Sangre Prohibida

2- Un Vinculo Especial

|Katia|

Han pasado seis meses mi pequeño angel crece y se hace más fuerte cada día, ahora estamos en un parque porque le gusta estar en la naturaleza siempre llevo mi anillo solar para no quemarme.

—Hola hermosa —escucho la voz de Blas detrás de mi.

Él también usa un anillo solar.

—Chico Playboy —le digo antes de verlo.

—Sabes que no me gusta que me digas así —me responde "enojado"

Unos segundos después se ríe.

—Nahh mentira —se sienta con nosotros—¿Es tu pequeño angel?

—Si—sonrío—Su nombre es Dylan.

Mi pequeño se ríe.

—¿Y tú Chico Playboy? —Lo miro—¿Encontraste a tu pareja destinada?

—Si —veo como juega nervioso con sus manos.

—¿No estas feliz? —asiente con la cabeza—Entonces ¿que pasa?

—Son dos hombres —me dice y cierra sus ojos asustado.

—¿Y eso es malo? —me ve sorprendido.

—¿No me dirás que esta mal o que soy un anormal?

—Primero, eres uno de mis mejores amigos y no importa si eres heterosexual, homosexual, bisexual o transexual sigues siendo TÚ —agarro su mano—Segundo y lo más importante, nunca te dejes llevar por lo que te digan o traten de hacerte TÚ tienes que sentirte orgulloso y no tener miedo de quien eres —limpio sus lágrimas.

Dylan empieza a llorar.

—¿Que pasa, mi angel? —lo agarro y él se apoya en mi hombro.

—Esta celoso —Blas sonríe—Para ser un bebe de siete meses ya le haces una escena de celos.

Dylan deja de llorar y empieza a balbucear cosas que no entiendo.

—Ustedes tienen un vinculo especial —sonrío mientras acaricio la espalda de mi angelito.

Pasamos toda la tarde juntos hasta que llegó la hora de irnos a casa.

Dylan se quedó dormido, lo cubrí bien con su manta y seguí caminando hasta que llegue a casa.

—Acuéstalo en su cuna —le ordeno a una de mis sirvientas.

Tengo que alimentarme.

Papá me advirtió que no iba a poder alimentarme de otras personas porque ahora encontré a mi pareja destinada y solo puedo beber de su sangre, eso me asusta debido a que me volveré loca y atacare a Dylan. Tengo que hacer cualquier cosa para que eso nunca suceda.

Nunca me podría perdonar si yo lo lastimara.

—Cuídalo bien mientras yo no estoy —le ordeno a la sirvienta.

—Si, señorita Katia.

Al salir de mi casa encuentro una presa para poder alimentarme, se trata de un hombre joven que esta hablando por el celular en un callejón oscuro.

Aprovecho que esta distraído y me acerco a él.

—¿Puedes ayudarme? —sonríe al verme.

Termina su llamada para acercarse a mi.

—¿En que te puedo ayudar hermosa?

—Quiero tu sangre —mis ojos cambian de color.

Él me ve asustado.

—No grites —mis colmillos se agrandan hasta sobresalir de mis labios—No te dolerá.

Dejo el espacio suficiente y muerdo su cuello.

Al principio era normal pero después cambio a un sabor repugnante, saque mis colmillos su cuello y vomité su sangre.

¡¡No Puede Ser!!

—Olvida lo que paso —lo hipnotizo y después me voy.

*****

—¿Que pasó? —le pregunto a mi familia cuando veo a Dylan llorando.

—Se despertó así —responde mi hermano Darío.

Agarro a mi angelito y se calma.

—No podíamos calmarlo —dice mamá.

Dylan tiene los ojos rojos de tanto llorar, beso su frente y lo acomodo mejor en mis brazos para que se duerma.

Tiempo después

—Katy ¿que pasó? —pregunta papá cuando llega a casa.

—Tenias razón, no puedo beber sangre de otras personas.

Papá me ve preocupado.

—Tengo que llamar a Aixa —agarra su celular y llama a nuestra bruja de confianza.

Ella no tarda en llegar y me pide ver a Dylan.

—Esta arriba —vamos los tres a la habitación.

Entramos y Aixa se acerca a mi angel.

—¿Puedo? —me pide permiso para tocarlo.

—Si —agarra su manito.

Veo como saca una jeringa de su bolsillo.

—¿Que vas hacer con eso?

—Necesitas su sangre —mis ojos cambian de color y ella se aleja de él.

—No vas a lastimarlo —me pongo delante de Dylan para protegerlo.

Mis colmillos sobresalen de mis labios.

—Tienes que confiar en mi sino lo haces morirás.

Veo a Dylan y después a ellos.

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Espero les guste y gracias por leer 💋💋💋