Perdiendo mi virginidad | PARTE UNO |

Parte 5

-Señor Francisco!

-Francisco Morris!

-Y aquí estamos con el empresario mas exitoso... Francisco Morris.

Francisco le dio la palabra a un joven muchacho:

-¿Como va el trabajo?

-Ah... Pues bien bien...

Otra mujer se apresura a decir:

-Y las relaciones con su familia?

-Oh pues... Muy bien, hace poco los visité y están muy contentos con mi exitoso trabajo.

Una mujer rubia de ojos saltones lo miró pícaramente:

- ¿Y el amor?

-Am... Bueno... Yo... Mi secretaria... estoy de novio con mi secretaria Jazmín Gulich.

Continua la narración de Jazmín Gulich.

Todos se fueron directo a mi oficina, ósea la de Jazmín Gulich y le preguntaron:

-¿Como es tu relación con el gran empresario?

-¿Es gentil?

-¿Lo amas?

- ¿Qué se siente ser la novia de un empresario como él?

Casi no la dejaban responder...

-Emm... llevamos poco tiempo juntos pero de lo que conozco de él es muy bueno y gentil. Capaz las preguntas deberían guardarlas para cuando llevemos mucho mas tiempo juntos ¿No creen?

-Si.

-Como desee señorita.

Me fui directo a la oficina de Fran y siquiera toque la puerta.

-Hola...- Dije seductoramente.

-Hola hermosa...

Cerré la puerta con cerrojo y él se mordió el labio.

-Te deseo Fran...

-Yo más... - Me senté en sus piernas y note como se le paraba su amiguito.

Nos besamos apasionadamente. Su llega comenzó jugueteando con la mía, abriéndose paso entre mis cavidades. Poco a poco el beso se fue haciendo más profundo, deseoso, desesperado. Los dos estábamos muy excitados.

-Él día que lo hagamos será muy especial ¿sabes?

Yo volví al mundo real y me bajé de sus piernas-Sisi... Ahora me voy a trabajar ¿Nos vemos a la salida?

-Obvio princesa.

En la noche...

El se acercó a mi y comenzó a besarme mientras me acariciaba mi entrepierna.

-Amor... Si me lo permites, hoy quiero mostrarte de una manera diferente cuanto te quiero...

-No comprendo Fran...

El suspiró- En otras palabras, que hoy te deseo más que nunca...

-Am... pues... solo si me convences...

-Ufff pero que fácil- Comenzó a Quitarse la ropa, se veía tan sexy. Su abdomen estaba perfectamente marcado, y tenías las entradas en sus piernas que siempre había imaginado...
Quedó en ropa interior y me dijo- Ahora es tu turno.

-Ok...- No quería perder el juego, asique me quité la ropa muy sexy, mientras me iba tocando todito. Note su cara de excitación al verme en ropa interior.

Me besó y luego bajó para mi cuello... llegó a mi corpiño y dijo:

-¿Me lo permites?
Este hombre es la dulzura personificada.

Yo estaba tan excitada que ni lo pensé y asentí. Quitó mi corpiño y dejo al descubierto mis pechos. Me beso y mordió mis pezones... jugueteaba con su lengua sobre ellos, me hacía ver las estrellas...

Luego bajó hasta llegar a mi calzón. No preguntó y me lo quitó.

-Ja! Lo sabía. ¿Estas dispuesta a entregarmela?

No dije nada coherente...- Dale... sigue que me encanta... Dale papi...

El me empezó a masturbar, lento, de un lado a otro, en círculos. Nunca había sentido una sensación tan linda.

Se dispuso a hacerme el mejor oral, su lengua se paseaba por mi clítoris, y luego a mi huequito aún pequeño. Después volvía a mi botoncito y lo besaba, mordisqueaba. Esto me sacó muchos gemidos de placer. Era la experiencia más rica que había sentido. De repente, comencé a sentir una electricidad nueva, que hizo que me temblaran las piernas de placer. Hasta que llegué el orgasmo.

Él se quitó el bóxer y pude ver a su hermoso amigo erecto. Era demasiado grande, y eso me asustó un poco, pero decidí confiar...

Ah... - Le sonreí mientras me acercaba a él. Me acerqué y lamí primero su cabeza, y luego bajé por el tronco, dejando leves besos y pequeñas mordidas.
Sentía sus suspiros de placer que me volvían loca.

- A pesar de que nunca lo hiciste, sabes bien como dar.. Ah..., Placer....- dijo entre medio de gemidos.

Terminé y nos besamos y abrazamos... senti su amigo entre mis piernas, buscando la entrada...