Capítulo 24: Tarde (1/2)

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-       ¿Estás intentando coquetear conmigo, Taehyung?

-       No, no – se echó a reír, cubriéndose los labios con una mano.

Jungkook arqueó una ceja, mientras una sonrisa insinuante y fugaz se bosquejaba en su boca y se inclinaba en un rápido movimiento hacia él.

-       Porque si es así, déjame decirte que ya me tienes – susurró con voz seductora, apretando su propio labio inferior entre sus dientes - Me has atrapado, precioso.

Las risitas en el grupo de muchachas desaparecieron al instante y se miraron de nuevo entre ellas, murmurándose algo y alzando las cejas en forma de disgusto. Taehyung dejó de sonreír y empujó el hombro de Jungkook levemente, acercándose más.

-       Shhh, Jungkook, están oyendo.

-       Que oigan, no me importa.

El grupo dejó de mirar y se levantaron al mismo tiempo, moviéndose hacia la salida. Taehyung bajó la mirada y siguió dando lentos sorbos a su soda, animándose de repente.

-       Jungkook... ¿nos podemos sacar una foto?

-       Detesto las fotografías, pero si quieres, te saco una a ti.

-       No, es que quería una foto contigo...

-       Si quieres una, te envío las que tengo en la noche para que duermas, sueñes con ellas, las beses en el momento que quieras y todo ese tipo de cosas...

El mayor suspiró profundamente, rompiendo en risas, al tiempo que el aire sacudía su cabello con suavidad y fruncía sus acorazonados labios.

-       Solo es una foto, por favor.

-       No me gustan, Tae.

-       Por favor, solo una...

-       No va conmigo – Jungkook siguió mirándolo y finalmente exhaló, buscando el celular entre sus bolsillos - Ya, ¿qué se supone que debo hacer? ¿Orejitas con los dedos o cositas así?

Taehyung se carcajeó, negando con la cabeza.

-       Solo sonríe.

-       Qué cursilería, no sé cómo me haces hacer esto.

Jungkook configuró la cámara y dejó el celular en medio de la mesa, sintiéndose extraño ante la situación. No le gustaban las fotografías, mucho menos esas que se solían tomar entre dos personas haciendo gestos a la cámara. Incluso, se sentía extraño sonriendo. No, no se sentía extraño, se sentía idiota. Y no logró comprender por qué abrió sus labios, profundizando la sonrisa y cerró un puño, solo dejando su dedo índice y su dedo medio a la vista. Qué locura, ni siquiera se le había ocurrido algo mejor. Se volvió repentinamente hacia Taehyung para ver la forma en la que se encontraba y el flashsonó, capturando el momento. Tomó su celular y sintió que algo se agitó en su estómago cuando la imagen se develó frente a sus ojos. Taehyung se encontraba con una de sus típicas sonrisas y la cabeza ladeada hacia su hombro y él estaba mirándolo con los ojos entrecerrados y los dos dedos de su mano, que suponían que representarían al grandioso símbolo pacífico que había visto en demasiadas imágenes, caídos hacia un lado, como si tuviese un cigarrillo invisible.  

-       Oh, diablos, está fatal – soltó, mientras el mayor acercaba sus ojos a la pantalla.

-       No es verdad, ha salido muy bien, a mí me gusta mucho.

-       A ti todo te gusta, pero esto está horrible.

Ambos se rieron y Jungkook se levantó, metiendo el celular a sus pantalones.

Inocencia Pasional. «KookV»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora