Saga Delucios 1: Besos de un Inmortal (Completada) SE PUEDE LEER SIN EL EPÍLOGO

Capitulo 10

 

Pasaron dias sin dirigirnos la palabra, el evitba estar en la misma habitacion que yo. Trataba en lo posible no salir mientras estuviera dentro de la casa, el sofa se habia hecho su cama y mientras yo no usaba el televisor era su lugar favorito. Pude notar leves cambios en el, entre ellos su falta de aseo aunque me pregunte si era a proposito y no tendria que hacer solo un chasquido de dedos para arreglarse, si solo estaba haciendose el martir.

Durante las clases el se mantenia callado escribiendo mientras que explicaba, aunque otras chicas le tocaran, jamás le vi salir con una del instituto, aunque muchas iban detrás de el con excusas tontas.

En el ultimo sábado habia salido nuevamente con Tomás, el habia estado esperandome para cuando llegue, intento preguntarme algo pero el simple olor de Tomás cerca de mi, parecia hacer reacción acida a su estomago y terminaba por retirarse de la habitación.

No pensaba darle una oportunidad sincera a Tomás, pero estaba claro que Raúl necesitaria mucha más ayuda que Tomás para que le permitiera volver a confiarle.

Esa noche particularmente el estaba ido mirando hacia afuera. El no estaba dentro de si mismo. Parecia estar viendo una pelicula de fantasmas de su pasado.

Y temi que fuera realmente por eso.

Escudriñe su rostro tratando de parecer imparcial, cuando finalmente la duda me carcomio y tuve que preguntarle.

-          ¿Piensas en algo de tu pasado?

Mi voz parecio tomarlo por sorpresa.

Pero fue su voz la que me tomo por sorpresa a mi.

-          No... y si.

Su voz parecia estar rota.

-          ¿Qué quieres decir?

-          Pienso que toda mujer que toco, término lastimandola.  

Mi corazón se derrumbo al oir eso. No por que estuviera dañado, sino porque estaba claro que lo que paso con su hermanastra no fue lo unico que paso en su vida de forma sexual.

-          ¿Hubieron otras? – pregunte y no sabria decir con que sentimiento.

El no respondio, solo hizo una medio mueca de lado. Y luego comento.

-          Lucía esta aquí.

Y con eso se retiro de la habitación evaporandose.

El habia sido hace unos segundos la viva imagen de la vergüenza. El nisiquiera me habia mirado a los ojos.

Segundos inmediatos Lucía sono la puerta y abri para recibirla, su cara estaba mucho mejor pero en sus ojos habia una clara pena.

-          ¿Qué sucede? – pregunte preocupada.

-          Ya lo se todo Amelia… - dijo con tristeza acercandose y dandome un abrazo – lo lamento, debi haber estado hace dias aquí para acompañarte…

-          ¿De que.. hablas?

-          Raúl… ¿te sientes bien con todo esto?

Entonces senti la neblina caer sobre mi.

-          Si… gracias.

-          No eres buena mintiendo – rio con tristeza cerrando la puerta tras de ella.

-          ¿Cómo te enteraste de… a que llamas todo?

-          Todo, Tomás hablo conmigo y me pidio que te echara un ojo, me conto lo que sucedió ese dia y que incluso habian estado comprometidos… yo, eso no lo sabia ¿Por qué no me lo dijiste?