Bite

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Realmente Seongwoo odiaba los climas muy fríos, especialmente cuando estaba solo y solamente tenía su vieja colcha azul y un par de sábanas más para protegerlo del frío viento otoñal que anunciaba la pronta llegada del invierno.

Otro otoño y seguía solo, el frío de la cama se sentía más del lado del de Jaehwan. 3 años siendo pareja y dos de haberse casado en Estados Unidos, tal vez fue desde  otoño pasado que se empezó a sentir más el vacío de su esposo en su casa, las típicas llamadas tardes, trabajos extras y salidas con amigos que hacían las cosas demasiado obvias.

Había otro entre ellos. Tal vez no, pero igual Jaehwan estaba ausente en su vida. Quería creer cualquier cosa antes de lo que de veía a simple vista y tenía la esperanza de que Jaehwan cambiará.

Tal vez fue en verano que dejó de doler tanto, el vacío se fue llenando de a poco cuando aquel gato naranja entro a su departamento y su vecino de cabellos rosas toco la puerta a buscarlo. Una extraña y muy colorida combinación llenada de sonrisas amables y respuestas en dialecto de Busan por lo apenado que estaba el menor, así un pequeño acercamiento comenzó con su vecino que empezó con pequeñas charlas.

No era de Seúl y eso se le notaba a lenguas, un chico que prácticamente no usaba una camisa de I love Busan porque no sabia que existían, profesor de inglés en una High school cercana y definitivamente un amante de los gatos. Totalmente guapo y con un carisma y una personalidad amable impresionante.

Era imposible no caer, demasiado imposible. Kang Daniel era todo lo que no necesitaba en su vida mientras trataba de rescatar su matrimonio.

— Disculpa Seongwoo, Rooney otra vez esta muy malcriada y no quiere darse un baño... — Seongwoo agradeció que el vaso que tenía en la mano era de aluminio.

Solo abrió la puerta para dejar pasar a Daniel ya que sabía que era él porque vio a Rooney ocultarse en una vieja caja de zapatos de Jaehwan. Lo que no se espero era al chico sin camisa y con los cabellos húmedos por un obvio baño que le había dado su gata mientras había intentado darle un baño a ella. Solo se concentró en los labios del menor un poco rojos y con mordidas en el ellos ya que era una costumbre de él de cabellos Rosa cuando estaba nervioso, sabía que estaba hablando de algo mientras buscaba a su gata por todo el departamento y él ni dijo donde estaba.

— Se que es verano y Rooney el calor como que la afecta. Ella normalmente no es así y le gusta los baños — decía el chico de Busan mientras buscaba su gata por los muebles.

— Si el calor está muy fuerte en estos días — trataba de no ser tan obvio viéndolo pero imposible no ver aquel hombre en aquellas fachas por su departamento.

— Debo poner mejor seguridad en las ventanas, así evito estas molestias contigo — paso la mano por su cara avergonzado.

— No es ninguna molestia, a veces ella viene hacerme compañia en las noches o en mis fines de semana — no mentía sobre esto.

— ¿Tu esposo no debería estar haciendo eso? — preguntó el menor sin entender aquello.

— Debería, pero tu sabes. Estamos pasando... Por un momento difícil — suspiro cansado.

— Si comprendo, espero que mejore eso entre ustedes.  No creo que sea tan difícil, tú eres del tipo de persona con la que uno puede disfrutar de pasar el tiempo — en ese momento con esas palabras el corazón del mayor empezó a latir más rápido.

Ahí empezó todo, con pequeñas insinuaciones y indirectas, coqueteos y charlas más largas. Seongwoo se sentía bien con eso, después cuando Jaehwan llegaba sentía la culpa oprimiendole el pecho, no debería estar coqueteando con otro si estaba casado. Pero todo se olvidaba cuando estaba con Daniel, los besos comenzaron a mitad de verano y eran tan calientes como la estación. Se encendía algo entre ellos y más cuando sus manos se posaban donde no debían, como  toques y jadeos.

Bite»» NielOng (Wanna ONE) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora