Sabrina, una persona común que sintió siempre una sensación de justicia y revancha en todos los aspectos de la vida. No se dio cuenta de como empezó, ni tampoco se dio cuenta cuando terminó.
El primer caso se dio cuando nuestra pequeña Sabri tenía tan solo 6 años recién cumplidos y empezaba la escuela primaria. Llegó el recreo o receso y Sabrina tenía muchas ganas de hacer amistades, sobre todo con chicos y chicas mayores que ella. Muy gentilmente le dijo "¡Hola amigo!" A un chico de tercer grado, este se burló de ella dejándola en ridículo adelante de sus amigos e incluso una profesora que no intervino en la escena. Dos horas después de lo sucedido la directora del colegio pasó por los salones para informar a los alumnos que un chico había resbalado y se había quebrado el brazo. Si señor, era el mismo chico que se había burlado de Sabrina. ¿Lo que es el destino, no? ¿Quién iba a decir que el chico que se había burlado de nuestra protagonista se hubiera fracturado el antebrazo?
Pero eso no es lo único que le pasó. El Karma actuaba en contra de otros y también en contra de uno mismo. Sabrina aprendió esto a la fuerza.
Si, la niña de 6 años de la que hablamos todo el relato le rompió intencionalmente un lápiz a un compañero. Media hora mas tarde y accidentalmente se le enganchó la regla entre la camisa y la mesa, esta se le partió en 2.
No fue muy difícil para ella entender el relato de la Biblia que dice "Trata a los demás como quieres que te traten". Ya que después de el caso de la regla nunca mas quiso hacerle el mal a alguien.
Empezó a comprender lo que representaba el Karma.
Y dijo esa misma noche: "Hasta la próxima vez, mi Viejo Karma"
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Viejo Karma
Random"La vida es justa y da revancha". Palabras muy acertadas. La historia de la adolescente que vivió viendo como las injusticias se resolvían. Sabrina tratará de descubrir la teoría del Karma y como actúa, y sobre quienes lo hace.
