3. Luna

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Ahora, mi presente se puede resumir en una palabra: Sola. Estoy sola sin Darío. 
Mis amigas al principio se preocuparon mucho por mí, sólo había un tema de conversación que compartiera con mis amigas, y siempre era el mismo. Me preguntaban sobre cómo lo llevaba, intentaban darme consejos, con sus palabras procuraban ayudarme, pero de nada servía, ya que yo, para evitar preocupar a mis amigas, sonreía, les decía que poco a poco cada vez me iba encontrando mejor, y que aunque le extrañara profundamente, sabía que podría salir adelante. 

Qué gran mentira. 
Mi vida había dado un inesperado giro, y los días después de su fallecimiento, sentía que no podía parar de pensar en aquella última vez que nos vimos, cuando él me pidió que jamás le olvidara, y cuando yo pensé que aquellas palabras las había dicho sin tener ninguna razón especial. Hasta que comprendí, que él ya sabía cuál sería la fecha de su muerte, y después de eso, el único recuerdo que me queda es de aquel último abrazo. Un abrazo, que sin palabras, supuso más que cualquier despedida. Porque aquella madrugada, Darío se despidió de mí. 

A veces él decía que la vida no tenía sentido, había algunos días en los que decía que si él alguna vez moría, que no me sintiera apenada por su ida, ya que él iría hacia donde está la luna. Pero yo nunca creí en sus palabras, porque pensé que eran palabras que se decían en aquellos momentos de tristeza, que todas y cada una de las personas vamos a tener a lo largo de nuestra vida. 
Ahora, está haciéndole compañía a la luna. 

Cada noche que pasa, cuando sale la luna, no puedo evitar pensar en él. Cada vez que miro a la luna, le recuerdo, imagino que me está hablando, que sonreíamos como siempre solíamos hacerlo. Que me abraza, imagino que le puedo decir que le quiero, y él me responde que siente lo mismo por mí. 
La luna me ilumina y pienso en porqué tuvo que irse. Logró abrirme su corazón, dejarme todos sus temores y sueños, y yo escuché hasta sus peores pesadillas, sin embargo, jamás llegué a pensar que alguna vez desaparecería. 

Un día en el que hablamos hasta tarde, Darío parecía más pensativo de lo habitual, noté cierta tristeza en sus palabras, pero al día siguiente volvía a ser el mismo chico alegre que conocí. Durante aquellas horas me dijo: —¿Conoces la efeméride de la vida? A veces, tan solo en un abrir y cerrar de ojos desaparece aquello por lo que luchamos. Hay días en los que no entiendo porqué tenemos que vivir, pienso que nadie se daría cuenta de mi ida, nadie lloraría por mí. Porque todos y todas somos prescindibles, y sin embargo, llega un momento en el que nos convertimos en el centro del universo de una persona, y aquella persona, es aquel ser al que amamos. Me gusta imaginar que pasamos toda la vida juntos, quizás el amor no sea eterno, pero si en algún momento el amor llega a desaparecer, siempre nos quedará la amistad, el cariño, el afecto, aunque todos aquellos abrazos queden en el olvido. Si algún día me voy de tu lado, quiero pedirte algo: Cuando mires a la luna, recuérdame. Porque ella brilla aunque nadie le mire, cada noche alumbra la oscuridad, y es en las noches de luna llena, cuando el pensamiento no descansa, cuando miramos hacia la luna, y nuestros pensamientos se pierden en la inmensidad del firmamento. Han sido muchas las noches en las cuales he mirado hacia la luna, y he pensado en el amor, en la vida en general. He imaginado que todas y cada una de las personas somos como pequeñas estrellas, que cuando morimos, brillamos en el cielo, alumbrando la vida de las personas a quienes amamos. Y yo te amo a ti, así que si algún día muero, seré la estrella que alumbre tu camino, pero jamás dejes de sonreír. 

Aquellas palabras habían permanecido olvidadas hasta que llegó aquel triste día en el cual todas las palabras que me dijo se cumplieron. Encontré significado a sus palabras y las recordé una y otra vez.
Darío ahora es una estrella en el cielo. 

Cuando por las noches siento que los pensamientos me impiden descansar, miro hacia el cielo. A veces no veo la luna, pero siempre, siempre hay una estrella que brilla un poco más que las demás, y aunque sé que no es cierto, imagino que es él que intenta hablarme. 

Cuando mires a la luna recuérdameWhere stories live. Discover now