P A R T E 1

11 1 0
                                    

La mañana del martes 9 de septiembre del 2028 pasaron muchas cosas extrañas en la inusual vida de Inna Oliver, era una mañana feliz y lo podía sentir de pies a cabeza, tenia en su pequeño estomago una sensación de alegría que jamas nunca había vivido a sus cortos 13 años, como cada mañana la música comenzó a sonar en su habitación, pero esta vez era distinta, sin letras, sin poemas, solo emociones expresadas en diferentes notas, la luz entraba por su pequeña ventana en forma de pétalo, y daba al vestido que la noche anterior la madre de inna había colgado en el ropero de su hija. 

Cuando  ms.Lauren entro en la habitación, inna llevaba puesto ya, el vestido gris y estaba sobre la cama esperando por su madre para que le cepillara el cabello, la madre de inna era hermosa, un metro ochenta, cabello perfectamente lizo, y unos hermosos ojos azules, heredados directamente de la familia de sus abuelos, quienes traspasaron esta herencia a toda su familia generación tras generación.

Cuando tenia tu edad, mi cabello era una horrible broma de mal gusto, todos los niños me molestaban - decía su madre, mientras que con un intento de delicadeza fallida cepillaba el pelo de su hija.

una vez que el pelo de inna fue tomado y amarrado en una cola, la madre beso en la frente a su pequeña hija y salio de la habitación junto a Inna. 

La casa de la familia Oliver era una combinación entre una sutil contemporaneidad entre lo moderno y lo romántico, los gustos de sus padres eran raros y ella lo sabia, su madre trabajaba en un famoso centro de ayuda humanitaria que ella misma había fundado cuando tenia solo 27 años y ahora 15 años después, era una de las marcas mas emblemáticas en lo que ayudar a otros se refería, teniendo influencia en áfrica, Europa y todo el continente americano, era una mujer importante. Su  padre era arquitecto, trabajaba codo a codo con importantes proyectistas y artistas de la actualidad.

 En los pasillos de la casa se podía sentir los materiales de la pared de una forma distinta cada mañana, inna poso su mano sobre esta y avanzo paso por paso sin retirar su delicadas manos. Al bajar las escaleras de su casa Inna se percato de que su padre estaba esperándola, vestido de forma elegante, un cabello impecablemente, ordenado y moderno hacían que se viera, incluso mas alto de lo que era en realidad, un metro setenta y cinco. Una vez abajo su padre se inclino para besarla en su frente y presento su mano empuñada frente la presencia de Inna, entonces le regalo un pequeño broche dorado con el símbolo de una hoja perfectamente partida en la mitad y que era sujetada al borde del broche por unas pequeñas alas.

-Querida inna- dijo mr.Lee- Fue Mateo, el hermano de tu padre quien le obsequio este pequeño amuleto el día en que, tu padre, viajo a Alberta,Canadá.

Parecía un objeto muy peculiar, pero inna no le presto demasiada atención, ella tenia su concentración puesta en que no se le cayera la cabeza en el suelo y rodara 30 metros por los enormes y viejos pasillos de la casa, dejando su delicado pelo rubio esparcido y claro a ella decapitada por los fuertes cepillados de su madre.

Ese peculiar martes por la mañana el frió era peor que nunca, inna lo sabia, sabia que en el momento en que cruzara esa puerta su pequeña e indefensa existencia seria acabada por las bajas temperaturas de la ciudad, mr.Lee por su parte sabia que su hija no le gustaba el frió y comenzó a cantar la canción que su abuela le cantaba cuando el era solo un niño:

"¿De donde vienes querida nieve, de donde vienes que me quieres llevar?, puedo sentir el tacto de tu frió en mis pies, incluso sin tocarte, que lugar tan puro y frió es de donde vienes, Y ¿Me llevaras si me niego?, porque madre compro una armadura de colores para que no sepas de mi piel, aunque si mi voz te doy, se que mis palabras las congelaras y te las llevaras, hay querida nieve de donde es que vienes que quiero ir."

Lee deja a la niña ya!, que nos tenemos que ir, deje la comida sobre tu escritorio - ms.Lauren corría por la casa buscando sus zapatos para ir a trabajar - inna sube al auto ahora tenemos que irnos ya.

mr.Lee se levanto, tomo los abrigos de su hija  y la del, se las pusieron y mr.Lee abrió la puerta 

LEE, DIOS MIO QUE HACES! - ms.Lauren alcanzo a cerrar la puerta antes de que inna y saliera por la puerta principal de la casa - Dios mio Lee de verdad esta es la ultima vez que te voy a perdonar que no pongas los segadores a nuestra hija - La madre de inna saco de una pequeña caja cafe unos pequeños  lentes de contacto y los puso en los ojos de su hija - ya esta querida- la mirada de ms.Lauren ahora se dirijia directa y críticamente a los ojos de su esposo.

Mr.Lee dejo que su esposa abriera la puerta por ellos y llevo a su pequeña hija hasta el auto de marca Tesla rojo que aguardaba a las afueras de su casa.

Donde estamos papá - pregunto inna con sus ojos cerrados, mientras se acomodaba en los asientos del auto.

Estamos vivos querida Inna, Dios nos dio vida y debemos siempre estar agradecidos con el - Ms.lee respondio con la voz entrecortada.

¿Lo estamos padre, vivimos de verdad ? - comento la pequeña. abrió los ojos y miro a su padre. Los segadores hacían que los ojos de Inna se volvieran blancos. evitaban que sus ojos cristalinos fueran afectados por la luz del día.

Mr.Lee evito la pregunta,  y  cerro la puerta de inmediato - Cada vez son mas oscuros estos espacios, amor mio - dijo Mr.Lee a su esposa mientras admiraba el cielo.

Solo no pienses en eso amor - la pareja se beso con la inocente mirada de su pequeña puesta en esa romántica escena - nos vemos después del trabajo - señalo ms. Lauren mientras  se subía a su auto. El motor del auto comenzó a cargar y los comandos del tablero se proyectaron frente a la mujer, señalo los comandos de destino y velocidad, y dio inicio al programa. - Inna querida, ¿Que pasa contigo hoy?- la pregunta tan directa capto la atención inmediata de la niña.

Soñé con ella de nuevo madre, el viento  era delicado y suave, era helado, pero agradable, era oscuro, sin las luces del día, y saltaban en el cielo, algunas viajaban a gran velocidad  y mis ojos las reflejaban, las entendían, les hablaban, y giraba, con mis pies descalzos solo disfrutaba de ellas y ellas de mi - contesto Inna.

Estrellas... - Respondió ms.Lauren.

Inna se levanto de su asiento y se saco los lentes de contacto,miro hacia atrás y  observo la oscuridad de la ciudad - ... vida ... mama. 


You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Sep 08, 2017 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Impacto: Abriendo los ojosWhere stories live. Discover now