Mi nombre es Benjamin Katsukami fui parte de una historia de amor que termino en un final tragico mi hermano Zamuel Katsukami que hace unos dias hubiese cumplido 35 años se enamoro de una chica llamada Steffania Himoruno, una linda historia de amor, una historia entre tres personas, un tipico triangulo amoroso, Zamuel, Steffania y yo su hermano menor, nuestra historia fue muy hermosa, asi como terrible.
-hola, me llamo Zamuel Katsukami, tengo 15 años -conociendo la mente de mi hermano, se estaria muriendo de los nervios pero mostrando fortaleza por fuera.
-eh... yo soy Steffania Himoruno y tengo 15 años
-Veo que los dos tenemos apellido japones -el buscaba conversacion si la otra persona le interesaba.
-eh...si
-y, ¿por que decidiste cambiarte al colegio a esta altura del año? -a veces resultaba molesto, porque no siempre la otra persona deseaba conocer a mi hermano, pero cuando era obligados, lo llegaban a querer.
-es que me mude
-enserio, ¿donde? -uno sentía la necesidad de agarrar algo y golpearlo.
-eh... no se muy bien me tengo qe bajar en la quinta estacion del tren y tres cuadras más
-¡espero que seamos buenos amigos! -pero cuando esas ganas de golpearlo se van, quizás luego de cuatro o cinco encuentros, te dabas cuenta que era interesante, y siempre estaría, a pesar de todo, jamas abandonaría a una persona que consideraba importante en su vida.
-si,eso espero, eh... mejor entramos al aula.
Se enamoro de la chica equivocada, fue muy estupido, al igual que yo, fuimos muy estupidos, cuando conoci a Steffania, Zamuel se le estaba declarando, desafortunadamente su amor era correspondido, cuando un amor es correspondido, otro es negado.
-Steffania, ¿puedo hablar contigo? -no es que me importara su conversacion, pero estaba entre la espada y la pared, arriba me buscaban por jugar una pequeña broma, y a la vuelta de la escalera estaba mi hermano y su voz se notaba debil, algo importante necesitaba decir, y no queria arruinar su momento.
-eh...si, dime Zamuel
-Desde el primer dia que te vi me enamore de vos, espero que sea correpondido -contuve mi risa con las manos, no podia arruinar su momento, no me lo perdonaria.
-eh...si, creo que si
-Entonces, noso...sotros, eh...¿estamos saliendo? -la voz de la chica sonaba dulce, y tranquila, parece que ella se lo tomaba con mas tranquilidad, como si el que se enamoraran de ella y que correspondiera fuese algo de siempre.
-eh... creo que si
-que bueno. -la voz de mi hermano sonaba con mas tranquilidad, como si hubiese sacado un peso de encima.
-si me tengo que ir -me quede quieto, pegado a la pared, aun con mis manos en mi boca, cuando ella comenzo a caminar con tranquilidad, escuche un ruido mas arriba, mire hacia donde provenia el ruido, cuando senti una mirada a mi espalda, y quizas ¿una sonrisa? cuando volvi a mirar hacia el final de la escalera solo pude ver una parte de ella, su cabello negro y largo, y parte de su piel blanca, no demasiada, pero si la blancura justa.
Creo que ahi comenzo esta tragica historia
-¡jaja! Zamy, Zamy, hoy conseguiste tu primer novia ¡jaja! -quizas la risa era exagerada, pero asi le advertia que estaba ahi, cuando llegue al final de la escalera, vi a mi hermano nervioso, y gritaba en silencio.
-¡Benjamin! le contare a mamá que estas de chusma -si habia algo a que le temieramos ambos era a nuestra madre, especialmente a sus sermones.
-si le cuentas querra conocer a tu primer novia, le mostrara tus fotos de bebe, al fin y al cabo te hara pasar verguenza -despues de todo era la verdad, conociendo bien a nuestra madre, se querria deshacer de todas personas ajenas, pero de buena manera, no de manera psicopata.
