar una lagrima pequeño" Louis ronroneó de manera casi inaudible y Harry acaricio una de las mejillas del omega "Estás a salvo, te mantendré a salvo"

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Hola ♥ Aquí tenéis el capitulo tresde la historia, ¡Gracias por leer! Espero leer vuestros comentarios, me gusta mucho verlos y ver que os esta gustando♥