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Cameron
Estamos los dos limpiando la cafetería otra vez, ella esta enojada conmigo. No fue mi culpa.
-Te odio - me dice.
-Y yo a ti.
Nos acercamos cada vez más, estoy por decirle una estupidez pero me detengo.
Suelta un suspiro.
-¿Sabes que?-hablo yo.
-¿Que cosa tengo que saber?
-Me agradas.
Ella comienza a reír.
-¿Agradarte yo?
-Si.
-Eres estúpido ¿no?
-No lo soy.
-Para mi lo eres.
-Me tengo que ir.
-¡¿Me vas a dejar sola?!
-Cómo digas, tengo...una fiesta en cuatro horas, la organizó yo, ¿vienes?
-¿En tu casa?
-Si.
-Bueno - se encoje de hombros y dejamos de limpiar, ya tenemos la mitad de la cafetería limpia, la otra no, pero nos da lo mismo, tengo que irme.
Ella se va en su auto y yo la sigo.
Nos bajamos al mismo tiempo y entramos en nuestras respectivas casas.
Mis padres se fueron de viaje por tres semanas así que hoy organizare una de las mejores fiestas, ya tengo todo planeado.
Entró a mi habitación y siento que alguien golpea el vidrio.
-¿Quien esta...-veo a Avril mirándome y sonriendome.
-Me dejan ir, ¿Puedo pasar?
-¿Ya te cambiaste? Aparte faltan dos horas.
-Ya lo hice.
-Baja y toca timbre nena.
-No me digas así.
-OK preciosa.
-Tampoco.
Suelto un bufido y ella se va.
(****)
-Hola estúpido.
-Hola nena.
-¡Ya te dije que no me digas así!
La saludo y ella se sienta en unos de los sillones de la casa.

Mi vecino #wattys2018Where stories live. Discover now