Corazón Principiante✔️

CapítuloCuarentaYUno|Malestar|

—¿Piensas que lo haré cuando veo que estas enferma?—habló esta vez más suave—. Cariño...—la llamó al verla bajar la cabeza—. Mírame—ella lo miró a los ojos. Él suspiró—. Haré lo que me pidas, lo sabes, pero no me pidas que te deje sola, eso nunca—sonrió levemente—. Me sentaré a tu lado y te apoyarás contra mí si es necesario, ¿estás bien con eso?

—Sí.

Él se limitó a abrazarla y ella se dejó hacer mientras esperaban. Los ojos de Noah se habían iluminado cuando imaginó que aquél mareo y su palidez, podría ser un síntoma de embarazo. La apretó en sus brazos y besó su frente.

...

Un agotado, pero feliz Mike salió de la sala de partos. Se quitó el gorro, la bata estéril y las calzas. Se recostó a la pared y suspiró profundamente. Su pequeña había nacido luego de tanto esperarla. La cesárea había durando más de lo que se creía, pero todo había salido perfectamente. Ver cómo su hija nacía, había sido lo más sorprendente que había visto en su vida. Sophie había sido llevada al área de Neonatología, puesto que había nacido un mes de anticipación.

Tomó su móvil y le envió un mensaje a Noah, comunicándole en dónde se encontraba la bebé.

Miró cómo las enfermeras sacaban a Mary de la habitación luego de que la doctora terminara la sutura. Siguió a las enfermeras hasta la habitación en donde ella estaría los próximos días. Cuando las enfermeras terminaron de arreglarla se dispuso a tomar un banquillo y sentarse a su lado. Tomó una de sus manos y la apretó, para luego darle un pequeño beso.

—¿Cómo está la bebé? —preguntó ella.

—Está en el área de Neonatología, la van a revisar.

—¿Qué haces tu acá? Deberías estar con ella.

—Sophie está bien, seguro mis papás están allá. Necesitaba estar contigo y ver como estabas.

—Me siento terrible. Fue horrible empezar un parto normal y terminar con una cesárea.

—Era necesario. Y, ¿sabes? Siento que mi amor por ti se incrementó.

—¿Ah, si? ¿Y por qué?

—Porque sí. Has estado a mi lado apoyándome en cada momento y ahora, me has hecho papá.

—Prepárate para cambiar pañales y rezar para poder tener sexo con tranquilidad.

—Oh, sé que podremos arreglárnosla.

...

Noah miraba con ojos brillosos a su sobrina a través de la pared transparente de la habitación en donde estaba ella y otros bebés. No estaba muy lejos, por lo que podía detallarla un poco. Su cabello era rubio, como el de Mary y su piel era rosada. La había reconocido por el nombre que había al frente de la pequeña cuna.

Habían varias personas a su alrededor observando a los bebés. Tenía amplios deseos de cargara Sophie, puesto que siempre le encantó la sensación de cargar a un pequeño ser. Sonrió y pasó su brazo por los hombros de Kara y la pegó a él. Se inclinó un poco y besó su frente.

—Vamos a ver a Mary, estoy segura que pronto llevarán a la bebé.

Todos menos Nora y Anselmo, se dirigieron hasta la habitación. Un rato después Noah yacía recostado en el sofá, estaba impaciente por ver a su nueva sobrina. Alzó la mirada y vio cómo el estrenado padre se unía a su lado.

—Veo que no soy el único con ansias de cargarla.

—Eso no te lo puedo negar. ¿Sabes por qué están tardando un poco en traerla?