Narra Samuel
Willy llegó con un balde con agua, secadores y un trapo que metió dentro del balde, busco el secador y comenzó a trapear dándose cuenta que había puesto demasiado jabón, al querer darse vuelta para reclamar ayuda, resbaló, salvado su linda cara con sus manos, exponiendo su trasero frente a mi y no es que quisiera verlo, solo que me sorprendió ver que un chico tuviera tan bonito y redondo trasero.
- ¿Que coño me ves? ¡Ayúdame!
Mi cara seguramente estaba roja de la vergüenza, me había cachado mirándole el trasero, nervioso no supe más que pedir perdón - Eh..ehh si si, disculpa.
Me miró enojado o eso parecía, hasta que sonrió. - Mejor me ire a cambiar.
Asenti dejándolo libre de mis ojos y comencé a limpiar sin pausa, unos minutos después cuando llegó estaba vestido con un pantalón color morado.
- Lindos pantalones, el morado es mi color favorito.
- Si lo se - Rio, yo creo que cualquier persona que visitara mi casa se daría cuenta - Me los puse por ti.
Su sonrojo había logrado ablandar mi corazón - Ay mi Willy - Bese sus mejillas y lo abrace, daba demasiada ternura - ¿Y si vamos a desayunar afuera? Tienes que lucir esos pantalones tan geniales.
- Pero hay que terminar de limpiar la cocina, Sami.
- Ya la limpie ¿No te diste cuenta? Tardas años en cambiarte cariño. - Reí nerviosamente al darme cuenta del apodo, esperaba que no se diera cuenta, lo miré y corrí hacia mi cuarto a cambiarme.
Escuche a Willy susurrar, solo esperaba no haberlo asustado .- ¿Cariño?
¤¤¤¤
Cuando estuve listo, caminamos a un café que había cerca de casa, concretamente a dos calles, al llegar entramos y nos sentamos en una mesa que daba a la calle, no había autos ni gente que mirar pero el día estaba hermoso.
Hablamos un poco antes de que el mesero llegara - Puedo tomar tu orden? - Dijo el mesero con un tono algo coqueto, su mirada y sonrisa indicaba que me hablaba a mi.
- Un café con medialunas, por favor.
Lo anoto rápidamente y miró a Willy con notable desagrado - ¿Y tú?.
- ¿Que? ¿A mi no me coqueteas? O acaso el trabajo de mesero coqueto es por tiempo.
- No se de que hablas.
- No sabes... - Willy sonrió de lado con una mirada aterradora, el mesero se estaba incomodando y yo también por lo que decidí frenar la situación.
- El va a querer lo mismo.
El mesero se fue y el silencio reinó hasta que trajeron nuestras órdenes.
- No me digas que estabas celoso.
- ¿Yo? Para nada, no soy celoso.
Lo mire cuestionandolo..
- Bueno si. - Sonrojado cual tomate comenzó a tomar su café.
- Ay willy.
Narra Willy.
Me encontraba enojado, ese maldito y asqueroso mesero se cree que puede coquetear con Samuel en mi puta cara, si supiera. Cuando nos trajeron nuestra orden decidí calmarme un poco, un idiota no iba a arruinar mi desayuno asique comence a hablar con Samuel de cualquier cosa, con cada palabra suya mi mal humor desaparecia. Cuando nos encontrábamos ya por terminar vi entrar al baño al mismo mesero estupido.
ESTÁS LEYENDO
• Esquizofrenia • Wigetta • (Editando)
FanfictionSamuel de Luque es el mejor investigador en toda España, este se encontraba muy estresado cuando le asignaron la tarea de averiguar la identidad del horror sin rostro de Madrid ¿Podrá hacerlo? ¿Que pasara cuando descubra quien es? ¿Y si se enamora?