HASTA QUE DECIDAS DEJARME

CAPÍTULO 1

Son unos cuarenta y cinco minutos de viaje, no hablamos demasiado, los dos estamos bastante nerviosos y se nos ve a la legua, así que decido subir el volumen y cantar con Derek como si nos fuera la vida en ello.

Mi madre se había ofrecido a llevarme, pero preferí irme con mi mejor amigo. Mi madre se habría echado a llorar en el último momento y me apostaría el cuello a que al final conseguiría que me quedara a vivir en casa y tener que chuparme cuarenta y cinco minutos de viaje todos los días.

A Derek en cambio, no le importa mucho eso de dejar atrás a sus padres ni nada de eso. La verdad es que los dos trabajan mucho y nunca han estado especialmente presentes en su vida. Él ha crecido más con mi familia, pero bueno, agua pasada, ahora empezamos nuevo capítulo, nueva vida.

-Hemos llegado -informa Derek sonriente.

-¡Síííí!

Nos bajamos del coche y lo primero que hacemos es observar el panorama, bueno, lo observo yo porque he dejado un poco sólo a Derek con eso de bajar las maletas del coche.

-Reina, ¿ayudas o te has hecho la manicura recientemente?

-Sí, se ve que te apañas - Derek y yo nos reímos y, finalmente, le ayudo con las maletas.

-A ver Cami, agarra tus cositas y vamos a secretaría a preguntar por nuestras residencias, anda.

-Sí, voy.

Una vez estamos en secretaría nos atiende una señora parecida a una bruja en potencia. Gafas de culo de botella, pelo canoso y...

-¿Eso es una escoba? -pregunto a Derek divertida, el cual no puede aguantar la risa y acabamos recibiendo una mirada asesina por parte de la encantadora señorita de la secretaría.

-Soy Derek Moore -se dirige a la señora.

-Aquí tienes tus llaves de la residencia y tus horarios y normas de la universidad. Estás en la residencia E, cruza el pasillo que hay en los jardines de aquí enfrente y busca el bloque E, la habitación 20, en el segundo piso. Las clases comenzarán el lunes a la hora que tengas asignada, cualquier duda que tengas la puedes venir a consultar y espero que pases un magnífico año - y le dedica una última sonrisa de: no me importa lo que hagas con tu vida.

A mí me toca en el bloque C, habitación 35. He quedado con Derek en que nos veríamos en una hora en la cafetería, así nos daría tiempo a instalarnos en nuestras habitaciones, conocer a nuestros compañeros y tal y pascual.

Atravieso el pasillo que nos ha dicho la secretaria y termino en los ascensores. Lo que llevo visto de universidad es bastante grande y bonita, el campus es bastante verde y hay mucha gente. Las instalaciones incluyen un campo de fútbol, canchas de baloncesto, y unas pistas de atletismo rodeando un edificio que parece ser el polideportivo, donde se practican el resto de deportes.

Al llegar a la habitación número 35 dudo entre abrir la puerta o no. En el momento en el que cruce esta puerta cambiará todo, una nueva vida más independiente, adiós a vivir con mi madre, adiós a mi infancia, adiós a mis vecinos pesados, y adiós a la emoción del momento porque ahora mismo acaba de abrir la puerta una chica que supongo que será mi compañera de habitación.

-Hola -dice la chica entusiasmada. Tiene una sonrisa de estas de Dios, para de sonreír que se te va a salir la mandíbula.

-Hola -digo devolviéndole la sonrisa no con tanta intensidad. La chica parece bastante normal, es mona, tipo de modelo y cara dulce. Pelo rojo y sonrisa de hoyuelos. Tiene unos ojos verdes muy expresivos, y automáticamente, me cae bien.

-Soy Emily, y supongo que tú debes de ser Camila, mi compañera.

-Sí, perdona. Llámame Cami - digo tendiéndole la mano y mostrándole una sonrisa amable.

-Genial. Bueno, nos vemos luego, voy a investigar el campus - y sin decir nada más sale corriendo como mi último novio.

Ya he terminado de instalarme en mi habitación y voy de camino a la cafetería donde me tengo que encontrar con Derek. Voy mirándolo un poco todo, me parece increíble que ya esté en la universidad.

Entro en la cafetería buscando una cara familiar entre la multitud, y en un despiste, choco contra alguien derramándole encima el batido que lleva, o llevaba, en la mano.

-Perdón, perdón, perdón - digo medio suplicando mientras intento limpiarle el batido de chocolate que le acabo de tirar sobre su blusa blanca -. Ha sido un accidente, perdóname.

-¿Es que acaso no miras por dónde vas? -dice mirando horrorizada a su ahora marrón camiseta.

No, quiero decir.

-Sí, sí. Iba mirando otra cosa y... me he chocado. De verdad perdóname, yo te pago la blusa, o quédate con la mía - digo empezando a quitarme la camisa que llevo puesta.

-¿Se puede saber qué haces? ¿Piensas desnudarte delante de media universidad? - pregunta agobiada. Me quedo pensativa aún con las manos desabrochando los botones cuando dice -: Déjalo, iré a cambiarme.

Bienvenida a la universidad Cami, bienvenida.

-Bonito espectáculo -dice Derek guasón -. Aunque yo me he quedado con ganas de que te quitaras la camisa - sonríe en mi dirección provocándome, motivo por el que le doy un puñetazo de broma en el hombro. 

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Bueno chixs, aquí el primer capítulo de esta novela, soy nueva en wattpad así que espero que le deis amor y que os guste mucho.

Hasta el próximo capítulo,

MyOwnWorld_14