Nuevo Comienzo

CAPITULO 1

La vida da muchas vueltas, un día puedes tenerlo todo: fama, adoración, cariño, admiración y muchas cosas más. Todo esto es el resultado del esfuerzo que has empleado a lo largo de tu vida. Pero sobre todo, tienes el amor de aquellas personas por las cuales has entregado todo de ti mismo, incluso arriesgando tu propia vida en más de una ocasión para protegerlas. Sin embargo, así como puedes tenerlo todo, un día puedes perderlo sin saber la razón, pasando de tenerlo todo a tener nada. Y eso es precisamente lo que nuestro querido protagonista está experimentando en estos momentos.

Mundo humano - Hogar de issei

Podemos ver al gran héroe del inframundo, el Sekiryuutei Hyoudou Issei despertando en su cama y ¿sólo?... Pues sí, lamentablemente para él, las chicas que anteriormente llegaron a pelearse por dormir junto a él por las noches ya no lo acompañan más hace un buen tiempo, el castaño abrió los ojos y vio el espacio vacío de su cama con nostalgia, sin embargo no había mucho que pudiera hacer, él siempre había respetado los deseos y el espacio de las chicas, no quería presionarlas a hacer algo que quizás ellas ahora no querían, por lo cuál sin más remedio decidió levantarse y asearse.

Draig: [Buenos días, compañero.] La voz profunda y cálida de Draig resonó en la mente de Issei, brindándole un sentimiento de familiaridad en medio de su desasosiego.

Issei: Buenos días, Draig. - respondió Issei con una mezcla de gratitud y tristeza en su tono.

Draig: [Te encuentras bien? No pareces muy animado...] El Gran Dragón Emperador Rojo, residente en la Boosted Gear de Issei, percibió el peso que cargaba su compañero y se preocupó por su bienestar.

Issei suspiró, sintiendo el peso de la desilusión sobre sus hombros. "Bueno... La verdad es que extraño mucho la vida antes del desastre del Triexa", confesó Issei con sinceridad, dejando escapar una pizca de nostalgia en su voz. "Era feliz antes de eso. Las chicas han cambiado tanto y echo de menos los tiempos en los que al menos me acompañaban en la academia."

Draig: [Ciertamente, tu vida ha cambiado mucho desde entonces...] Draig respondió con comprensión. "[Si te sirve de consuelo, mi vida está atada a la Sacred Gear, por lo cual estaré a tu lado hasta el fin de tus días, compañero]." Las palabras de Draig llevaron un atisbo de esperanza a Issei, recordándole que no estaba solo en su travesía.

Issei asintió, agradecido por la presencia constante de Draig en su vida. "Gracias, Draig. Tu apoyo significa mucho para mí", murmuró Issei, sintiendo una conexión profunda con su compañero dragón.

La conversación con Draig trajo cierto alivio al corazón de Issei. Aunque las cosas habían cambiado drásticamente, la promesa de la amistad y el apoyo incondicional de Draig le recordaron que aún había esperanza en medio de la adversidad.

Luego de esa charla el castaño se colocó su uniforme y se preparo algo de comida para desayunar e ir a la academia, en el camino iba recordando cada momento que pasó con cada chica del club, realmente extrañaba aquellos tiempos y daría lo que fuera por volver a ellos, iba tan inmerso en sus pensamientos que no se percató que se encontraba ya en la entrada de la academia.

Al llegar a la academia como era usual habían muchos estudiantes yendo a sus salones listos para otro día de clases, a algunos se les veía animados, a otros se les veía como era normal con pereza de estar otro día más en clases aburridas, este ambiente para Issei era de lo más común cada que llegaba a la academia, sin embargo ocurriría algo que no era lo normal y es que allí la vio, Asia venía hacia la entrada con una sonrisa, como hacía mucho que Issei no veía un escenario así se conmocionó al instante.

Asia, con una sonrisa radiante en su rostro y un brillo en sus ojos, se acercó a la entrada de la academia. Sus pasos eran ligeros y llenos de expectativa, como si estuviera a punto de encontrarse con algo que anhelaba con todo su corazón. El corazón de Issei comenzó a latir más rápido ante la visión de su amada Asia acercándose.