Cumpliendo Promesas (EN EDICIÓN)

Capítulo Treinta y Uno

—Podemos usar el de Leah, ¿no? —Kelly finalmente habla, pero mi padre inmediatamente la calla con una simple mirada.

—Cumplan con la orden que les di.

Sin más, se marcha a su despacho. Kelly deja salir un gran suspiro una vez que se va, y yo después de mucho tiempo estoy detestando a mi padre. ¿Cómo se atreve a tratar a mi invitada de ese modo?

—Lamento la actitud de papá, él esta un poco estresado —me excuso. Está igual o incluso peor que Leah.

Kelly sonríe y toma mi mano—. No te preocupes, todo está bien. Entiendo que pueda estar abrumado por asuntos de trabajo.

El sonido del celular de Kelly la hace separarse de mí nuevamente. Ella me hace una seña y se marcha para responder. Aprovecho para ir a la cocina donde encuentro a Magda terminando la cena. Ella sonríe en cuanto me ve entrar.

—¿Cómo estás, Magda? —me apoyo en la encimera.

—Un poco cansada, hijo —comienza a alistar los platos—, pero estoy bien.

—Me alegro. Escucha, ¿podrías agregar un plato más? —Magda cambia su semblante en ese momento.

—Claro —responde tajante. ¿Qué les pasa a todos ahora?

Luego de unos minutos con Kelly hablando por teléfono, nos encontramos cenando en un profundo silencio. Definitivamente esto no era parte de mi plan. Kelly me observa con ojos de cordero a punto de ser degollado y mi desesperación aumenta. Estoy por decir una frase cuando la figura de Leah aparece frente a nosotros.

Leah

Kelly.

Ella era la única que me miraba con la rabia saliendo de sus ojos. Los demás eran ajenos a mi alrededor.

Lo único en lo que pensaba era en como ahorcarla, en como lanzarla por un acantilado o simplemente en golpearla hasta dejarla tendida en el suelo. Mi único pensamiento era deshacerme de ella.

¿Por qué?

—Estás muy seria —Theo me abraza por detrás mientras observamos las estrellas. Yo me permito ser embriagada por su aroma mientras pienso en todo lo que me ha sucedido. No ha habido nada bueno.

—Tengo mucho en lo que pensar —suspiro.

—¿Por ejemplo? —Theo besa mi cabeza y mi corazón se derrite de amor. Realmente necesito de él.

—Mi padre, Mónica, mis abuelos, mi tía Louisa, Christian, Derek y Kelly.

—Con tu padre todo llegará a solucionarse. Él debe analizar lo que sucede, amor. Sin embargo no significa que él no te quiera cerca. Con Mónica aprenderás a quererla, ella no ha hecho nada para dañarte, y si lo hizo es porque jamás ha sido madre —él me voltea para vernos de frente—. Tus abuelos estarán bien al igual que tu tía. Respecto a Christian, Derek y Kelly, creo que estás exagerando.

Un momento.

No lo dijo.

—¿Exagerando? —enarco ambas cejas.

—Así es. Estás exagerando porque te sientes amenazada por esa chica cuando la verdad es que yo no lo veo así. Creo que no te gusta la competencia —Theo está por besarme, pero lo esquivo.

—Llévame a casa en este instante.

Él frunce el ceño—. ¿Qué?

—Llévame a casa —me cruzo de brazos.

—¡Oh vamos, Leah! —bufa—. No te has puesto así por lo que dije.

—¡Dices que me siento amenazada! —chillo—. ¡Incluso cuando te dije que en realidad ella no me agrada porque siento que esconde algo!

—No te agrada porque es bonita.

Eso era todo.

Mi mano viajó a su mejilla.

Esa sometida estaba arruinando mi vida. Ella y nadie más.

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Lean la bendita nota de la autora jaja

Bueno chicas, subí capítulo hoy ya que probablemente mañana no pueda por asuntos de trabajo y otras historias en las que debo trabajar.

Espero que les haya gustado, ¿ustedes que creen? ¿Margaret logrará sacar a Leah de en medio o alguien la salvará de todo ese enredo? Déjenlo en los comentarios.

Las invito a pasarse por mi nueva novela "Amor Criminal" con su primer capítulo disponible.

Muchas muchas muchas muchas bendiciones <3