SINIESTRO

Capítulo 4: Parte cuatro

"Harry... tengo... tengo que llevarte a Violet Quarters..." El susurro, e instantáneamente la sonrisa de Harry se había ido y golpeo lejos su mano con un sollozo desordenado, sus manos volando para intentar cubrir su cara.

"¡No puedes!" El grito en sus palmas, mirando hacia arriba con ojos desbordantes, "¡No puedes encerrarme otra vez! Eso es todo lo que ellos hacen y ya no está ayudando!" Estaba gritando, y Louis retrocedió, sollozando el mismo. Su corazón dolía y su cabeza inclinada mientras lloraba, sabiendo que el chico estaba en lo cierto, pero aun así tan equivocado.

Es un asesino.

Enciérralo antes de que pueda llegar a ti.

Ese pensamiento trajo de vuelta el borroso recuerdo de golpear el piso con un ruido sordo y mirando a través de una visión borrosa a un obviamente confundido y frustrado Harry –que rápidamente se convirtió en horror y llanto; la primera noche hace 2 años. Él no lo había matado entonces, antes de todo esto, entonces, porque lo haría ahora?

Louis parpadeo unas lágrimas más mientras intentaba de llamar a su lado terapeuta, para ver lo que realmente beneficiaría al chico.

Tú.

El miro al chico, quien se estaba aferrando a la colcha de la cama como si estuviera sostenerse a sí mismo aquí, como si tuviera miedo de que Louis vendría y lo lanzaría a la nieve, de regreso a una habitación acolchada. Cualquier persona sana y normal haría eso.

Louis volvió a él, y Harry, de hecho, se encogió y era tan inusual que pico en Louis y él se acercó tentativamente para quitar las lágrimas de su cara.

"Okay... está bien, Harry. Nosotros," El respiro profundamente, ahuecando su mano en su barbilla y levantando su cara para hacer contacto visual, "Nosotros haremos esto juntos, averiguaremos lo que paso... okay? Juntos, así que tienes que ayudarme y no inventar historias." La expresión facial de Harry cambio de temor y terror a una de asombro, sus cejas fruncidas y sus rasgos faciales tensos instantáneamente se relajaron en una mirada de ojos saltones y labios entreabiertos. El asintió una vez, antes de que su labio inferior temblara de nuevo y bajara la cabeza y empezara a sollozar –pero era un llanto de alivio y agradecimiento.

El chico de repente miro hacia arriba, golpeando sus dos enormes manos en cada lado de la cabeza de Louis –quien chillo en sorpresa- y tiro de el con fuerza, presionando toscamente sus labios contra los suyos. Louis se relajó parcialmente cuando se dio cuenta de que era un beso inocente. Harry descuidadamente trazo sus labios mojados a lo largo de los suyos, agarrando su cabello mientras sollozaba abiertamente, boca abierta y respirando en alientos mientras presionaba besos poco entusiastas en los labios de Louis, nariz, y frente.

Y tan pronto como empezó, un soplo vacilante corto el silencio y Harry se sentó en sus pantorrillas con una mirada aturdida en su cara. El pestañeo varias veces, tragando con fuerza. Sonrió maliciosamente, antes de que fuera apagada rápidamente y mirara por la ventana, "Vete."

Louis negó con la cabeza, sorprendido, "Que?"

"Sal," dijo Harry en un tono igual y lo miro fijamente, "Necesito pensar."

Louis asintió aturdido, arrastrando los pies fuera de la habitación, cerrando el cerrojo, y parándose de pie en el pasillo –donde la tenue luz de la farola de afuera inundaba. Se paró ahí, mirando a la pequeña imagen de la noria London Eye en la pared, la cual, en la oscuridad, parecía una red de macabras varillas en contraste con el sombrío cielo. La mirada que se había fijado en la imagen se hizo borrosa con sus lágrimas, y miro hacia abajo a sus pies, cubriendo su cara con sus temblorosas manos mientras un sentimiento de impotencia de nuevo se lo tragaba enteramente.