Prólogo

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          El sol estaba en el punto más alto del cielo iluminando cada centímetro del subsuelo. Unos zapatos se acercaban al aula de clases mientras el viento soplaba en una dirección calmada, de pronto su visión empezaba a nublarse y la atención, que hasta ese momento estaba dirigido a sus compañeros, empezó a flaquear y buscar un nuevo punto en donde fijarse.
El bullicio del alumnado le llegaba a los oídos como una molestia, como si deseara salir de allí a como dé lugar, sin embargo, algo se lo impedía, algo que no sabía del todo, que estaba fuera de su conocimiento, pero que lo intrigaba en lo más profundo de su ser. Fijó su vista en la entrada, pero todo seguía igual, con las mismas personas que ya conocía paradas a un lado. Comenzó a asentir con la cabeza para que sus amigos pensaran que prestaba atención, pero algo le inquietaba.

Los demás estudiantes empezaron a adentrarse en el aula de clases, tomando el lugar que les correspondían. Sasuke se levantó del asiento donde se hallaba y caminó hasta la última mesa, en donde se encontraba su verdadero lugar. Flexionó los brazos y los colocó en la carpeta cuando se sentó del todo y adoptó una postura seria, como era habitual en él.
Un hombre alto entró en el salón y caminó hasta el pupitre de maestro que le pertenecía, dejó el maletín de cuero que llevaba en su mano derecha y se paró firme en medio del pizarrón blanco. Por reflejo, todo el alumnado se puso de pie para saludar al hombre mayor, vociferaron el respectivo saludo y volvieron a tomar asiento.

- Buenos días alumnos. Espero que las cortas vacaciones hayan servido para que estudien. No quiero volver a sacar del reclusorio a alguien de ustedes. Lo digo por ti, Chouji – señaló al chico que se sentaba en la segunda fila.

El público estalló en pequeñas risas y el mencionado se unió a las carcajadas en cuanto dejó de sonrojarse por la vergüenza. Obviamente el profesor se refería a la oficina de Mala Conducta cuando hablaba del "Reclusorio".

- Bien, tengo algo importante que decirle antes de empezar con nuestra clase – prosiguió – como saben, todos ustedes han estado juntos desde la primaria y eso. No hay alumnos nuevos y si lo hay, ya se han adaptado. Han pasado solo tres semanas desde que iniciaron las clases, sin embargo, hay una alumna nueva que viene a unirse a ustedes.

La vista de todos se dirigió hasta la entrada, incluyendo la de Sasuke que, con su típica seriedad, quiso fingir falta de interés, pero algo le decía que debía mirar hasta donde la voz del maestro se dirigía.
El pequeño cuerpo de una joven se movía lentamente desde la entrada hasta el interior del aula de clases, su cabello estaba atado en una coleta de caballo dejando caer un par de mechones rebeldes a ambos lados. Su rostro estaba sonrojado mientras sus manos temblaban. Sus ojos se escondían de la mirada de los demás y su respiración era algo acelerada. Era obvio que se moría de la vergüenza por estar allí, pero era su deber entrar y presentarse.
Llegó hasta donde se hallaba el profesor y entonces, con gran esfuerzo, miró a todos los jóvenes que se hallaban dentro de la habitación.

- Ella es su nueva compañera a partir de ahora. Espero que todos ustedes se lleven bien y le enseñen lo que hemos hecho estas últimas semanas – volvió a mirar a la joven – ahora debes presentarte con ellos.

Los ojos de la muchacha volvieron a fijarse en un punto inexistente mientras se debatía internamente en que decir. Respiró hondo y cerró los ojos por un momento, cuando volvió a abrirlos, todo rastro de timidez desapareció de su rostro y les dedicó una enorme sonrisa a todos los presentes.

- Mi nombre es Sakura Haruno. Tengo 13 años y fui transferida recientemente a esta escuela. Espero llevarme bien con todos ustedes y hacer nuevos amigos. Un gusto conocerlos a todos.

Todos se quedaron callados ante la efusividad con que la muchacha había dicho todas esas palabras. Sasuke por su parte suspiró y se recostó en el asiento.

- Demasiado chillona e hiperactiva. No quiero ni pensar cómo se portará cuando entre en confianza – pensó.

Las palabras "Bienvenida" y "Es un gusto conocerte" empezaron a sonar por todos los lugares, Sakura esperó que el profesor le asignara un lugar para poder tomar asiento y empezar con la clase. Caminó hasta la última mesa de la última fila y dejó su mochila en la silla vacía que yacía junto al lugar de Sasuke.

Él le dedicó una mirada de fastidio y comenzó a escribir en su libreta.  Ella se dio cuenta de su mirada y se avergonzó un poco.
La clase comenzó su curso y el maestro tomó el plumón correspondiente para escribir en el pizarrón.
El salón de clases empezó a sonar silencioso.
Y el destino de Sakura y Sasuke empezaba a escribir su historia.
Una historia que no tenía nada de especial, pero que marcó profundamente a ambos.




Bueno aquí esta otra de mis historias. Esta la avanzaré cuando acabe "Noche rojo carmesí, así que no se desesperen si aun no ven un capitulo aquí. ¿Por que quise hacer una historia escolar? Bueno, la verdad busco desahogarme contando un poco de mis problemas con esto :'v, asi que si hay mucho drama no se molesten porque es solo mi triste vida siendo contada xD. Así que dije, ¿por que no contar mis problemas por medio de un fanfic, ya que tengo muy pocos amigos? Entonces ¡boom! se me ocurrió esto :3. Habrá romance, peleas, drama, corazones rotos, felicidad, concursos de bandas, música cool, etc. Les encantara se los aseguro (o al menos eso espero xD) Me gustaría que me acompañen en este nuevo proyecto y que les encante.  Y en fin, si les gusta no duden comentar y votar, ademas de hablar de la historia con sus amigos. Gracias y besos :* 

El Sonido De Mi AmorOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz