Parte 4 Seamos Amigos

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Toda la tarde en la cafetería estuve atendiendo y la vez pidiendo que el reloj marcará las 4 y a la vez que se detuviera no sabía que quería pero si estaba segura de algo... en verdad mi corazón se paralizaba cuando lo veía, me acorde cuando vino y lo feliz que estaba el poder verlo de nuevo pero a la vez tenía miedo de saber que iba a pasar después de esa platica, dejé a un lado el celular y le pedí a mi jefa si podía estar en cocina lavando trastes para dejar de ver ese reloj, estaba pasando la canción de Younger de Kygo y la puse en repetición con los audífonos, (esa canción me tranquilizaba mucho) cuando de repente mi jefa me llega hablar y me dice:

Romina: -Vale, sí que estas concentrada (se ríe) desde hace 5 minutos te hable para la hora de tu descanso, ve a comer.

-Claro, gracias Romina- Le respondí.

Salí temblorosa y con mi comida de la cafetería pensando que él no iba a llegar cuando a lado de la banquita de la café ahí estaba sentado esperando, estuve a punto de irme y comer adentro cuando el volteó y nos quedamos viendo, el con esa sonrisa, esa sonrisa... se paró el corazón y me saludo los dos estábamos muy nerviosos cuando él dijo.

Villamil: -Entonces no piensas darme de esa comida (se ríe y fue una buena forma de romper el hielo pensé)

Nos pasamos un rato jugando con la comida y bromeando, hasta que nos quedamos mirando y nos pusimos serios y dijo:

Villamil: Perdón, Valentina, como te deje, no fue la forma pero en verdad tengo muchas cosas que arreglar en mi cabeza, y se escuchará un algo pretencioso pero mi vida es complicada.

Lo único que se me ocurrió fue:

-No estás casado, ¿verdad?

Villamil: (soltó una carcajada) Haces que esto no suene a una plática seria, y para nada de donde sacaste esa vaina, para nada, digamos que me la paso viajando y no Vale tampoco soy narcotraficante ni nada de eso, antes que se te ocurra otra cosa (nos reímos) por ahora yo sólo puedo ofrecerte mi amistad en verdad eres una gran chica pero si te tengo que decir algo me gustas, pero tengo novia, no podría hacerle eso...

Cuando escuche eso no lo voy a mentir sentí que algo se me rompía por dentro y me confundía más lo que me estaba diciendo

Villamil: Por ahora estamos pasando por un momento difícil y creo que fue por eso que te hable en el bar por favor no me lo tomes a mal, no eres y nunca serás alguien para pasar el rato en verdad me encanta platicar contigo, me encantaría tenerte como amiga, pero entenderé si te vas y no vuelves hablarme, mientras esté en México me gustaría con quién platicar o conocer y compartir, que tú seas esa persona, si lo dije es algo complicado al decir que me gustas pero tal vez con el tiempo es cambie no crees, que tal si yo no soy lo que tu espera...

-O yo tampoco lo que tu esperas (la verdad en ese momento no sabía que pensar si mejor irme porque me podría gustar más y esto de la amistad sería una tortura, pero a la vez siempre he querido ese amigo con el que compartes, sin saber que lo tomará como otra cosa, como él dice tal vez no sea lo que yo pensaba) Villa, me gusta esa sinceridad ya vi los puntos malos y buenos y creo que son más los bueno, agradezco que seas sincero y que hagas lo posible por mantener esa relación, pero hay algo que me intriga en verdad, ¿de que trabajas entonces?

Aprender a quererte...Where stories live. Discover now