Parte única

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Dedicado a todas esas amistades hermosas que por cosas de la vida terminaron antes de lo que a uno le gustaría. 

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No more hanging out cause we're on a different track.

And if you got something that you need to say, 

you better say it right now cause you don't have another day

{Friends Forever- Vitamin C}


[5/8 10:34 PM] King JJ: Deberíamos juntarnos mañana, hace un mes que Beka se fue y no nos vemos... ¿En el lugar de siempre?

[5/8 10:35 PM] Leo: ¡Claro! Luego te llamo y arreglamos.

[5/8 10:36 PM] King JJ: Ok.

Una semana después ninguno había sido capaz de llamar al otro. Se querían mucho y necesitaban verse, pero no eran los mismos sin Otabek.

Para muchos era muy difícil de comprender como esos tres se habían convertido en amigos, después de todo tenían personalidades y vidas tan diferentes.

Su amistad no se formó de manera increíble o algo parecido; Otabek Altin era nuevo en Canadá, en la pista de Vancouver, y en hacer amigos... algo que a Jean Jacques Leroy no pareció importarle, después de todo el canadiense se acercó al kazajo a los cinco minutos después de terminar las prácticas.

Al moreno le costó horrores lograr respuestas de más de dos palabras por parte del menor, pero cuando lo logró pudo descubrir que su nuevo compañero de pista era nativo de Kazajistán, venia de una larga estadía en Rusia y USA, y por sobre todas las cosas era DJ.

Cinco casilleros más atrás Leo de la Iglesia escuchaba todo. No tardó mucho en unirse a la conversación de Leroy y el nuevo mientras comentaba que él también era DJ.

Así como los meses iban pasando, las conversaciones de los tres se volvían más y más largas, incluso comenzaron a ir juntos a un café cercano o al departamento de alguno para continuar con la charla. Empezaron a salir los fines de semana, Leo y Otabek habían conseguido trabajo de Dj en un club no muy lejano a la pista, y Jean iba siempre a observarlos a la cabina.

Quizás ninguno de los tres notó cuando su amistad subió de nivel, pero definitivamente fue después de una larga semana, en su última noche de campamento. En esa noche, los tres comenzaron a hablar de temas más personales: sobre el miedo a no ser lo suficientemente bueno y defraudar a los que ama de Jean, el temor a quedarse solo de Leo, o el dolor que le provocaba a Otabek fallarle a su país y lo mucho que lo extrañaba. Abrieron sus corazones a otro nivel, se confiaron lo que nadie excepto su familia sabía, y prometieron silenciosamente guardar esos temores y complejos en esa noche estrellada de verano.

Después de eso las salidas se volvieron cada vez más comunes, pasaban tanto tiempo juntos que decidieron mudarse a un mismo piso... "El sueño del adolescente" lo denominó Leo cuando pagaron el primer mes de alquiler.

Vivir juntos era bastante sencillo, Jean siempre cocinaba, Leo y Otabek limpiaban, y los tres se pusieron de acuerdo en abandonar el piso esa noche cada vez que alguno llevaba una cita, aunque Otabek y Leo dejaron de irse cuando Isabella venía ya que eso sucedía casi todos los días.

De esa forma pasaron sus días, viviendo juntos; con Jean enseñándole saltos a Beka, Leo ayudando a Jean con la melodía de un nuevo tema llamado "Theme of King JJ", y comiendo pizza casi todas las noches.

Una noche Otabek llegó llorando al departamento, al comienzo no sabían si era de felicidad o tristeza, fue bastante doloroso saber que era por ambas.

Me vuelvo a Kazajistán— rápido y sin anestesia, como una vacuna de esas que al comienzo no te provocan dolor pero a los segundos crean un ardor casi insoportable en tus venas. Ninguno sabía cómo reaccionar, ni que decir.

El kazajo se iba en un mes, y desde el día en el cuál recibieron la noticia comenzaron a cenar cada uno en un lugar diferente. Jean salía con Isabella y se quedaba en su departamento casi todas las noches. Otabek vivía planeando su regreso a casa y trabajaba todos los fines de semana en diferentes bares. Y Leo solo seguía, continuaba su vida sin saber exactamente que rumbo tomar...

Cuando el kazajo se fue no era un día gris o lluvioso, todo lo contrario, Canadá era iluminada por el sol más brillante de ese año, la gente sonreía y hacía su vida, como si la promesa de tres humanos de ser "amigos para siempre" no se estuviese rompiendo luego de que el menor de ellos abordara el avión que devolvería a su hogar.

Jean abandonó la pista de Vancouver para ir a Toronto, sus padres decían que era más cómoda para entrenar, y quedaba cerca de su nuevo departamento. No se despidió de Leo así como tampoco se despidió de Otabek cuando volvió a su país, después de todo él odiaba las despedidas.

En cuanto a Leo, el siguió en la misma pista, con la misma gente y con la misma vida, aunque el vacío que sentía al entrenar solo era completamente nuevo.

Y Otabek, ajeno a todo esto, volvió al país que le dio la vida, a donde pertenecía.

Un año y medio, solo eso bastó para unirlos como hermanos y separarlos como extraños. Leo a veces suele buscar una respuesta, y solo llega a la conclusión de que hay personas que solamente están en nuestras vidas por un corto periodo de tiempo, para después alejarse sin motivo. Nunca iba a admitir que en la soledad de su cuarto recordaba lo que probablemente había sido el mejor año de su vida. Había formado de algo especial, de un grupo de personas con un gran corazón y un gran futuro por delante.

Aunque no era el único que recordaba esos días con cariño y un poco de dolor.

Quizás algún día sus caminos iban a cruzarse otra vez, después de todo la vida es así de impredecible...


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Espero que le haya gustado, hace mucho venía pensando en esta amistad que circula por el fandom...

Friends forever {JJ/Leo/Otabek}Where stories live. Discover now