capítulo 24

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Al llegar al departamento y ante las miradas de sus amigos dejó tiradas las bolsas de las compras y corrió directamente hacia su habitación, por un minuto se dejó llevar por aquel beso que volvió a cautivarlo por un sólo segundo pudo revivir aquellos viejos momentos junto con raphael; unos momentos que por más que quisiera borrarlos no podía.
Aquel beso había revivido aquellos momentos en donde había conocido la felicidad, se lanzó a la cama y comenzó a llorar como bebé; deseaba perdonarlo pero algo dentro de el se negaba a hacerlo.

Paso una semana desde que paso, raphael no había visto a leonardo en esa semana entera, había ido a su departamento a preguntar por el. Pero siempre recibía como respuesta; "esta enfermo no puede atenderse"  leonardo se la paso pensativo, no deseaba ver a raphael en esos momentos.

-maldicion, ¿¡porque me tiene que pasar esto?!- se preguntó mirando al techo - porque por más que intento ser feliz ¿no puedo sacarlo de mi mente?

Con raphael

-¿como podré volver a tenerlo? -se preguntó a si mismo

-creó que dejar de ser un idiota -

-que haces en mi cuarto mike - respondió con enojo raphael

-no soy mike, y llame a la puerta pero como no me contestaste entre

-que quieres -

-si quieres volver a conquistar a leonardo, tienes que volver a hacer que se enamore de ti -

-¿¡que?!- preguntó sin entender nada

-tienes que enamorarlo de nuevo, hacer las cosas que hicieron que leonardo se enamorará de ti, idiota -le dijo saliendo del cuarto

-Donatello tiene razón, daré mi mayor esfuerzo para que leonardo se vuelva a enamorar de mi -

Semanas después.....

Habían pasado semanas y los amigos de leonardo se tuvieron que ir de vuelta a la universidad ya que habían faltado muchos días a esta, se despidieron en el aeropuerto no con un "adiós" común si no que con un "hasta siempre" al abordar el avión leonardo sintió un vacío en su interior; volvió a su departamento en silencio y con la mirada baja, al llegar cerro la puerta con pesadez.

Minutos después golpearon a su puerta, camino lentamente creyendo que podría ser alguien que estuviera equivocado de puerta pero al abrirla se encontró con sus padres.

-que hacen aquí -hablo de forma seca y sería leonardo

-leonardo, hijo - la señora iba a abrazar a leo, pero el se corrió

-que quieren - hablo

-nos enteramos de que volviste a la ciudad, queríamos venir antes pero.....tu sabes como son las cosas en el trabajo -comunicó en señor saki riéndose

-si lo se, no era necesario que vinieran en este momento estoy ocupado y con cosas que hacer- hablo leonardo serio

-no sólo venimos a eso, bueno......el sábado en la noche haremos una fiesta para reincorporarte a la familia y a la empresa familiar - dijo con entusiasmo la señora saki

-si y como es tu fiesta, tienes que ir con un acompañante - hablo el señor saki

-lo lamento, pero no puedo ir el sábado tengo universidad además de que no soy parte de su familia -

-pero leonardo, hijo - dijo la mujer en tono lastimero

-¡no soy su hijo! -grito -entiendan ¡no los quiero ver más! -los miro con lágrimas en los ojos

-lo lamentamos leonardo, lamentamos todo el daño que te causamos - hablo el señor saki

-vayanse por favor, tengo cosas por hacer

Leonardo les cerro la puerta apoyándose ella y respirando con dificultad, ¿como se atrevían a venir así como si nada a decirle que me lo van a reincorporar a la familia y a la empresa? Después de todo lo que le dijieron cuando el vivía con ellos, eso es poco humano.
Cada día le quedaban pocas ganas de vivir, pero ¿despues de la tormenta viene el sol? ¿No?.



Continuará........

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